Indigestión de poder

Y sigue esta tendencia de agredir, de descalificar opiniones contrarias a las de uno, y etiquetar a gente que no piensa como nosotros”.  Frente a esta simple y llana declaración no faltó el listillo asambleísta que pretendió desmentir a la diplomática recordándole que no hay oposición...

Y sigue esta tendencia de agredir, de descalificar opiniones contrarias a las de uno, y etiquetar a gente que no piensa como nosotros”.  Frente a esta simple y llana declaración no faltó el listillo asambleísta que pretendió desmentir a la diplomática recordándole que no hay oposición política capaz de polarizar ni un iceberg de Groenlandia. Pero - digo yo - lo que sí hay es intimidación, persecución a cualquier disidente, detenciones contra ex funcionarios de anteriores gobiernos. A los opositores se les aplican las calificaciones de imperialistas, neoliberales, separatistas, racistas y otras lindezas. Pero también se está registrando una enconada polarización entre los propios masistas que se están acusando, destituyendo, agrediendo como gatos rabiosos. Entre los masistas confrontados abundan los piropos de tránsfuga, vendido, y otros muchos palabros. 

Decía que al Gobierno el poder se le ha indigestado. Por ejemplo: Al Comandante de Policía, general Oscar Nina, al que no creo molestar si supongo que está más cerca del MAS que de UN, se le ha subido el poder a la mollera y amenaza con iniciar acciones legales contra aquellas personas que intenten afectar a la entidad verde olivo.  Así las cosas, temo recordar que, el pasado mes de mayo en Caranavi se produjeron unos enfrentamientos entre el pueblo y los policías, de los que resultaron dos comunarios muertos y 26 heridos entre civiles y policías.

Si el Gral. Oscar Nina cumple su amenaza, al primero que deberá empapelar es al Defensor del Pueblo y a los directivos de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, quienes elaboraron el informe sobre los sucesos violentos ocurridos en Caranavi. Allí se afirma que la policía se excedió en la represión, Pienso que el General quedaría muy desairado si tratara de negar lo que todo el pueblo de Caranavi y todo el país conocen sobre aquellos hechos lamentables.  Y si el Gobierno rebate el informe del Defensor del Pueblo y sus colaboradores de Derechos Humanos,  éstos tienen, ante todo la obligación de “sostenello y no enmendallo”, como decían los clásicos castellanos.  Y si no, por una cuestión de dignidad, deben renunciar.

Vengamos ahora a la captura del ex prefecto de La Paz, Chito Valle, en Lima, en un operativo de Interpol.  El Gobierno lanzó las campanas al vuelo anunciando que en un tris, tendríamos a Chito en La Paz. Los funcionarios demostraron una penosa ignorancia de lo que son los usos y costumbres internacionales. No se traslada a un delincuente de un lado al otro de la frontera como se hace con el contrabando de garrafas de gas. ¿O creían que a un preso se lo franquea con unas estampillas como a una carta certificada, por correo ordinario?


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