La jugada maestra de Florentino para ganarle a Arda Guler al Barcelona
El viaje del nuevo director deportivo del Barça, Deco, a Turquía lo acabó desencadenando todo. El club blaugrana aceleraba para intentar fichar a Arda Guler y en Madrid se encendían las alarmas. El talentoso turco era objetivo blanco pero querían llevar las cosas más despacio para ajustar la operación. En el Bernabéu pensaban que el Barça no daría el paso por motivos económicos, pero una vez desveladas sus intenciones, Florentino Pérez dio orden de atar al chico. Si Deco había llegado a un acuerdo con el Fenerbahce, al Madrid solo le quedaba la opción de ir por detrás y firmar al jugador. Fue un jaque y mate en 48 horas.
Deco fue de cara. Habló primero con el Fenerbahce para llegar a un acuerdo económico por Arda Guler. Su baza era pagar más de los 17,5 millones de la cláusula de rescisión, pero hacerlo a plazos. En total, unos 23 millones de euros dejando la puerta abierta a que el chico se quedara un año en Turquía para acabar de blaugrana. Y, luego, con todo cerrado, habló con Arda Guler y su padre, el verdadero entorno y persona absolutamente decisiva en la jugada.
El tiempo corría y a Florentino Pérez le llegó el mensaje que todo se podía arreglar con dinero...y con la promesa de que Arda iría ya hacia la primera plantilla blanca.
Con esas claras premisas, los emisarios del Madrid viajaron directamente a hablar con el jugador y su familia. Le presentaron un jugoso contrato, que doblaba lo ofrecido por el Barça y le prometieron que residiría en Madrid y estaría en dinámica de primera plantilla. Y que jugaría. Si la cosa no iba bien, en enero podrían tomar la decisión de una cesión, pero que iba a ser inscrito como jugador blanco. Fue todo en 24 horas y el jugador dio el 'sí'.
Barça y Fenerbahce, ajenos a todo el lío blanco, esperaban la llegada de Arda Guler a Estambul para avanzar en el traspaso del futbolista. La sorpresa llegó cuando el entorno de Guler le pidió a su club que negociara con el Madrid, que saldrían satisfechos. Y, a pesar del malestar de la situación, Fenerbahce sacó una venta de 20 millones de euros, más diez en variables, más un porcentaje de una futura venta -se habla de un veinte por ciento.