Como todos los amigos me sugieren más brevedad, lo voy a intentar con todas mis fuerzas, sobre todo porque abrir hablando del conflicto más espinoso que tiene la comunidad internacional sobre la mesa y que lleva casi 80 años sin solución, acumulando miles de muertos, puede convertirse en un enredo bíblico, que además es de lo que estamos hablando.

Israel está aplastando los territorios palestinos y no hay ningún tipo de plan ni para pararlo ni para qué hacer después de pararlo, pero el mundo entero coincide en que lo que sucede allí tiene derivadas de impacto global y de hecho, por eso, parece va bien que la cosa se quede ahí nomás. Para Bolivia es un conflicto lejano en el que además hay pocas dudas sobre el bando que apoya el gobierno y probablemente la mayor parte de la oposición, aunque prefiera no mojarse por aquello del cálculo político.

Esta semana ha habido noticias de cierto relieve para una operación que se ha cobrado ya 35.000 vidas palestinas y que fue la respuesta al mayor y más cruel ataque terrorista de Hamás en suelo israelí y que fue (…) así hasta 1947.

De las tres, la que ha reordenado el tablero: La Corte Internacional de Justicia de La Haya ha ordenado el arresto de Netanyahu, lo que ha servido para que los principales aliados que se estaban mostrando más críticos volvieran a su posición original, como Joe Biden, que volvió a cerrar filas incluso cuando sabe que el asunto le está haciendo mella en su ya de por sí casi imposible campaña de reelección. El movimiento, en cualquier caso, vuelve a evidenciar lo evidente: el orden internacional no es para todos e Israel seguirá haciendo lo que le plazca.

• Aquí un texto del influyente diario israelí Haaretz: Por fin, justicia. ¿Pero empezarán también a despertar los israelíes?

La segunda es el reconocimiento del Estado de Israel por parte de los estados europeos de Irlanda, Noruega y España que se ha vendido como un gran logro diplomático y que evidentemente ha sentado muy mal en el gobierno extremista de Netanyahu, pero que no dejan de ser tres más a los casi 150, entre ellos Bolivia, que también lo han reconocido. Mientras Palestina no sea un Estado pleno difícilmente se pueden establecer relaciones diplomáticas más allá de lo simbólico.

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Por último, la semana empezó con la caída del helicóptero del presidente iraní Ebrahim Raisi, principal patrocinador de Hamás y la causa palestina y por ende, todos los amantes de las teorías de la conspiración vimos la mano invisible del Mossad… pero no (los verdaderos amantes obviamente saben que Irán lo negaría). El papel de Raisi, del perfil ultraconservador que ha tomado el Consejo de los Guardianes, fue ponderado por otros líderes internacionales, sobre todo Putin, que lo consideró “un socio muy fiable”, con todo lo que implica. Raisi era de los favoritos para sustituir a un Jomeini muy envejecido al frente de la Revolución, pero en todos los casos, era solo un ejecutor.

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El conflicto ha entrado en un punto de deflación total en el que aunque pasen cosas, nada pasa, y que el verano europeo puede acabar por finiquitar: el gobierno de Netanyahu está dispuesto a llegar hasta el final y la elección europea primero y la de Estados Unidos después pueden acabar por darle todas las alas necesarias para acabarlo de una vez por todas.

Democracias y otros golpes

Milei internacional.- Algunas cabezas deben estar rodando en el gobierno de España después de incumplir la primera regla de civilización moderna: no pelear con el loquito.

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El presidente argentino era el invitado de honor en el acto de lanzamiento de campaña de la ultraderecha europea que atraviesa a la vez un momento de efervescencia y redefinición. El acto era organizado en España por VOX,

que recientemente se ha quitado la etiqueta liberal para colocarse como un partido ultraconservador pero que hace de bisagra entre los dos grupos extremistas de parlamento europeo: Conservadores y Reformistas que lidera la presidenta italiana Giorgia Meloni donde se sitúa también Abascal y que son esencialmente euroescépticos suaves y por-OTAN frente a Identidad y Democracia, que lidera Marie Le Pen junto a Viktor Orban y Mateo Salvini que son más pro rusos y partidarios de una ruptura más radical en la UE. Ambas corrientes están mutando para fusionarse y hacerse solo una dejando a los más extremistas fuera y sobre todo, sumar fuerzas para atraer al Partido Popular Europeo, la derecha clásica, hacia sus posiciones rompiendo la gran coalición que gobierna la UE desde el principio. La posición común sobre la que crece es: Nacionalismo y Anti inmigración, además de recorte de derechos individuales.

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¿Qué pintaba Javier Milei allí? Nada, al menos en lo que tiene que ver con la economía que es supuestamente su fuerte, pues nadie en todo el espectro ultra reunido contempla esas recetas libertarias sino más bien todo lo contrario, pero sus pintorescas arremetidas contra “la casta” y la izquierda le abrieron un espacio que él aprovechó para atacar al presidente español – a su mujer, investigada por tráfico de influencias  - provocando una crisis diplomática de grandes proporciones en las que Argentina no tiene nada que perder, literalmente, y sí el gobierno español que sigue manejando muchas empresas estratégicas del vecino país.

Milei sigue así abriéndose espacios en la opinión pública internacional, más en una semana en la que presentó su libro cantando en el icónico Luna Park y fue portada de la revista Time, eso sí, con un perfil bastante crítico con sus excentricidades.

• Puede leer aquí la transcripción completa de la entrevista en el Time: The Radical: How Javier Milei is shocking the world

Boluarte sin frenos: Vale que en Perú lo de la estabilidad política es apenas un lejano recuerdo, pero esta vez parece que la legislatura accidental de Dina Boluarte ha entrado ya en el canal triturador que seguramente acabará con ella en la cárcel o en el exilio. No es exagerado viendo los antecedentes de los últimos 20 años, de Fujimori a Kuczinski pasando por Alejandro Toledo, Alan García y Ollanta Humala. La ascensión de Boluarte ya fue todo un escándalo irresuelto, pues al populista Castillo, elegido contra pronóstico por una agrupación al menos popular (progresista sería mucho decir) se enredó demasiado pronto en todo tipo de escándalos de corrupción y nepotismo: el fujimorismo oficial y sociológico lo borró del mapa con una de esas maniobras tan propias de estos lares y brindó protección a la vicepresidenta Boluarte, quien aparentemente venía de una militancia de izquierda más acusada… pero que de nuevo duró poco.

Boluarte ha cedido en casi todo – Fujimori fue indultado -, aparcó cualquier intento de reformar la Constitución e incluso de acortar el mandato y convocar elecciones anticipadas, que fue su primer compromiso, pero nada es suficiente: el escándalo de los relojes – más de una veintena de piezas de primera categoría que nunca hubiera podido pagar según sus sueldos – la dejó en la precariedad, pero hacía falta encontrar la manera y parece que ya está aquí: La fiscal general cayó la semana pasada por prevaricar a favor de su hermana, pero esto es accesorio. Sería sorprendente que no haya turbulencias pronto.

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Guerras y otras catástrofes

El momento Zelenski.- Cada semana recordamos que la Guerra de Ucrania sigue viva, que siguen muriendo jóvenes en el campo de batalla y que esas muertes tienen un importante cariz imperialista, pues lo que se lucha en el territorio ucraniano es precisamente eso. Los líderes europeos insisten en que “no van a dejar” que gane Rusia, pero igualmente no consiguen una fórmula de hacerlo.

Estos días expira el mandato del presidente Zelenski, y aunque la Constitución le permite continuar por Estado de Guerra, muchos estrategas lo ven como una oportunidad para trazar una salida además sincronizada con las propias elecciones europeas…

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El fiasco de la Celac.- La crisis en Haití, donde las pandillas siguen imponiendo su Ley en un Estado que siempre fue pobre y difícil pero que se ha convertido en fallido a partir del terremoto de 2010 y la posterior intervención de la ONU, es también el fiasco de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y de el Caribe, creada con expectativa pero incapaz de intervenir en un primer gran tema de su competencia. Sin embargo, lo hará Kenia con Estados Unidos… de nuevo.

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• De Connectas este reportaje que viene muy al pelo con lo que está pasando en Bolivia: La vicepresidencia, fuente de conflictos en América Latina
• De Diálogo Chino este reportaje que abona la inminente visita de Xi Jinping a este lado del mundo: Relación Brasil-China: 50 años entre objetivos ecológicos y realidades comerciales

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