Fuertes vientos avivan los mortales incendios de EEUU
Las cuadrillas enfrentaban “vientos del diablo” extremadamente secos y cálidos mientras combatían dos enormes incendios forestales en cada uno de los extremos de California, incluyendo uno en el norte que ha sido uno de los más mortales y destructivos en la historia del estado. En el...
Las cuadrillas enfrentaban “vientos del diablo” extremadamente secos y cálidos mientras combatían dos enormes incendios forestales en cada uno de los extremos de California, incluyendo uno en el norte que ha sido uno de los más mortales y destructivos en la historia del estado.
En el norte de California, el incendio Camp ha provocado la muerte de al menos 23 personas desde que comenzó el jueves en el noreste de Sacramento y luego consumió gran parte de la ciudad montañosa de Paradise. Más de 100 personas han sido reportadas como desaparecidas.
Cientos de kilómetros más al sur, al menos dos personas murieron en la conflagración de Woolsey que amenazaba a la comunidad costera de Malibú, cerca de Los Ángeles.
La policía informó de arrestos por saqueos en la zona sur del incendio.
Autoridades esperan que los vientos secos soplen hasta el martes, lo que elevó la urgencia de las órdenes de evacuación, dijeron las autoridades.
“Estamos entrando en una nueva normalidad. La tasa de propagación es exponencialmente más alta de lo que solía ser”, dijo el jefe de bomberos del Condado de Ventura, Mark Lorenzen, quien sostuvo en una conferencia de prensa que los incendios en California en 2018 avanzan mucho más rápido que hace 10 años.
El gobernador Jerry Brown pidió al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que declare área de desastre para reforzar la respuesta de emergencia y ayudar a los residentes a recuperarse.
“Estamos poniendo todo lo que tenemos en la lucha contra estos incendios y esta solicitud garantiza que las comunidades en las líneas del frente reciban más ayuda federal”, dijo la carta de Brown.
Trump, en un viaje a Francia, dijo en un mensaje de Twitter a primera hora del domingo: “Con el manejo adecuado de los bosques, podemos detener la constante devastación en California. ¡Seamos inteligentes!”.
Las cuadrillas que combaten el fuego habían contenido un 25 por ciento del incendio Camp en el norte del estado, que ha quemado unas 44.000 hectáreas, según el sitio en internet de bomberos de California.
El incendio Woolsey ha consumido 33.700 hectáreas, pero sólo estaba contenido en un 10 por ciento.
Woolsey duplicó su tamaño de viernes a domingo, lo que provocó órdenes de evacuación para un cuarto de millón de personas en el barrio acomodado de Malibú en la costa y otras comunidades en los condados de Los Ángeles y Ventura.
“Esto se está poniendo feo”, dijo el meteorólogo Marc Chenard del centro de predicción del tiempo del servicio meteorológico nacional en College Park, Maryland.
En el norte de California, el incendio Camp ha provocado la muerte de al menos 23 personas desde que comenzó el jueves en el noreste de Sacramento y luego consumió gran parte de la ciudad montañosa de Paradise. Más de 100 personas han sido reportadas como desaparecidas.
Cientos de kilómetros más al sur, al menos dos personas murieron en la conflagración de Woolsey que amenazaba a la comunidad costera de Malibú, cerca de Los Ángeles.
La policía informó de arrestos por saqueos en la zona sur del incendio.
Autoridades esperan que los vientos secos soplen hasta el martes, lo que elevó la urgencia de las órdenes de evacuación, dijeron las autoridades.
“Estamos entrando en una nueva normalidad. La tasa de propagación es exponencialmente más alta de lo que solía ser”, dijo el jefe de bomberos del Condado de Ventura, Mark Lorenzen, quien sostuvo en una conferencia de prensa que los incendios en California en 2018 avanzan mucho más rápido que hace 10 años.
El gobernador Jerry Brown pidió al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que declare área de desastre para reforzar la respuesta de emergencia y ayudar a los residentes a recuperarse.
“Estamos poniendo todo lo que tenemos en la lucha contra estos incendios y esta solicitud garantiza que las comunidades en las líneas del frente reciban más ayuda federal”, dijo la carta de Brown.
Trump, en un viaje a Francia, dijo en un mensaje de Twitter a primera hora del domingo: “Con el manejo adecuado de los bosques, podemos detener la constante devastación en California. ¡Seamos inteligentes!”.
Las cuadrillas que combaten el fuego habían contenido un 25 por ciento del incendio Camp en el norte del estado, que ha quemado unas 44.000 hectáreas, según el sitio en internet de bomberos de California.
El incendio Woolsey ha consumido 33.700 hectáreas, pero sólo estaba contenido en un 10 por ciento.
Woolsey duplicó su tamaño de viernes a domingo, lo que provocó órdenes de evacuación para un cuarto de millón de personas en el barrio acomodado de Malibú en la costa y otras comunidades en los condados de Los Ángeles y Ventura.
“Esto se está poniendo feo”, dijo el meteorólogo Marc Chenard del centro de predicción del tiempo del servicio meteorológico nacional en College Park, Maryland.