El Madrid no puede ante un gran Betis y sigue segundo
El Betis no tomó el Bernabéu, pero casi. Logró un empate que es una botella de oxígeno para el equipo y Rubi. Todo lo contrario que para el Real Madrid que desaprovechó una ocasión de oro para recuperar el liderato tras la derrota del Barça. Un punto que sabe a gloria para los sevillanos y...



El Betis no tomó el Bernabéu, pero casi. Logró un empate que es una botella de oxígeno para el equipo y Rubi. Todo lo contrario que para el Real Madrid que desaprovechó una ocasión de oro para recuperar el liderato tras la derrota del Barça. Un punto que sabe a gloria para los sevillanos y amargo, muy para los de Zidane a los que les queda en consuelo de recuperar el empate a puntos con el Barça en lo más alto de la clasificación. Eso sí, como segundos por la diferencia de goles.
El Real Madrid salió como le gusta a Zidane, implicado. Presionando la salida de balón del Betis, los blancos dispusieron de las primeras ocasiones del encuentro. La primera, de Benzema en el minuto siete y la segunda de Hazard en el ocho que acabó en gol, pero lo anularon por fuera de juego tras la intervención del VAR.
El Madrid, con Modric y Mendy en el equipo titular, mandaba ante un Betis con las líneas muy juntas, con Bartra ejerciendo de mediocentro para fortalecer al equipo, pero que era endeble por las bandas donde Rodrygo y Hazard generaban mucho peligro con Benzema moviéndose de maravilla entre líneas.
El partido era del Madrid, pero todo cambió a partir de la media hora. El Betis comenzó a encontrar su sitio en el campo, sobre todo Canales. Lo hizo a través del control del balón y haciendo correr al Madrid detrás del esférico. Las ocasiones béticas comenzaron a aparecer. Por la posesión, pero también por los fallos de un Madrid que pasó de controlar el ritmo del choque a jugar a la contra.
El partido se igualó con ocasiones para los dos equipos, aunque las más claras fueron para el Madrid que pudo adelantarse con un remate a bocajarro de Ramos que paró Joel Robles. Aunque para intervención salvadora, la de Courtois en el último suspiro de la primera mitad. El belga hizo una parada espectacular a disparo de Loren desde lejos buscando sorprender a Courtois que corrigió el error de Varane que propició esa jugada.
Al descanso se llegó sin goles y el segundo comenzó como había acabado el primero, con un nuevo error de Varane que a punto estuvo de costarle encajar un gol al Madrid. No fue la única similitud porque el encuentro seguía igual de igualado que en la primera mitad. El Madrid, viendo que los minutos iban cayendo y el gol no llegaba, apretó y Rodrygo y Mendy, que falló un mano a mano con Joel, rozaron el gol.
Zidane decidió mover el banquillo y dio entrada a Vinicius por Rodyrgo. El Betis, mientras tanto, seguía a lo suyo, jugando a través del balón, intentando no perder el orden defensivo y buscando su ocasión para abrir el marcador. Los nervios se iban apoderando del Madrid y de la grada que pidieron penaltis hasta cansarse. Sobre todo, uno, de Feddal por mano que ni el árbitro ni el VAR consideraron que era penalti.
La recta final del choque puso el corazón en un puño al Bernabéu porque el Betis ni mucho menos se dedicó a defender. Buscó el gol y estuvo cerca de lograrlo. Zidane echó mano del recurso Jovic quitando a Benzema en busca de ese gol de la victoria. El que tuvo ese tanto del triunfo fue Vinicius en el minuto 90, pero Joel lo evitó.
De ahí hasta el final, el Madrid apretó buscando el milagro que rozó en la prolongación, pero no era la noche del Madrid.
El Real Madrid salió como le gusta a Zidane, implicado. Presionando la salida de balón del Betis, los blancos dispusieron de las primeras ocasiones del encuentro. La primera, de Benzema en el minuto siete y la segunda de Hazard en el ocho que acabó en gol, pero lo anularon por fuera de juego tras la intervención del VAR.
El Madrid, con Modric y Mendy en el equipo titular, mandaba ante un Betis con las líneas muy juntas, con Bartra ejerciendo de mediocentro para fortalecer al equipo, pero que era endeble por las bandas donde Rodrygo y Hazard generaban mucho peligro con Benzema moviéndose de maravilla entre líneas.
El partido era del Madrid, pero todo cambió a partir de la media hora. El Betis comenzó a encontrar su sitio en el campo, sobre todo Canales. Lo hizo a través del control del balón y haciendo correr al Madrid detrás del esférico. Las ocasiones béticas comenzaron a aparecer. Por la posesión, pero también por los fallos de un Madrid que pasó de controlar el ritmo del choque a jugar a la contra.
El partido se igualó con ocasiones para los dos equipos, aunque las más claras fueron para el Madrid que pudo adelantarse con un remate a bocajarro de Ramos que paró Joel Robles. Aunque para intervención salvadora, la de Courtois en el último suspiro de la primera mitad. El belga hizo una parada espectacular a disparo de Loren desde lejos buscando sorprender a Courtois que corrigió el error de Varane que propició esa jugada.
Al descanso se llegó sin goles y el segundo comenzó como había acabado el primero, con un nuevo error de Varane que a punto estuvo de costarle encajar un gol al Madrid. No fue la única similitud porque el encuentro seguía igual de igualado que en la primera mitad. El Madrid, viendo que los minutos iban cayendo y el gol no llegaba, apretó y Rodrygo y Mendy, que falló un mano a mano con Joel, rozaron el gol.
Zidane decidió mover el banquillo y dio entrada a Vinicius por Rodyrgo. El Betis, mientras tanto, seguía a lo suyo, jugando a través del balón, intentando no perder el orden defensivo y buscando su ocasión para abrir el marcador. Los nervios se iban apoderando del Madrid y de la grada que pidieron penaltis hasta cansarse. Sobre todo, uno, de Feddal por mano que ni el árbitro ni el VAR consideraron que era penalti.
La recta final del choque puso el corazón en un puño al Bernabéu porque el Betis ni mucho menos se dedicó a defender. Buscó el gol y estuvo cerca de lograrlo. Zidane echó mano del recurso Jovic quitando a Benzema en busca de ese gol de la victoria. El que tuvo ese tanto del triunfo fue Vinicius en el minuto 90, pero Joel lo evitó.
De ahí hasta el final, el Madrid apretó buscando el milagro que rozó en la prolongación, pero no era la noche del Madrid.