Se trata de una de las principales agroexportadoras de Argentina
Fernández deroga decreto para expropiar Vicentín
Pese a la derogación de la intervención, el presidente aseveró que su "obligación es que se investiguen las maniobras que provocaron el estado de falencia de la empresa"



El presidente argentino, Alberto Fernández, derogó el viernes el polémico decreto que dispuso la intervención por 60 días de la empresa Vicentín, una de las principales agroexportadoras del país, que había firmado en junio con el fin de declararla como bien de utilidad pública para su expropiación.
Fernández explicó su decisión en el hecho de que el juez interviniente en el concurso de acreedores que atraviesa Vicentín "no ha permitido hasta aquí que el Estado pudiera conocer cuál es el pasivo real de la compañía", y por ello no está dispuesto a tomar riesgos por la nacionalización de sus pasivos.
El magistrado "ha impedido también el acceso de la intervención a su gestión y, lo que es peor aún, ha mantenido en sus funciones a los mismos directores que, ante la pasividad del tribunal, siguen sin entregar el balance y memoria del ejercicio 2019", señaló el mandatario en su cuenta de la red social Twitter.
El presidente argentino subrayó que la intervención "era fundamental antes de declarar a Vicentín S.A.I.C. como un bien de utilidad pública, para conocer su verdadero estado patrimonial".
Recuperar créditos de la empresa
"En estas condiciones, no estamos dispuestos a adoptar riesgos que podrían traer como consecuencia la estatización de deuda privada para que los argentinos y las argentinas deban hacerse cargo del irresponsable proceder de los actuales administradores", declaró Fernández, quien resolvió que el Estado "no va a comprometer recursos públicos mientras el actual directorio permanezca en la empresa".
Fernández aseguró que su intención era rescatar a Vicentín, preservar los activos, mantener las fuentes de trabajo y colaborar con los productores agrícolas a los que la empresa suspendió los pagos a fines de 2019.
Pese a la derogación del decreto de intervención, el presidente aseveró que su "obligación es que se investiguen las maniobras que provocaron el estado de falencia en el que la empresa ha caído".
"He dado instrucciones a todos los organismos públicos involucrados para que realicen las acciones civiles, comerciales y penales que permitan la recuperación de los créditos reclamados en el concurso preventivo, dirimir responsabilidades y preservar los intereses del Estado", indicó.