Piden arresto de investigados ante fugas en Perú
El ministro del Interior de Perú, Carlos Morán, pidió este martes el arresto domiciliario de los investigados por recibir fondos de la empresa brasileña Odebrecht, entre ellos el ex presidente Alan García, para evitar fugas. Pido no llegar al extremo de la prisión preventiva. La...
El ministro del Interior de Perú, Carlos Morán, pidió este martes el arresto domiciliario de los investigados por recibir fondos de la empresa brasileña Odebrecht, entre ellos el ex presidente Alan García, para evitar fugas.
Pido no llegar al extremo de la prisión preventiva. La Fiscalía, con todos los elementos que reúne, debería solicitar el arresto domiciliario de políticos investigados por corrupción vinculada a Odebrecht, declaró.
Señaló que el riesgo de fugas es mayor ante las delaciones de ejecutivos de Odebrecht que, por un acuerdo con la fiscalía, comenzaron a declarar la semana pasada ante fiscales peruanos.
‘La delación de Brasil va a complicar la situación de muchos políticos importantes y debemos tomar decisiones para no evadir la justicia, no podemos tener actitudes contemplativas’, dijo Morán, un general de policía retirado.
Argumentó que no debería repetirse el caso del ex gobernador del vecino puerto del Callao, Félix Moreno, quien fugó antes de recibir una segunda condena de corrupción y después que Odebrecht confirmó que le pagó un soborno por un contrato para una obra vial.
Añadió que no se debe permitir que un investigado por corrupción sobre quien pesan fuertes indicios de culpa, como Moreno, pueda transitar libremente por el país.
Entre los investigados en libertad figura el ex gobernante neoliberal Alan García, bajo sospecha de recepción de fondos de Odebrecht, acrecentada porque esa empresa admitió que le pagó en forma encubierta 100 mil dólares por una conferencia ante empresarios brasileños en 2012.
García alega que fueron sus honorarios por la conferencia, muy por encima de los que cobran ex gobernantes latinoamericanos, según el legislador Víctor García Belaúnde.
El ex gobernante (1985-90 y 2006-2011) fue prohibido en noviembre pasado de salir del país para ser investigado por lavado de activos, ante lo cual intentó asilarse en Uruguay, país que lo rechazó, lo que sus críticos señalaron como un intento de fuga que ameritaba su detención preventiva.
El ex titular de una comisión parlamentaria que investigó a García tras su último gobierno, Sergio Tejada, advirtió que, como hizo entonces, el político neoliberal apele a una argucia legal para anular las pesquisas que lo afectan, ante la posibilidad que las delaciones de Odebrecht lo incriminen.
La empresa brasileña confirmó por otra parte que pagó al ex funcionario Miguel Atala un millón 300 mil dólares, ante lo cual, la analista política Rosa María Palacios anotó como elemento destacado que es amigo de García y nada ha tenido que ver con los contratos de Odebrecht.
En la lista de involucrados en la recepción de fondos electorales de Odebrecht se encuentra además la socialcristiana Lourdes Flores, acompañante de García, como candidata a la presidencia, en las elecciones de 2016.
Pido no llegar al extremo de la prisión preventiva. La Fiscalía, con todos los elementos que reúne, debería solicitar el arresto domiciliario de políticos investigados por corrupción vinculada a Odebrecht, declaró.
Señaló que el riesgo de fugas es mayor ante las delaciones de ejecutivos de Odebrecht que, por un acuerdo con la fiscalía, comenzaron a declarar la semana pasada ante fiscales peruanos.
‘La delación de Brasil va a complicar la situación de muchos políticos importantes y debemos tomar decisiones para no evadir la justicia, no podemos tener actitudes contemplativas’, dijo Morán, un general de policía retirado.
Argumentó que no debería repetirse el caso del ex gobernador del vecino puerto del Callao, Félix Moreno, quien fugó antes de recibir una segunda condena de corrupción y después que Odebrecht confirmó que le pagó un soborno por un contrato para una obra vial.
Añadió que no se debe permitir que un investigado por corrupción sobre quien pesan fuertes indicios de culpa, como Moreno, pueda transitar libremente por el país.
Entre los investigados en libertad figura el ex gobernante neoliberal Alan García, bajo sospecha de recepción de fondos de Odebrecht, acrecentada porque esa empresa admitió que le pagó en forma encubierta 100 mil dólares por una conferencia ante empresarios brasileños en 2012.
García alega que fueron sus honorarios por la conferencia, muy por encima de los que cobran ex gobernantes latinoamericanos, según el legislador Víctor García Belaúnde.
El ex gobernante (1985-90 y 2006-2011) fue prohibido en noviembre pasado de salir del país para ser investigado por lavado de activos, ante lo cual intentó asilarse en Uruguay, país que lo rechazó, lo que sus críticos señalaron como un intento de fuga que ameritaba su detención preventiva.
El ex titular de una comisión parlamentaria que investigó a García tras su último gobierno, Sergio Tejada, advirtió que, como hizo entonces, el político neoliberal apele a una argucia legal para anular las pesquisas que lo afectan, ante la posibilidad que las delaciones de Odebrecht lo incriminen.
La empresa brasileña confirmó por otra parte que pagó al ex funcionario Miguel Atala un millón 300 mil dólares, ante lo cual, la analista política Rosa María Palacios anotó como elemento destacado que es amigo de García y nada ha tenido que ver con los contratos de Odebrecht.
En la lista de involucrados en la recepción de fondos electorales de Odebrecht se encuentra además la socialcristiana Lourdes Flores, acompañante de García, como candidata a la presidencia, en las elecciones de 2016.