Ríndete a tu ser
Nadie dijo que fuera fácil.
Hay que tener valor y coraje en la vida, no solo para enfrentarse al mundo, sino también para enfrentarse a uno mismo.
La vida no parará de traerte experiencias duras y agotadoras hasta que llegues al límite y te entregues totalmente.
Pues no podrás hallar la completa libertad, hasta que te rindas completamente de tu propia batalla interna.
La paz y la felicidad son la consecuencia de esta entrega a la vida, de traspasar las barreras de tus propios límites y hallar el horizonte.
Hasta que no digas y sientas en lo más profundo de tu corazón: “me rindo a mi ser”.
Seguirás batallando y enfrentándote contigo mismo y con toda la existencia.
Éste es el mayor de los éxitos...
El logro más grande de todas las batallas.
Y solo puedes alcanzar este estado, cuando ya tienes bastante y te entregas a lo que es.
Para fluir con tu propia experiencia con una total aceptación y comprensión de que todo lo que sucede en la vida es únicamente para tu propia evolución.
Así que "ríndete a tu ser".