Y tan contentos
Da la impresión de que ni Evo Morales ni el jefe de los empresarios, Ronald Nostas, habían leído la Ley de Empresas Sociales, que básicamente autorizaba el despojo de empresas con deudas de tres meses.



La Ley no se ha archivado, solo se ha paralizado. Nostas sigue sonriendo y feliz sin haber ganado una sola batalla. Los que pagan, al final, son los trabajadores.