El oficialismo no se toca
Tres días de polémica bastaron al ministro Jorge Pérez para encontrar a los responsables de la estafa masiva del Plan 4.000. Seis personas iniciaron una campaña de registro multitudinario para obtener un lote en una supuesta nueva urbanización (aunque pocos dudaban de que iba a constituir un...



Entre los requisitos estaba afiliarse al Movimiento Al Socialismo (MAS) y en las oficinas los colores y el rostro de Evo Morales ocupaba espacios privilegiados. A los pocos días de saltar el escándalo todo estaba resuelto y los operadores “no tienen nada que ver con el partido de gobierno” insistió el viceministro en su conferencia de prensa. ¿Eficiencia? Tiempo de campaña.