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Chile y el litio

Como nada de lo que se refiera al litio puede ser para los bolivianos banal, consideramos pertinente comentar ese análisis, firmado por Francisca Orellana.Comienza la periodista con afirmaciones muy contundentes: Se estima que las reservas de petróleo se acabarán en 40 años, por lo que el...

Como nada de lo que se refiera al litio puede ser para los bolivianos banal, consideramos pertinente comentar ese análisis, firmado por Francisca Orellana.Comienza la periodista con afirmaciones muy contundentes: Se estima que las reservas de petróleo se acabarán en 40 años, por lo que el litio es considerado el combustible del futuro. Chile, pese a ser el mayor productor del mineral en el mundo al concentrar el 37% de la oferta, sólo se ha dedicado a la exportación y no a desarrollar una industria con valor agregado, como podría ser la de almacenamiento de energía, que se calcula moverá 25 mil millones de dólares al año en el 2015.Descartemos, por ahora el que quizás dentro de tres años ya la economía mundial no se mida en dólares sino en yuanes, porque para el caso da lo mismo, porque la señora Orellana continúa informando que “una gran señal para dar vuelta ese panorama se dio hace unos días luego de que el Centro de Innovación del Litio (CIL), liderado por SQM, Chemetall, Marubeni y la Universidad de Chile -y considerado el primer gran esfuerzo entre privados y la academia en este tema-, dio el arranque a los primeros cuatro proyectos de alta investigación y desarrollo para generar tecnologías que den un salto en la cadena de valor en relación a las baterías, el principal producto que utiliza este mineral, para dotar de energía principalmente a notebook, celulares o smarthphones, entre otros”Ahí no se quedan en ambigüedades ni en generalidades, son nombres y entidades concretas en Chile, que están avanzando indiscutiblemente en algo en lo cual los bolivianos todavía nos consideramos líderes. Confesamos que ya tenemos serias dudas sobre esto último.No podemos transcribir más que una pequeña muestra de lo que se menciona en el análisis mencionado, pero nos imaginamos que las personas realmente interesadas en el tema tienen formas de obtenerlo, gracias a las facilidades que brinda el internet. Y suponemos, también, que las autoridades bolivianas deben también tener esa información… y muchas más, porque no queremos ni pensar en que con el litio pudiera pasarle a Bolivia lo mismo que con el salitre. ¿Todos lo recordamos, cierto?Pero cumplamos nosotros dando, como habíamos dicho, al menos una mínima muestra de lo que menciona el análisis de la colega chilena de Diario Financiero. Menciona, por ejemplo, a Eduardo Morales, gerente general de Chemetall, que tiene el 16% de la producción a nivel mundial, y dice “la demanda cambia y nos llegan requerimientos especiales para satisfacerlos. Aquí es donde la nanotecnología, por ejemplo, se ha transformado en un medio para mejorar los desarrollos”, explica, agregando que no por nada grandes empresas como Toshiba, Sony, Altair y Samsung, ya están trabajando en proyectos relativos al litio, “lo que muestra lo competitivo del mercado”.Alguien nos podrá explicar, en forma verosímil y clara, ¿en qué andamos nosotros?

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