Las enfermedades raras

Sobre ella y sobre varias otras “enfermedades raras” hay mucho que decir, porque es posible que sean efectivamente “raras” en algunos lugares del todavía llamado Primer Mundo, pero son muy comunes en la periferia, en el también mal llamado Tercer Mundo.Comencemos, entonces, con la...

Sobre ella y sobre varias otras “enfermedades raras” hay mucho que decir, porque es posible que sean efectivamente “raras” en algunos lugares del todavía llamado Primer Mundo, pero son muy comunes en la periferia, en el también mal llamado Tercer Mundo.Comencemos, entonces, con la lepra, que es una “enfermedad infecciosa” generalmente producida por  la bacteria Mycobacterium leprae o por Mycobacterium lepromatosis. Mycobacterium leprae. El bacilo fue descubierto en 1874 por el médico noruego Gerhard Armauer Hansen. No estamos hablando de algo “nuevo”, porque  se sabe que la lepra afecta a la humanidad desde al menos el siglo sexto antes de Cristo, fue bien diagnosticada en las civilizaciones de la Antigua China, Antiguo Egipto e India.En 1995, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimaba que entre dos y tres millones de personas en todo el mundo estaban discapacitados de forma permanente por lepra. Aunque las forzadas cuarentenas o segregación de pacientes, constituyen medidas innecesaria y no éticas, aún se mantienen leprosorios en países como Brasil, España, India, China, Japón, Egipto, Rumania,Nepal, Somalia, Tanzania, Liberia, Vietnam y República Dominicana.Se estima que entre dos a tres millones de personas están permanentemente discapacitadas debido a la lepra. India tiene el mayor número de casos, y nos llama la atención, sobre todo, que en segundo lugar en el mundo esté Brasil. Y no porque Brasil presuma de ser campeón en todo, sino porque algunos brasileros presumen de ya no ser del Tercer Mundo. Pero que lo son, lo son.Pero volvamos al tema, para que no crean que, imitando a los marchistas, anunciamos algo y hacemos otra cosa. Los marchistas no de ahora, sino de todos los tiempos. También de aquellos tiempos en los cuales el que marchaba era Evo Morales. Los recordamos, por supuesto.Decíamos que así como las recetas del Fondo Monetario Internacional no le sirven a las enfermedades de la economía de países subordinados, los conceptos y las definiciones de la Organización Mundial de la Salud no le sirven necesariamente a todo el mundo.Por eso, bien categorizadas y con organizaciones internacionales que son infaltables, existen también las “enfermedades raras”.Según la definición de la Unión Europea, enfermedades raras, minoritarias, huérfanas o poco frecuentes, incluidas las de origen genético, son aquellas enfermedades con peligro de muerte o de invalidez crónica que tienen una prevalencia menor de 5 casos por cada 10.000 habitantes.Entre esas figura la rabia, que bien sabemos que en Tarija no es, de ninguna manera, una enfermedad rara.Y para las “enfermedades raras” existen los “medicamentos huérfanos”. A los cuales, por su importancia, preferimos dedicarles, por separado, un comentario especial.

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