MAS Tarija: Solo puede quedar uno
El MAS Tarija ha naufragado en su intento de reunificación y, salvo que un resultado excepcional en 2019 lo enmiende, ha podido enterrar las de por sí pocas opciones que tenía de convertirse en alternativa para la Gobernación de Tarija en 2020. El video del Congreso de “Unidad” en el que...



El MAS Tarija ha naufragado en su intento de reunificación y, salvo que un resultado excepcional en 2019 lo enmiende, ha podido enterrar las de por sí pocas opciones que tenía de convertirse en alternativa para la Gobernación de Tarija en 2020.
El video del Congreso de “Unidad” en el que diferentes militantes arrojaban sillas a la testera donde se había elegido por aclamación de las organizaciones más numerosas, pero apenas 7 de las 26 participantes, se convirtió en el video viral del pasado fin de semana.
El ABC de la polémica, las grandes se comieron a las chicas: en un Congreso forzado y con aval del ministro coordinador con Tarija, Héctor Arce Zaconeta, Campesinos y Bartolinas, junto con sus militantes parte de las distritales y algunas otras organizaciones menores, impusieron su candidato a presidir el MAS Tarija. Al otro lado quedaron los Interculturales, más las federaciones especiales y la más marxista distrital del MAS – Cercado, junto con otras organizaciones, que no reconocieron el poder campesino y exigían el respeto para René Sánchez, electo en diciembre de 2017.
El asunto, sin embargo, es mucho más complicado de lo que parece a simple vista y la batalla puede no solo dar alas a algunos de los divergentes más sonados del departamento, sino que puede dar lugar a un verdadero movimiento “librepensante” en el MAS Tarija, territorio experto en la guerra de guerrillas y el combate permanente.
¿Cuál es el contexto?
Unos y otros se acusan de exigir el poder para elaborar las listas electorales de 2019 y 2020, buscar el asiento más cercano al oído del presidente Evo Morales desde el que poder cantarle los nombres y las posiciones. Sin embargo, habida cuenta de las decisiones tomadas para las listas de 2014 y 2015, muy lejos de lo orgánico, la pelea real parece centrarse en otros aspectos.
El bloque campesino – bartolinas, recompuesto tras dos graves crisis en el seno de las organizaciones, una por el Prosol y la otra por el encarcelamiento y alejamiento de la sempiterna Julia Ramos, dice que quiere recuperar el movimiento para acercarlo a sus bases.
El otro bloque, el intelectual – intercultural, también dice que quiere recuperar el partido de las garras de los invitados y acercarlo a sus bases.
El bloque campesino – bartolinas opera desde hace meses y cuenta con el apoyo institucional principalmente de alcaldes. Esta alianza ha permitido la toma del control en la propia Federación y en la Asamblea Legislativa Departamental.
El otro bloque es el que viene perdiendo. Es el que estuvo cerca durante la gestión de Lino Condori, el que copó las listas y el que, después, copó las descentralizadas. Claro que por entonces nada era absoluto porque el MAS estaba en descomposición y hasta Luis Alfaro abandonó el barco.
¿Quién gana y quién pierde?
Aparentemente, el Congreso ha dejado claros derrotados, que es el grupo que apoyaba a René Sánchez y que tiene a José Yucra (intercultural de Bermejo, ex diputado y ex jefe del Sernap) y a Jorge Burgos (jefe distrital de Bermejo y Burgos, de los asentamientos varios) como sus rostros más visibles en el aspecto político.
Aparentemente, los vencedores son el grupo comandado por Osvaldo Fernández (ejecutivo campesino) y Sara Armella (referencia sindical de la zona alta en la Asamblea), junto a los campesinos de Cercado próximos a Guadalupe Jurado y especialmente, el lobby de Uriondo. René Sánchez ha acusado frontalmente al alcalde de ese municipio, Álvaro Ruíz, de estar detrás de la campaña que lo ha sacado a él y ha colocado a Carlos Acosta, también de Uriondo, al frente del partido.
Álvaro Ruíz es uno de los “aspirantes” a Gobernador mejor posicionados en la carrera para convencer a Evo Morales que lo avale. En esa carrera por la posición, Ruíz ha sumado apoyo orgánico. En la Asamblea se colocó como presidente a Guillermo Vega, también de Uriondo y a Acosta en el partido.
En cualquier caso, Ruíz también sabe que el factor no es definitorio, tal como ha venido pasando en las últimas elecciones y elaboraciones de listas, donde Morales ha roto el círculo íntimo que en su momento formaban las matrices y ha admitido opiniones muy diversas que acabaron confeccionando listas y alianzas, como las chaqueñas, poco reconocibles por las bases.
Ese grupo, con el empresario senador Milcíades Peñaloza como representante más visible forma parte del engranaje Interculturales – Condoristas – invitados que funcionó en su momento. Hacerse demasiado visible puede generarle muchos antígenos en lo que queda de camino y acabar perdiendo el sitio.
No parece previsible que el Congreso de los Sillazos acabe en escisión o en un nuevo movimiento de “librepensantes”, pero por si acaso, el lunes siguiente apareció en la plaza Luis Alfaro, historia viva del Movimiento Al Socialismo en Cercado, donde levantó la Federación y abanderó las principales luchas hasta que fue exiliado como diputado, donde acabó por romper relaciones con el partido, desencantado, según señaló, de los manejos del poder.
¿Qué cosas están en juego?
Es verdad que en el Movimiento Al Socialismo (MAS) tarijeño quedan algunos ilustres pensadores de la izquierda nacional que con mayor o menor éxito han transmitido vivencias y doctrina a las nuevas generaciones. También es verdad que cuando se habla de campesinos en el MAS, no se habla de jornaleros. Y también es verdad que más allá de las nominaciones y la configuración de las listas, potestad al final del presidente Evo Morales, los bloques masistas pelean también por el millar de pegas que más o menos manejan las descentralizadas en Tarija, más que la mayor empresa privada que se le ocurra.
Al final de la legislatura pasada, los más leales al exgobernador Lino Condori asumieron las principales “pegas” en las descentralizadas. El grupo selecto estaba formado por Ramón Vilca en el Ministerio de Trabajo; Fátima Pacheco en el Servicio Departamental de Salud Agropecuaria (Senasag); Hugo León en el Instituto de Reforma Agraria (INRA); Fohad Amás en la ABC. También hubo pegas para los candidatos derrotados: Rodrigo Ibáñez en el FPS, de Francisco Navajas, su hijo, en Emagua, Pablo Canedo en el Consulado en Washington, etc.
Con la imposición del nuevo pacto campesinos – alcaldes, la concesión parece distribuir descentralizadas para unos; cargos institucionales políticos para otros. Los campesinos ya exigieron la Dirección de Industrialización de la Hoja de Coca, la de Vivienda o el Sernap de José Yucra.
Todo parece apuntar a que las demandas se incrementarán en las próximas semanas y que, acostumbrados al ejemplo de la derrota por aplastamiento del contrincante, quedan muchos capítulos todavía que narrar. Así está el MAS más prometedor de su corta historia en Tarija.
Montes, el otro problema masista
El exalcalde de Cercado, Óscar Montes, recibió esta semana la absolución en el caso que se seguía contra él y su familia por enriquecimiento ilícito. El asunto esencial que sustenta la causa fue la eliminación del informe de la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) de la investigación, con la particularidad de que ese informe era, básicamente, sobre el que se sostenía todo el proceso. La Unidad de Investigaciones Financieras es una unidad dependiente de la Fiscalía y por ende, del Gobierno.
El viceministerio de Transparencia, es decir, también Gobierno, ya ha advertido que recurrirá la sentencia hasta la instancia que haga falta, pues no considera posible que la familia del exalcalde no haya lucrado durante los quince años de gestión. También procesará a aquellos que no pudieron defender el informe que mostraba el incremento patrimonial a su juicio desproporcionado.
La cuestión es que el exalcalde, por el momento, ha librado del proceso más complicado que tenía sobre su espalda cual espada de Damocles, justo un par de semanas después de declararse abiertamente opositor y alentar un frente único anti Evo. Es verdad que ese mismo frente en el que se pronunció Montes viene a ser al que se le va cargando el sambenito de funcional al régimen masista y que los protagonistas - Doria Medina, MNR, etc. - no parecen ser los mejor situados para presentarse como alternativa de Gobierno.
El MAS se ha abierto en canal, pero todavía quedan los que preconizan que Montes es la solución al fracaso electoral permanente y los que dicen haber hecho las gestiones necesarias ante el presidente Evo Morales para asegurar su “perdón”.
Montes tiene decidido volver a la arena política en 2020 – en lo posible evitará ser muy visible en 2019 -, pero todavía no hay claridad en la opción que tomará. Las especulaciones están tan a la orden del día que hasta se sitúa a una de sus hijas pugnando por un curul en el Concejo Municipal, lo que el sentido común llevaría a afirmar que Montes sería candidato a la Gobernación, pero en Tarija hace tiempo que el sentido común pasó a otro plano.
El video del Congreso de “Unidad” en el que diferentes militantes arrojaban sillas a la testera donde se había elegido por aclamación de las organizaciones más numerosas, pero apenas 7 de las 26 participantes, se convirtió en el video viral del pasado fin de semana.
El ABC de la polémica, las grandes se comieron a las chicas: en un Congreso forzado y con aval del ministro coordinador con Tarija, Héctor Arce Zaconeta, Campesinos y Bartolinas, junto con sus militantes parte de las distritales y algunas otras organizaciones menores, impusieron su candidato a presidir el MAS Tarija. Al otro lado quedaron los Interculturales, más las federaciones especiales y la más marxista distrital del MAS – Cercado, junto con otras organizaciones, que no reconocieron el poder campesino y exigían el respeto para René Sánchez, electo en diciembre de 2017.
El asunto, sin embargo, es mucho más complicado de lo que parece a simple vista y la batalla puede no solo dar alas a algunos de los divergentes más sonados del departamento, sino que puede dar lugar a un verdadero movimiento “librepensante” en el MAS Tarija, territorio experto en la guerra de guerrillas y el combate permanente.
¿Cuál es el contexto?
Unos y otros se acusan de exigir el poder para elaborar las listas electorales de 2019 y 2020, buscar el asiento más cercano al oído del presidente Evo Morales desde el que poder cantarle los nombres y las posiciones. Sin embargo, habida cuenta de las decisiones tomadas para las listas de 2014 y 2015, muy lejos de lo orgánico, la pelea real parece centrarse en otros aspectos.
El bloque campesino – bartolinas, recompuesto tras dos graves crisis en el seno de las organizaciones, una por el Prosol y la otra por el encarcelamiento y alejamiento de la sempiterna Julia Ramos, dice que quiere recuperar el movimiento para acercarlo a sus bases.
El otro bloque, el intelectual – intercultural, también dice que quiere recuperar el partido de las garras de los invitados y acercarlo a sus bases.
El bloque campesino – bartolinas opera desde hace meses y cuenta con el apoyo institucional principalmente de alcaldes. Esta alianza ha permitido la toma del control en la propia Federación y en la Asamblea Legislativa Departamental.
El otro bloque es el que viene perdiendo. Es el que estuvo cerca durante la gestión de Lino Condori, el que copó las listas y el que, después, copó las descentralizadas. Claro que por entonces nada era absoluto porque el MAS estaba en descomposición y hasta Luis Alfaro abandonó el barco.
¿Quién gana y quién pierde?
Aparentemente, el Congreso ha dejado claros derrotados, que es el grupo que apoyaba a René Sánchez y que tiene a José Yucra (intercultural de Bermejo, ex diputado y ex jefe del Sernap) y a Jorge Burgos (jefe distrital de Bermejo y Burgos, de los asentamientos varios) como sus rostros más visibles en el aspecto político.
Aparentemente, los vencedores son el grupo comandado por Osvaldo Fernández (ejecutivo campesino) y Sara Armella (referencia sindical de la zona alta en la Asamblea), junto a los campesinos de Cercado próximos a Guadalupe Jurado y especialmente, el lobby de Uriondo. René Sánchez ha acusado frontalmente al alcalde de ese municipio, Álvaro Ruíz, de estar detrás de la campaña que lo ha sacado a él y ha colocado a Carlos Acosta, también de Uriondo, al frente del partido.
Álvaro Ruíz es uno de los “aspirantes” a Gobernador mejor posicionados en la carrera para convencer a Evo Morales que lo avale. En esa carrera por la posición, Ruíz ha sumado apoyo orgánico. En la Asamblea se colocó como presidente a Guillermo Vega, también de Uriondo y a Acosta en el partido.
En cualquier caso, Ruíz también sabe que el factor no es definitorio, tal como ha venido pasando en las últimas elecciones y elaboraciones de listas, donde Morales ha roto el círculo íntimo que en su momento formaban las matrices y ha admitido opiniones muy diversas que acabaron confeccionando listas y alianzas, como las chaqueñas, poco reconocibles por las bases.
Ese grupo, con el empresario senador Milcíades Peñaloza como representante más visible forma parte del engranaje Interculturales – Condoristas – invitados que funcionó en su momento. Hacerse demasiado visible puede generarle muchos antígenos en lo que queda de camino y acabar perdiendo el sitio.
No parece previsible que el Congreso de los Sillazos acabe en escisión o en un nuevo movimiento de “librepensantes”, pero por si acaso, el lunes siguiente apareció en la plaza Luis Alfaro, historia viva del Movimiento Al Socialismo en Cercado, donde levantó la Federación y abanderó las principales luchas hasta que fue exiliado como diputado, donde acabó por romper relaciones con el partido, desencantado, según señaló, de los manejos del poder.
¿Qué cosas están en juego?
Es verdad que en el Movimiento Al Socialismo (MAS) tarijeño quedan algunos ilustres pensadores de la izquierda nacional que con mayor o menor éxito han transmitido vivencias y doctrina a las nuevas generaciones. También es verdad que cuando se habla de campesinos en el MAS, no se habla de jornaleros. Y también es verdad que más allá de las nominaciones y la configuración de las listas, potestad al final del presidente Evo Morales, los bloques masistas pelean también por el millar de pegas que más o menos manejan las descentralizadas en Tarija, más que la mayor empresa privada que se le ocurra.
Al final de la legislatura pasada, los más leales al exgobernador Lino Condori asumieron las principales “pegas” en las descentralizadas. El grupo selecto estaba formado por Ramón Vilca en el Ministerio de Trabajo; Fátima Pacheco en el Servicio Departamental de Salud Agropecuaria (Senasag); Hugo León en el Instituto de Reforma Agraria (INRA); Fohad Amás en la ABC. También hubo pegas para los candidatos derrotados: Rodrigo Ibáñez en el FPS, de Francisco Navajas, su hijo, en Emagua, Pablo Canedo en el Consulado en Washington, etc.
Con la imposición del nuevo pacto campesinos – alcaldes, la concesión parece distribuir descentralizadas para unos; cargos institucionales políticos para otros. Los campesinos ya exigieron la Dirección de Industrialización de la Hoja de Coca, la de Vivienda o el Sernap de José Yucra.
Todo parece apuntar a que las demandas se incrementarán en las próximas semanas y que, acostumbrados al ejemplo de la derrota por aplastamiento del contrincante, quedan muchos capítulos todavía que narrar. Así está el MAS más prometedor de su corta historia en Tarija.
Montes, el otro problema masista
El exalcalde de Cercado, Óscar Montes, recibió esta semana la absolución en el caso que se seguía contra él y su familia por enriquecimiento ilícito. El asunto esencial que sustenta la causa fue la eliminación del informe de la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) de la investigación, con la particularidad de que ese informe era, básicamente, sobre el que se sostenía todo el proceso. La Unidad de Investigaciones Financieras es una unidad dependiente de la Fiscalía y por ende, del Gobierno.
El viceministerio de Transparencia, es decir, también Gobierno, ya ha advertido que recurrirá la sentencia hasta la instancia que haga falta, pues no considera posible que la familia del exalcalde no haya lucrado durante los quince años de gestión. También procesará a aquellos que no pudieron defender el informe que mostraba el incremento patrimonial a su juicio desproporcionado.
La cuestión es que el exalcalde, por el momento, ha librado del proceso más complicado que tenía sobre su espalda cual espada de Damocles, justo un par de semanas después de declararse abiertamente opositor y alentar un frente único anti Evo. Es verdad que ese mismo frente en el que se pronunció Montes viene a ser al que se le va cargando el sambenito de funcional al régimen masista y que los protagonistas - Doria Medina, MNR, etc. - no parecen ser los mejor situados para presentarse como alternativa de Gobierno.
El MAS se ha abierto en canal, pero todavía quedan los que preconizan que Montes es la solución al fracaso electoral permanente y los que dicen haber hecho las gestiones necesarias ante el presidente Evo Morales para asegurar su “perdón”.
Montes tiene decidido volver a la arena política en 2020 – en lo posible evitará ser muy visible en 2019 -, pero todavía no hay claridad en la opción que tomará. Las especulaciones están tan a la orden del día que hasta se sitúa a una de sus hijas pugnando por un curul en el Concejo Municipal, lo que el sentido común llevaría a afirmar que Montes sería candidato a la Gobernación, pero en Tarija hace tiempo que el sentido común pasó a otro plano.