El 24 de marzo se conmemoró el Día Mundial de la Tuberculosis
La tuberculosis aún cobra un alto número de vidas
La OMS propone insistir en un acceso equitativo a las pruebas diagnósticas rápidas, y en tratamientos orales más cortos para la infección y la enfermedad, en un programa a cumplir hasta el año 2027. Asimismo, herramientas digitales para la salud



La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció que intensificará la lucha contra la tuberculosis, que cobra 1,6 millones de vidas cada año, con nuevas pruebas, tratamientos e impulso a medidas de protección social. El viernes 24 de marzo se conmemoró el día mundial de lucha contra esa enfermedad.
La tuberculosis “es prevenible, tratable y curable y, sin embargo, esta lacra ancestral que aqueja a la humanidad desde hace milenios sigue causando sufrimiento y muerte a millones de personas cada año”, dijo al presentar la iniciativa Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
La iniciativa comprende “apoyar a los países para que intensifiquen su respuesta, ampliando el acceso a los servicios de prevención, detección y tratamiento de la tuberculosis como parte de su camino hacia la cobertura sanitaria universal, y para que refuercen sus defensas contra las epidemias y pandemias”, dijo Tedros.
Mortal La OMS, con sede en Ginebra, Suiza, considera a la tuberculosis como el segundo asesino infeccioso más mortal del mundo, después del virus de la covid
Al cabo de dos décadas de avance contra la enfermedad, la pandemia covid-19 impactó negativamente en su combate: solo en 2021 se presentaron 10,6 millones de nuevos casos y, con 1,6 millones de muertes, se convirtió en la enfermedad infecciosa más mortífera después de la covid.
El mayor porcentaje de casos nuevos, 46 %, se registró en el sudeste asiático, seguido de África (23 %) y Pacífico occidental (18 %).
La tuberculosis es una enfermedad infecciosa que suele afectar a los pulmones y es causada por una bacteria (Mycobacterium tuberculosis). Se transmite de una persona a otra a través de gotitas de aerosol suspendidas en el aire, expulsadas por quien tiene la enfermedad activa.
Con las experiencias durante la pandemia y en los años inmediatamente anteriores (2018-2022), la OMS propone insistir en un acceso equitativo a las pruebas diagnósticas rápidas, y en tratamientos orales más cortos para la infección y la enfermedad, en un programa a cumplir hasta el año 2027.
Asimismo, en un mayor acceso a la protección social, y en otras innovaciones, como herramientas digitales para la salud.
Se estimulará la rendición de cuentas en la materia por parte de los Estados, para abordar factores clave de la epidemia, como la pobreza, la desnutrición, la diabetes, el VIH, el consumo de tabaco y alcohol, y las malas condiciones de vida y de trabajo.
La iniciativa subraya la “apremiante necesidad” de aumentar las inversiones nacionales e internacionales en servicios, investigación e innovación en materia de tuberculosis, especialmente en el desarrollo de nuevas vacunas.
La única vacuna actualmente disponible tiene más de un siglo, y no protege adecuadamente a los jóvenes y adultos, que representan la mayoría de las transmisiones de tuberculosis.
Pide que los servicios y programas, especialmente en países con una elevada carga de tuberculosis, sean reconocidos como un componente esencial de los sistemas de salud, y que se refuercen la atención primaria y la preparación y respuesta.
En particular, se recomienda acelerar la implantación de los nuevos tratamientos orales más cortos, para tratar la tuberculosis farmacorresistente; por ejemplo, cuando la enfermedad resiste antibióticos como rifampicina.
En 2021, casi medio millón de personas enfermaron de tuberculosis resistente a la rifampicina, y solo una de cada tres accedió al tratamiento.
Estudios de la organización humanitaria Médicos Sin Fronteras dan cuenta de hasta 90 % de curaciones con los nuevos tratamientos, versus 52 % con los convencionales, y con menos efectos secundarios.
Sin embargo, son tratamientos más costosos y objeto de controversias acerca del empleo de patentes, como es el caso del contencioso que se desarrolla entre India y la trasnacional Johnson & Johnson.
La Asamblea General de las Naciones Unidas convocará una reunión de alto nivel sobre tuberculosis el próximo septiembre, la cual, según Tedros, “debería ser un punto de inflexión en la lucha contra la tuberculosis, si los líderes se comprometen de manera real y duradera a invertir en la respuesta”.
Más de 8.000 pacientes en Bolivia
El Programa Nacional de Control de Tuberculosis reportó más de 8.000 pacientes con esta enfermedad en la gestión 2022, informó la responsable de la institución, Magna Olarte Huamán, quien instó a aunar esfuerzos y asumir acciones para evitar su expansión, en el Día Mundial de la Tuberculosis.
El Día Mundial de la Tuberculosis, que se conmemora cada 24 de marzo, tiene el objetivo de aumentar la conciencia pública sobre las devastadoras consecuencias sanitarias, sociales y económicas de esta enfermedad e intensificar los esfuerzos para poner fin a la epidemia mundial.
El lema de este año es ¡Sí! ¡Podemos poner fin a la TB!
Vacuna La única vacuna actualmente disponible tiene más de un siglo, y no protege adecuadamente a los jóvenes y adultos
La fecha marca el día en 1882 cuando Robert Koch anunció el descubrimiento de la bacteria que causa la tuberculosis, lo que abrió el camino para el diagnóstico y la cura de la enfermedad.
“Debemos intensificar esfuerzos para acabar con la epidemia mundial y se toman acciones a nivel internacional, y Bolivia se adhiere a esta actividad con el Programa desde 1935 haciendo el seguimiento a los pacientes”, dijo Olarte
“Todos estamos propensos a enfermar de tuberculosis si no se cuida la nutrición”, alertó.
Señaló que el 5% de la población puede tener tuberculosis sobre todo las personas vulnerables e inmunodeprimidas como aquellas que tienen VIH, desnutridos, diabéticos, fumadores.
Los síntomas son pérdida de peso, tos con o sin expectoración, sudoración, fiebre, entro otros.
El Programa Nacional de Control de Tuberculosis lleva adelante actividades preventivas, de diagnóstico ofertando métodos más sensibles y actividades curativas con medicamentos de alta calidad y eficacia, de acuerdo a estándares internacionales.
Entre los objetivos está el fortalecimiento de la atención integral al paciente, las estrategias innovadoras en el control de la enfermedad, con énfasis en la eliminación del estigma y discriminación, y desarrollar acciones colaborativas con los programas de VIH y Enfermedades no Transmisibles.
Por el Día Mundial de la Tuberculosis en todo el país se desarrollaron ferias y otras actividades de concientización y prevención de esta enfermedad en 3.500 establecimientos de salud que manejan tuberculosis, universidades y en los servicios departamentales de salud, entre otras instituciones, dijo Olarte.
En Tarija hubo una caminata concienciando sobre el daño que causa esta enfermedad y cómo se puede prevenir o tratar a tiempo. En la misma participaron trabajadores de salud, universitarios y conscriptos de diferentes unidades militares.
La tuberculosis avanzó mortalmente debido al covid
La tuberculosis avanzó en el mundo debido a la interrupción de servicios de tratamiento causada por la pandemia covid-19, y en 2021 causó la muerte de 1,6 millones de personas, entre ellas 187.000 portadoras de VIH, indica un reporte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En total 10,6 millones de personas contrajeron la enfermedad el 2021, con un aumento de 4,5% de enfermos (9,9 millones en 2020), el primero documentado en muchos años.
Esa cifra incluyó un ascenso de tres por ciento de los casos resistentes a los antibióticos como rifampicina, que sumaron 450.000.
La mayor incidencia estuvo en Asia del sur y sureste (4,8 millones), en el Pacífico occidental (1,9 millones) y África (2,5 millones). Se reportaron 860.000 casos en la región OMS del Mediterráneo oriental, 300.000 en América y 230.000 en Europa.
La OMS explicó que, como muchos otros, los servicios de atención y tratamiento de esa enfermedad se suspendieron debido a la pandemia, y la interrupción tuvo un impacto especialmente grave en las estrategias de respuesta a la tuberculosis.
También afirmó que los conflictos en Europa del Este, África y Medio Oriente han exacerbado aún más la situación de las poblaciones vulnerables.
La OMS, con sede en Ginebra, Suiza, considera a la tuberculosis como el segundo asesino infeccioso más mortal del mundo, después del virus de la covid.
Los continuos desafíos para brindar y acceder a los servicios esenciales de tuberculosis, incrementados por la covid, implicaron que muchas personas con la enfermedad no hayan sido diagnosticadas ni tratadas.
Disminuyó la cantidad de personas que reciben tratamiento para la tuberculosis resistente y multirresistente a los medicamentos, y la OMS estima que el tratamiento en nuevos casos solo lo iniciaron un tercio de las personas que lo necesitaban.
El gasto global en servicios esenciales para tuberculosis también disminuyó, de 6.000 millones de dólares a 5.400 millones en 2021, lo que representa menos de la mitad del objetivo mundial de 13.000 millones de dólares anuales.