Los sonidos de los huesos
Elías Vidaurre Médico Seguro que te lo has preguntado más de una vez. ¿Cuál es el motivo de ese chasquido que se produce, por ejemplo, al estirar los nudillos? ¿Y el de la rodilla al subir las escaleras? ¿Son normales? ¿O pueden alertarnos de algún problema, por ejemplo, de la falta...



Elías Vidaurre Médico
Seguro que te lo has preguntado más de una vez. ¿Cuál es el motivo de ese chasquido que se produce, por ejemplo, al estirar los nudillos? ¿Y el de la rodilla al subir las escaleras? ¿Son normales? ¿O pueden alertarnos de algún problema, por ejemplo, de la falta de ejercicio físico o de una incipiente artrosis que estamos a tiempo de frenar?
Conociendo más
Recuerda que los ruidos de huesos ‘normales’ suelen deberse a movimientos, y nunca se acompañan de dolor ni de inflamación de la articulación. En general, en las articulaciones se pueden dar varios tipos de ruidos: chasquidos, crujidos, sensación de roce. Algunos pueden originarse en los tejidos que rodean la articulación, por ejemplo los tendones.
El chasquido que se produce en los nudillos al forzar la flexión o estirar los dedos y se debe a un fenómeno de cavitación (la formación de una burbuja); es decir, al forzar el vacío flexionando o estirando los dedos se produce una burbuja a partir del nitrógeno disuelto en el líquido sinovial (sustancia entre los huesos de las articulaciones) y esto produce ruido.
Por eso, debe pasar un rato antes de poder provocar de nuevo el chasquido. Este ruido nunca es patológico, a diferencia del que puede deberse a una artrosis de rodilla. Existen fármacos que pueden provocar inflamación articular o de la plica (membrana) sinovial que rodea los tendones y generar crepitaciones u otros ruidos.
[gallery type="slideshow" size="full" ids="5048"]
Si el sonido se acompaña de dolor y sensación de rigidez, hay que consultar con el médico.
Los ruidos articulares pueden darse tanto en hombres como en mujeres, de distintas edades.
Los fenómenos ruidosos pueden aumentar al iniciarse la degeneración articular propia de la edad.
Seguro que te lo has preguntado más de una vez. ¿Cuál es el motivo de ese chasquido que se produce, por ejemplo, al estirar los nudillos? ¿Y el de la rodilla al subir las escaleras? ¿Son normales? ¿O pueden alertarnos de algún problema, por ejemplo, de la falta de ejercicio físico o de una incipiente artrosis que estamos a tiempo de frenar?
Conociendo más
Recuerda que los ruidos de huesos ‘normales’ suelen deberse a movimientos, y nunca se acompañan de dolor ni de inflamación de la articulación. En general, en las articulaciones se pueden dar varios tipos de ruidos: chasquidos, crujidos, sensación de roce. Algunos pueden originarse en los tejidos que rodean la articulación, por ejemplo los tendones.
El chasquido que se produce en los nudillos al forzar la flexión o estirar los dedos y se debe a un fenómeno de cavitación (la formación de una burbuja); es decir, al forzar el vacío flexionando o estirando los dedos se produce una burbuja a partir del nitrógeno disuelto en el líquido sinovial (sustancia entre los huesos de las articulaciones) y esto produce ruido.
Por eso, debe pasar un rato antes de poder provocar de nuevo el chasquido. Este ruido nunca es patológico, a diferencia del que puede deberse a una artrosis de rodilla. Existen fármacos que pueden provocar inflamación articular o de la plica (membrana) sinovial que rodea los tendones y generar crepitaciones u otros ruidos.
[gallery type="slideshow" size="full" ids="5048"]
Si el sonido se acompaña de dolor y sensación de rigidez, hay que consultar con el médico.
Los ruidos articulares pueden darse tanto en hombres como en mujeres, de distintas edades.
Los fenómenos ruidosos pueden aumentar al iniciarse la degeneración articular propia de la edad.