En marzo fue del 6,7 %
Argentina y la inflación más alta de los últimos 20 años
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró su cuarta suba consecutiva y acumula un incremento interanual del 55,1 %



El presidente argentino Alberto Fernández comenzó perdiendo la "guerra" contra la inflación que fue declarada a mediados de marzo. El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de ese mismo mes arrojó, otra vez, una cifra preocupante: 6,7 %, la más alta de los últimos 20 años, según lo informado este miércoles por el Instituto de Estadística y Censos (Indec).
Se trata del cuarto mes consecutivo de aumento de la inflación, luego del 4,7 % registrado en febrero. Así, el acumulado de los últimos 12 meses llega a un 55,1 %.
El incremento del costo de vida se enmarca esta vez dentro de un contexto global negativo, empujado por los efectos económicos del conflicto entre Rusia y Ucrania. Pero, para el caso de Argentina, uno de los países con mayor inflación del mundo, se trata de una situación de arrastre, que acumula años de políticas de diferentes gestiones que fracasan.
La suba de los precios de los combustibles y materias primas de la industria alimenticia a nivel mundial han causado aumentos desmedidos en los valores del pan, la leche, la carne y otros productos esenciales de la canasta básica. En marzo, pese a los controles oficiales, los alimentos subieron un 7,2 %.
Días atrás, el dueño de una carnicería de Río Negro, en la Patagonia argentina, compartió la foto de un cartel pintado en su local, con el que invitaba a sus clientes a comprar a pesar de que no haya "ninguna" oferta porque "todo se fue a la mier…".
"Coma carne en Semana Santa. Ya no es pecado, es un milagro", escribió en una pizarra montada en la entrada de su negocio.
Y es que, la suba de precios se ha vuelto tan cotidiana que muchos se la toman con humor. Pero, en un país que registra un nivel de pobreza del 37,3 %, en los sectores populares el impacto es demoledor.
Donde más duele la inflación
Luego de dos años de pandemia, el golpe al bolsillo que implicó este alto nivel de inflación, movilizó a los sectores más postergados. En los días previos a la publicación del Indec, el Gobierno intentó impedir un nuevo acampe 'piquetero' en el centro de Buenos Aires.
Esta herramienta de lucha, que tuvo su auge durante la crisis de 2001, fue utilizada en el último tiempo por los movimientos populares para exigir aumentos en los planes sociales y más asistencia para personas desocupadas, pero a su vez, genera graves trastornos en el tránsito porteño. Y, en el plano político, desata cortocircuitos entre el Gobierno nacional de Alberto Fernández y la administración de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a cargo de Horacio Rodríguez Larreta. La semana pasada, el bloque de Juntos por el Cambio (el macrismo) presentó en el Congreso un proyecto de ley que busca quitar los programas de asistencia a quienes bloqueen vías de circulación en el marco de las protestas, una idea que fue rechazada por el oficialismo.
Las negociaciones de la Casa Rosada con las organizaciones 'piqueteras' lograron frenar un nuevo acampe en plena Avenida 9 de Julio, en el epicentro porteño, pero no las protestas. El Polo Obrero y otros espacios como Barrios de Pie se movilizaron este 13 de abril en todo el país.