El United, dispuesto a ofrecer 60 millones por Casemiro

El Manchester United va muy en serio a por Carlos Henrique Casemiro después de que las negociaciones para la incorporación de Adrien Rabiot se hayan ido al traste. Tanto es así que ya tiene decidido el precio que está dispuesto a ofrecer al Real Madrid para llevarse a uno de sus grandes referentes.

Según ha publicado el rotativo británico The Telegraph, en los despachos de Old Trafford harán una primera propuesta al blanco de 60 millones de euros para intentar fichar al mediocentro brasileño. El jugador no tiene intención de abandonar el Real Madrid, con el que tiene contrato hasta el 30 de junio de 2025.

La grave crisis deportiva que atraviesa el United cuando solo han transcurrido dos jornadas de Premier (saldadas con sendas derrotas) ha obligado a sus dirigentes a acudir desesperadamente al mercado para reforzar la plantilla de Erik Ten Hag y arreglar el desaguisado.

Según revela el citado medio, el interés repentino del Manchester United por Casemiro sería consecuencia de las dificultades para llegar a un acuerdo con Adrien Rabiot. Las negociaciones entre el club y su representante (su madre) se han ido al traste por las altas pretensiones económicas del centrocampista francés.

Old Trafford, mal destino para los madridistas

El Manchester United, desesperado farolillo rojo de la Premier League tras dos derrotas sonrojantes en sus dos primeros partidos, mira al mercado de fichajes con la necesidad imperiosa de mejorar la mediocre y descompensada plantilla que atesora Erik Ten Hag.

El último nombre en salir a la palestra es el de Casemiro, una opción muy complicada para los Red Devils porque el brasileño es pieza esencial en un Madrid que no se plantea, por ahora, una hipotética venta. Tampoco el futbolista tiene en mente un cambio de aires, asentado en el equipo campeón de Liga y de Champions.

No es el Manchester United un destino apetecible en estos momentos, ahogado por una crisis acuciante desde hace ya varios años. Además, a los jugadores que han hecho el viaje del Santiago Bernabéu a Old Trafford no les ha ido precisamente bien.

A lo largo de la historia, solo dos jugadores han sido traspasados por el Madrid al United: Ángel Di María y Raphael Varane. El argentino dejó el equipo blanco tras la conquista de la Décima (fue elegido MVP de la Final) porque quería más galones y el Madrid lo vendió al United por 75 millones de euros en agosto de 2014.

Entonces fue el fichaje más caro del fútbol inglés y el United lo recibió con honores dándole el dorsal 7, el más icónico del club inglés porque antes lo habían portado George Best, Eric Cantona, David Beckham o Cristiano Ronaldo, palabras mayores.

Sin embargo su estancia en Old Trafford a las órdenes de Loius Van Gaal fue un chasco efímero. Aguantó una temporada (32 partidos, 4 goles y 12 asistencias) antes de poner rumbo al PSG, donde sí hizo fortuna en sus siete temporadas en el Parque de los Príncipes.

Varane, el mal ejemplo más reciente

Raphael Varane ha sido el segundo y por el momento último jugador en cambiar el Madrid por el United y no le ha ido nada bien. Dejó el club blanco a cambio de 50 millones de euros consagrado como uno de los mejores centrales del mundo al lado de Ramos y en Old Trafford ha conocido el sabor amargo de las crisis, las derrotas y las lesiones.

La temporada pasada solo participó en 29 partidos debido a sus recurrentes problemas físicos y este curso ha empezado en el banquillo las dos primeras jornadas. El United es un coladero en defensa pero aun así Ten Hag todavía no se ha decidido a apostar por el central francés.

El camino inverso, nada que ver

Cosas del fútbol, a casi todos los jugadores que han hecho el viaje de Manchester a Madrid les ha ido bien (o fantásticamente bien) en el Santiago Bernabéu. El primero en llegar fue David Beckham (2003-2007), el galáctico más comercial, y después les siguieron Ruud Van Nistelrooy (2006-2010), Gaby Heinze (2007-2009), Cristiano Ronaldo (2009-2018) y el Chicharito (2014-2015). El mexicano llegó como cedido por una temporada y, aunque rindió bien, tuvo que hacer el camino de vuelta.

Excepto el azteca, los otros cuatro se asentaron en el Bernabéu, con mención especial para Cristiano (máximo goleador de la historia del Madrid con 450 tantos) y Van Nistelrooy, que llegó ya veterano y se ganó al público de Chamartín desde el minuto 1.