Trump considera que la colusión no es un crimen
El presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó que la colusión no es un crimen, cuando su ex jefe de campaña Paul Manafort comienza a enfrentar un juicio como parte de una pesquisa del fiscal especial Robert Mueller. Aunque el proceso que se inició este martes no responde a cargos...



El presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó que la colusión no es un crimen, cuando su ex jefe de campaña Paul Manafort comienza a enfrentar un juicio como parte de una pesquisa del fiscal especial Robert Mueller.
Aunque el proceso que se inició este martes no responde a cargos vinculados explícitamente con la investigación encabezada por Mueller sobre la presunta interferencia rusa en las elecciones de 2016 y una supuesta complicidad con la campaña de Trump sí es resultado de tal indagación.
La colusión no es un crimen, pero eso no importa porque no hubo colusión, excepto por Hillary (Clinton, candidata del partido azul a los últimos comicios presidenciales) y los demócratas, escribió el gobernante republicano en su cuenta personal de la red social Twitter.
Manafort debe comparecer ante el tribunal federal en Alexandria, en el vecino estado de Virginia, donde los fiscales presentarán su caso contra el ex asesor de Trump, a quien acusan de trabajar como cabildero no registrado para políticos ucranianos.
Cargos
Dentro de este proceso judicial enfrenta cargos como los de presentar declaraciones falsas de impuestos, no informar sobre cuentas financieras en el extranjero, fraude bancario y conspiración.
Contra el ex jefe de la campaña presidencial de Trump también se presentaron imputaciones similares en esta capital, en un caso que está programado para ir a juicio en septiembre próximo, y en ambos procesos Manafort se ha declarado inocente de todos los cargos.
Inicialmente sus abogados intentaron desestimar las denuncias, al argumentar que la oficina de Mueller excedió su autoridad porque presentó acusaciones que no tienen conexión con la supuesta coordinación entre el Gobierno ruso y el equipo del mandatario.
Pero si bien el juez Thomas Ellis III, quien preside el pleito en Virginia, llegó a sugerir que el equipo de Mueller estaba en una cruzada para buscar un juicio político contra Trump, luego consideró que el caso debía mantenerse.
Desde su punto de vista, el trabajo de cabildeo que el ex asesor había realizado para políticos ucranianos favorables a Rusia, incluso en los años previos a la campaña de 2016, ‘justificó la investigación’.
Manafort se incorporó al equipo del magnate republicano en marzo de ese año, y en junio fue nombrado jefe de campaña, pero solo dos meses después se vio obligado a renunciar debido a su supuesta implicación en transacciones dudosas en Ucrania.
Aunque el proceso que se inició este martes no responde a cargos vinculados explícitamente con la investigación encabezada por Mueller sobre la presunta interferencia rusa en las elecciones de 2016 y una supuesta complicidad con la campaña de Trump sí es resultado de tal indagación.
La colusión no es un crimen, pero eso no importa porque no hubo colusión, excepto por Hillary (Clinton, candidata del partido azul a los últimos comicios presidenciales) y los demócratas, escribió el gobernante republicano en su cuenta personal de la red social Twitter.
Manafort debe comparecer ante el tribunal federal en Alexandria, en el vecino estado de Virginia, donde los fiscales presentarán su caso contra el ex asesor de Trump, a quien acusan de trabajar como cabildero no registrado para políticos ucranianos.
Cargos
Dentro de este proceso judicial enfrenta cargos como los de presentar declaraciones falsas de impuestos, no informar sobre cuentas financieras en el extranjero, fraude bancario y conspiración.
Contra el ex jefe de la campaña presidencial de Trump también se presentaron imputaciones similares en esta capital, en un caso que está programado para ir a juicio en septiembre próximo, y en ambos procesos Manafort se ha declarado inocente de todos los cargos.
Inicialmente sus abogados intentaron desestimar las denuncias, al argumentar que la oficina de Mueller excedió su autoridad porque presentó acusaciones que no tienen conexión con la supuesta coordinación entre el Gobierno ruso y el equipo del mandatario.
Pero si bien el juez Thomas Ellis III, quien preside el pleito en Virginia, llegó a sugerir que el equipo de Mueller estaba en una cruzada para buscar un juicio político contra Trump, luego consideró que el caso debía mantenerse.
Desde su punto de vista, el trabajo de cabildeo que el ex asesor había realizado para políticos ucranianos favorables a Rusia, incluso en los años previos a la campaña de 2016, ‘justificó la investigación’.
Manafort se incorporó al equipo del magnate republicano en marzo de ese año, y en junio fue nombrado jefe de campaña, pero solo dos meses después se vio obligado a renunciar debido a su supuesta implicación en transacciones dudosas en Ucrania.