Iglesia Católica pide garantías para quienes disienten del Gobierno y no sean víctimas de persecución
A la conclusión de la CXI Asamblea de Obispos de Bolivia, la Conferencia Episcopal Boliviana (CEP) pidió “respeto y garantías para quienes en justicia y derecho disienten de la visión de quienes nos gobiernan para que no sean víctimas de persecución y del uso inapropiado de la justicia”.
El pronunciamiento exhorta a las fuerzas del orden a que no sean factores de enfrentamiento ni de violencia, sino que actúen conforme a su misión de proteger a la población.
Los obispos sostienen que quienes gobiernan el país están llamados a garantizar los derechos de todo ciudadano con una actitud de escucha auténtica para una convivencia pacífica, dialogante, con responsabilidad y procurando el bien común.
Hacen un llamado a retornar al clima de convivencia pacífica y serena a fin de que pueda prevalecer el bien de todos. Asegura que este objetivo solo se conseguirá si hay un trabajo conjunto que permita superar las dificultades y posiciones contrapuestas.
“En el nombre de Dios, pedimos, que acabe el hostigamiento entre hermanos bolivianos y exhortamos a quienes están llamados a hacerlo que abran espacios auténticos de diálogo, tolerancia y reconciliación, que reaviven la fraternidad entre todos”, argumentó.
La Conferencia exhortó a las comunidades cristianas a intensificar la oración promocionando la cultura de la fraternidad y el respeto a los derechos humanos, y hace votos para que la cercana Navidad permita construir renovados caminos de escucha, respeto y tolerancia.
La lectura del mensaje “¡Sí a la cultura del encuentro!” fue realzada por el presidente de la Conferencia, monseñor Aurelio Pesoa Ribera y acompañada del vicepresidente de la CEB, Ricardo Centellas, y el secretario general de la CEB, monseñor Giovani Arana.