Cómo el MAS puede ganar en Tarija en 2020
En todo el país, las listas de senadores y diputados son codiciadas por los aparatos de los partidos. En todos los partidos. El Movimiento Al Socialismo (MAS) suele colocar a sus mejores cuadros para concurrir a estas elecciones y apoyar a Evo Morales en las regiones más delicadas. Hasta Carlos...



En todo el país, las listas de senadores y diputados son codiciadas por los aparatos de los partidos. En todos los partidos. El Movimiento Al Socialismo (MAS) suele colocar a sus mejores cuadros para concurrir a estas elecciones y apoyar a Evo Morales en las regiones más delicadas. Hasta Carlos Romero puso el hombro como senador en 2014 para la campaña de Sata Cruz, pues duró apenas unas semanas en el cargo hasta que retornó al Ministerio de Gobierno.
En Tarija, sin embargo, los cuadros se solían guardar para las elecciones subnacionales. Por razones evidentes – sobre todo de presupuesto -, Tarija sigue siendo una plaza apetecible para casi todos, por lo que no dudan en disputarla con energía. Los partidos tarijeños, todos, trazan la estrategia de forma conjunta entre lo nacional y lo departamental, pero donde el objetivo último es Tarija.
Este año se ha modificado algo entre los partidos opositores. Rodrigo Paz ha mandado al frente a Patricia Paputsakis por la C40 y Adrián Oliva se ha desprendido de su mejor pretoriano, Waldemar Peralta, que va de uno por los plurinominales de Carlos Mesa, pero UNIR se ha cuidado el triple mandando cuadros de tercera línea para integrar las listas de Bolivia Dice No y, sobre todo el MAS, que ha apostado por fichajes y ha dirimido suertes en su particular lucha de familias, concediendo el exilio a algunos de los candidatos con más peso.
Sara Armella, dirigente campesina de la zona alta y con perfil para conformar la dupla Gobernador – Vicegobernador del MAS para 2020 se va como segunda senadora suplente de Carlos Brú, otro que ha dejado espacio para la batalla particular que se vive en el Chaco y que también sonaba para conformar la dupla en la lógica Valle – Chaco. Por otro lado, ni el bloque de Álvaro Ruíz ni el de los “basquetbolistas” – descontando a Brú, apadrinado por Peñaloza - han puesto candidatos en liza, por lo que se prevé un duro pulso por la nominación para ser candidato a la Gobernación.
Las opciones del MAS
Por el momento la estrategia le está saliendo redonda al MAS a nivel nacional, y también a nivel departamental. Evo Morales ya es primero en las encuestas a nivel nacional y los partidos de oposición se están literalmente despellejando entre ellos, lo que está generando la animadversión que ya provocaron en el pasado y que consolidó las fabulosas mayorías de 2009 y 2014, con los dos tercios de la Asamblea Plurinacional.
Las encuestas en Tarija le dan muy por debajo de Carlos Mesa. Entre 12 y 15 puntos menos, pero no les resulta por el momento inquietante. Entre los círculos más conservadores de Tarija se insiste en la idea de que “el MAS nunca ha ganado en Tarija”, una afirmación que no es real.
El MAS ganó en 2009 y en 2014 con el 51 por ciento de los votos, y en 2014 llegó a ganar incluso en la provincia Cercado, con un 41 por ciento que fue suficiente frente a la división de votos en la capital entre el PDC de Tuto Quiroga y Unidad Demócrata de Samuel Doria Medina, una situación similar a la que se da actualmente.
En el MAS Tarija saben que las opciones principales pasan por ganar en octubre para después elevar el discurso del voto útil para el departamento de Tarija, un adagio que ya se utilizó a principios de la legislatura cuando la Gobernación de Adrián Oliva evidenció la situación crítica en la que quedaron las cuentas departamentales y se evidenció la falta de sintonía con el Gobierno, que dilató la solución para Tarija negando un Plan de Rescate y demorando meses la apertura de fideicomisos y estirando hasta el infinito el permiso para acceder a créditos privados como mal menor.
Si después de toda la expectativa, el resultado del referéndum del 21 de febrero y el propio desgaste, el MAS vuelve a ganar las elecciones e instaurar Gobierno, es probable que ese 51% que en su momento le ha dado mayorías a Morales en las nacionales y se las ha negado en las departamentales, decida que ya se ha cansado de luchar contra corriente.
En ese posicionamiento, el MAS cuenta con la inestimable ayuda de aquellos “opositores” que han decidido sostener el discurso de crisis departamental como estrategia para provocar un cambio y desgastar la gestión de la Gobernación.
Ruíz, Arce Zaconeta y compañía lo tienen claro, si el MAS gana, el cambio “anticrisis” no será de unos por otros para seguir sufriendo, ni se aceptarán camuflajes de siglas. De momento se frotan las manos y se ríen de la inestimable ayuda mientras recuerdan otro adagio reciente: El MAS paga conversos, pero no traidores.