Eugenio Frigerio Parodi (Génova, 1884 - Tarija, 1976)



Como familia tiene un escudo proveniente de las familias Friggeri y Frigieri de Regio de Emilia. De donde se extendió a otras regiones. Destacándose en Milán el Conde Rector Frigerio. En Génova el Tte. De navío Piero Alberto Frigerio, en Roma el Gran Oficial ingeniero Pablo Frigerio y el constructor Carlos Frigerio.
Pertenecían a una familia de la zona de Lombardía, Italia. La Lombardía descendiente de los Etruscos. El apellido Parodi pertenece a una de las familias acaudaladas de Génova, propietarios de una cadena de joyerías.
Eugenio Frigerio a sus 22 de edad, era oficial de un navío del Reino de Italia, en uno sus viajes a América, decidió quedarse en Buenos Aires (Argentina) donde el año anterior, ya se había establecido su primo, don Rogelio Frigerio.
Por sus dotes personales e intelectuales, entró a trabajar en un banco, su gran apego y pasión por las carreras de caballos lo indujo a tomar un préstamo del banco. Dinero que lo apostó sin suerte, situación que lo llevó a tener problemas de insolvencia. No pudiendo cubrir dicha deuda, le comunicó al gerente del banco su infortunio y lo retiraron sin derecho a pago y tampoco le fue requerido el préstamo. Decisión que tomó el gerente dl banco al ser avisado por el mismo de su insolvencia.
En esa época, Potosí (Bolivia), era una ciudad muy nombrada y conocida por su cuantiosa riqueza de plata y otros minerales, de ese modo decidió viajar a La Paz o Potosí, este viaje lo realizó en compañía del Sr. Ángel Calabi. Llegando a la frontera del entonces Alto Perú y la Argentina, lo animaron ir a Tarija. Lugar de clima mediterráneo.
De ese modo en 1.910 Eugenio Frigerio se radicó en Tarija. Contrajo matrimonio con Zoila Cortéz Guerrero, formando una numerosa familia.
Quedaron en Génova su madre Virginia Parodi v. de Frigerio, su hermana Adriany Frigerio y su sobrina María Antonieta Varaldo Frigerio.
Sus hijos fueron: Manuel, Armando, Adriana, Berta, Emilio, Virginia, Beatriz, Ana, Eugenio y Carlos, Walter Virgilio Frigerio este último nació cuando tenía 47 años. Hubieron otros hijos de la familia Frigerio Cortéz, fallecidos: Mario, Adriana, Carlos, Emilio, Virginia, Eugenio y Beatriz.
En 1926 adquirió una casa en la calle La Madrid gozando de comodidades acordes a la época. Esta casa que adquirió en Tarija tenía una manzana de extensión, pero como en aquel entonces el ejército boliviano necesitaba para sus equipos, don Eugenio Frigerio prestó dicha casa que sirvió de posta en la guerra del Chaco.
Fue conocido como padre cariñoso, correcto y severo, dando un buen ejemplo.
Se conoce que el acostumbraba a reunir a su familia para escuchar discos de ópera y música clásica proveniente de Italia. Los domingos prodigaba a sus hijos con billetes nuevos.
Realizó varios viajes al exterior junto a su familia, invitando a hijos de su amigo, Ángel Calabi, Irma, hija del industrial Carlos Wagner y Ely Dorakis.