Crónica política de la jornada
Santa Cruz refuerza la estrategia económica, el Gobierno niega desabastecimiento
El Gobierno insiste en que están previstas medidas para evitar el desabastecimiento del país, pero la determinación de las entidades económicas cruceñas amenaza con generar otros problemas sociales



Jornada de transición pero con muchos nervios en el conflicto desatado por la detención del gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, en el marco de la investigación del caso denominado “Golpe de Estado I” como parte del relato oficial para explicar los hechos de 2019 que acabaron con el presidente renunciante Evo Morales rumbo a México, pero que además se mezcla con una necesidad de autoafirmación dentro del pulso interno del MAS y con la pulsión secesionista cruceña. Esclarecer si primero fue el huevo o la gallina siempre fue un dilema.
El día empezó con el juez negando la acción de libertad interpuesta por la defensa de Camacho donde se alude a los motivos de salud del gobernador para emitir medidas sustitutivas a la detención en prisión. En cualquier caso, dicen las crónicas, autorizó que fuera trasladado a un centro médico en caso de emergencia. Qué cosa.
“Demostrémosle al Gobierno que somos un pueblo unido. Hicimos escapar al fraudulento. Fue porque estábamos unidos todos los bolivianos, es la receta que no nos va a fallar” Rómulo Calvo, presidente cívico
No hubo demasiada reacción porque todos lo esperaban y estos días son para pensar más que para actuar, tanto para unos como para los otros. Hasta parecería que los actos violentos en las noches y la represión policial van aflojando para dejar paso a una confrontación más clásica, y más de desgaste.
Hay más marchas y se repiten por todo el país, aunque la tensión siga siendo baja. La posibilidad de que “pase algo” siempre existe, pero también la de que “no pase nada”, y nadie quiere aún apostar demasiado. Pasó en 2019. El 11 de enero está declarado Día Nacional de la Protesta y será otro día para medir el termómetro social.
El oficialismo, a su manera, busca ganar por aplastamiento y ya tiene a los suyos rendidos. A Camacho le llueven las denuncias y el propio ministro Iván Lima aseguró que se busca conectar directamente a Camacho con el proceso de Senkata y Sacaba porque él fue el que “nombro al ministro de Defensa de Áñez”, algo insostenible jurídicamente por mucho que pudiera hacer la sugerencia. En el Comité Cívico ni lo han comentado.
¿Pánico al desabastecimiento?
Lo que está haciendo más daño, sin embargo, es el bloqueo económico que de forma todavía un tanto descoordinada se empieza a instalar en Santa Cruz. El prestigioso economista Jaime Dunn, por ejemplo, señalaba ayer que en dos restaurantes cruceños le habían advertido que no le darían factura de acuerdo a lo observado por el Comité. De eso va el “resguardo de instituciones” y, por el momento, lo que se sabe es que el gobierno no está boyante de liquidez.
El cierre perimetral y la determinación de la tríada económica cruceña – CAO, CAINCO y FEPSC – de no comerciar ni enviar alimento al interior del país va en serio y por muchas cuentas que se hagan, Santa Cruz es irremplazable en esto. En Tarija ya se advierte la falta de carne y no tardará en reconocerse en el resto de departamentos. El fantasma de la inflación recorre todos los Ministerios y el temor a un estallido social si sube el precio del pan es grande.
Contra eso, ocurrencias, sobre todo del ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Remmy Gonzáles, que el miércoles estimaba que el Beni podía “producir” de repente 120.000 vacas extra y ayer, que habría que revertir las tierras “si no cumplen enviando alimentos”, en una declaración muy propia de la colonia.
En este contexto habló esta vez el Vicepresidente David Choquehuanca, de nuevo en la mira de la Dirección Nacional del MAS, que cuestionó un “silencio sospechoso” y “actitud pasiva” después de la detención de Luis Fernando Camacho.
“Tenemos que superar juntos cualquier intento de división, construir un país unido y tenemos que identificar a los que fabrican la confrontación que muchas veces puede venir de ambas puntas del palo, pero nuestro pueblo sabio es, ya ha despertado”, sostuvo el vicepresidente según recoge la red Erbol.
“Estos quieren destruir nuestra democracia, violan nuestra Constitución Política del Estado, no quieren hacer caso a las leyes, quieren impunidad, quieren desgastar la gestión de nuestro presidente elegido por nosotros”, añadió.
Choquehuanca también hizo mención que hay “mucha gente interna y externa” que quiere desgastar la gestión del Gobierno.
En ese sentido, instó a los movimientos sociales cuidar al presidente Luis Arce. “Él es nuestro papá, piensa en todos sus hijos”, añadió.
Desde la aprehensión y posterior encarcelamiento de Camacho se desataron una serie de movilizaciones en la capital cruceña lo que derivó a una serie de hechos de violencia y aprehensiones.
El riesgo de la financiación externa
Aunque el conflicto en Perú está opacando en el plano internacional lo que sucede en Bolivia, lo cierto es que el desafío de Santa Cruz y la guerra económica iniciada puede acabar haciendo mella en la financiación externa. En las próximas semanas las agencias de calificación de riesgos emitirán nuevos dictámenes sobre las perspectivas de la economía boliviana, algo a lo que no ayuda en absoluto el enfrentamiento con la región económicamente más poderosa del país. El resultado puede ser una rebaja en la calificación que, de inmediato, se traduce en un encarecimiento de las tasas de interés para acceder a crédito internacional justo en un año en el que buena parte del presupuesto depende de ese concepto.