Derechos vulnerados de los héroes silenciosos
El día del niño se celebra en Bolivia desde el año 1955, cuando el presidente de aquella época, Víctor Paz Estenssoro, estableció mediante la promulgación del Decreto Supremo 04017 que el 12 de abril de cada año sea dedicado a los infantes, como el “Día del Niño Boliviano”. El objetivo de esta celebración es visibilizar la situación de los niños, sus necesidades y cuidados específicos que ellos requieren para alcanzar su derecho a la igualdad y equidad de género.
En este día se recuerda que todos los niños tienen derecho a la salud, la educación y la protección, independientemente del lugar en el que hayan nacido.
El Estado es responsable de garantizar y velar por la igualdad y cumplimiento de los derechos fundamentales de los niños y niñas de acuerdo a lo estipulado en la Constitución Política de Estado, a través de los órganos del Estado y demás instituciones públicas y privadas, en todos sus niveles y las entidades territoriales autónomas. “La sociedad en general debe dar cumplimiento a los derechos de los niños y las niñas, con el fin de crear conciencia social y la cultura del buen trato sobre las necesidades y cuidados específicos que ellos requieren”
Actualmente las situaciones de extrema pobreza en las que viven miles de familias en nuestro país, careciendo de lo más elemental para subsistir como ser la alimentación, es la principal causa del origen del trabajo infantil.
Es nuestro medio se observa a muchos niños y niñas en las calles pasando muchas necesidades, expuestos a todo tipo de peligro y no viviendo su etapa de la niñez como corresponden. Muchos de ellos son cuartados de su derecho y de su inocencia, puesto que se ven obligados a trabajar desde muy temprana edad, vendiendo caramelos u otros productos, limpiando parabrisas, vagalleros, ayudando a cargar bolsas, voceros en los micros o trufis, algunos piden monedas, comida para alimentarse, y otros trabajos informales, esto es una dura realidad que vemos a diario por las principales calles de nuestra ciudad.
Dedicar un día a la infancia también sirve para hacer un llamado mundial sobre las necesidades de los más pequeños y para reconocer la labor de las personas que cada día trabajan para que los niños y niñas tengan un futuro mejor.
Por otro lado, destacar que los niños nos han demostrado la gran fortaleza que poseen al enfrentar los cambios propios de una realidad, de un aislamiento que nos trajo la pandemia, demostraron que se pueden adaptar a nuevas situaciones y, aun así, no perder esa alegría, ternura, nobleza y humildad, que los caracteriza.
Los niños son llamados héroes silenciosos pues han aprendido y aceptado que su bienestar y el de su familia dependía de dejar de jugar en los parques, de evitar reuniones con sus amigos, de asistir a clases presenciales y jugar en el patio del colegio, de perder esa libertad que tanto disfrutaban antes de la pandemia
Actualmente, muchas instituciones públicas y privadas, unidades educativas, empresas otorgan mucha importancia a este día obsequiando algunos regalos, dulces, juguetes y alimentos. También se realizan diferentes actividades para homenajear a los niños como ser diferentes concursos, juegos recreativos y otros, por algunas horas disfrutan a lo máximo de esos momentos de diversión, se sienten importantes y disfrutan de cada detalle que se les realiza.
Aunque más que un festejo con regalos, el 12 de abril es un día en el que se debe tomar conciencia y reflexionar sobre el respeto a los derechos de los niños y la situación de estos en nuestra sociedad. Las personas mayores, las diversas organizaciones, instituciones públicas, privadas y nuestras autoridades deben realizar acciones de acercamiento y tratar de concientizar sobre la importancia de cuidar de sus derechos. Esas acciones de respeto se deberían convertir en actitudes diarias para mejorar la calidad de vida, llevar felicidad y alegría a nuestros niños/as de Bolivia.