• 11 de mayo 2025
  • Menú
    • Opinión
    • Editorial
    • Reflexión
    • Tema del día
    • Columnas
    • Suplementos
    • La Gobernación Informa
    • La Alcaldía Informa
    • La Subgobernación de Cercado informa
    • El SEDEGES informa
    • YPFB Chaco informa
    • Secciones
    • Ecos de Tarija
    • Nacional
    • Internacional
    • Campeón
    • Pura Cepa
    • Crónica
    • Multimedia
    • Merodeos
    • Reportajes
    • El Paisito
    • Búsqueda
    • Listado de autores
    • Semanarios
    • La Mano del Moto
    • La Billetera
    • Cántaro
    • Patria Grande
    • Suscripción Digital
    • Edición
    • Archivo Histórico
    • Archivo Web
    • Despertador / Newsletter
Menú
  • Suscripción Digital
    • Edición
    • Archivo Histórico
    • Archivo Web
    • El Despertador
  • Ads El País
  • Comodín
  • Opinión
    • Editorial
    • Reflexión
    • Tema del día
    • Columnas
  • Suplementos
    • La Gobernación Informa
    • La Alcaldía Informa
    • La Subgobernación de Cercado informa
    • El SEDEGES informa
    • YPFB Chaco informa
  • Secciones
    • Ecos de Tarija
    • Nacional
    • Internacional
    • Campeón
    • Pura Cepa
    • Crónica
    • Multimedia
    • Merodeos
    • Reportajes
    • El Paisito
  • Búsqueda
    • Listado de autores
  • Semanarios
    • La Mano del Moto
    • La Billetera
    • Cántaro
    • Patria Grande
  • Ecos de Tarija
  • Nacional
  • Campeón
  • Edición
  • Comodín

Don Cristóbal héroe de las rosas o los duendes del río

Pequeño, fuerte, de recia contextura, ojos vivaces que todo lo descubren, voz de trueno, traje de aldeano. Cuando los traviesos pihuelos lo ven... ponen pies en polvorosa, temiendo más que al mismo diablo, la víbora de tientos enroscada en su cintura. [gallery type="slideshow" size="full"...

Cántaro
  • Nilda Castrillo de Varas
  • 08/03/2020 00:00
Espacio publicitarioEspacio publicitarioEspacio publicitario
Pequeño, fuerte, de recia contextura, ojos vivaces que todo lo descubren, voz de trueno, traje de aldeano.
Cuando los traviesos pihuelos lo ven... ponen pies en polvorosa, temiendo más que al mismo diablo, la víbora de tientos enroscada en su cintura.

[gallery type="slideshow" size="full" ids="538162"]

Astrónomo incansable, conoce al dedillo las constelaciones.
“Hoy llueve, “Hará mal tiempo” - pronostica sin fallar. Su oído afinado capta un mensaje en el croar de las ranas, en el piar de los pájaros y en el movimiento de los árboles.
Mirando el cielo, enseña a los niños que en la luna llena hace un viaje eterno: San José, la Virgen con el niño en brazos, sobre el borriquillo que los acompaña...
Es pobre, pero él es el dueño de todas las rosas de la plazuela por algo es su jardinero. Cuarenta años de cuidar sus árboles y sus flores.

[gallery type="slideshow" size="full" ids="538160"]

Dicen por ahí que ya está chocho, que habla solo, que atento escucha el violín de los grillos, y que se hace dueño de todas las luciérnagas.
Se levanta al alba y vuela a la plaza y sus ojos buenos besan con la mirada el árbol, a la rosa, y hasta a la humilde lombriz de tierra.
Un día... don Cristóbal estaba pensativo mirando unos rastros de pies diminutos que salían del rosedal, donde las rosas yacían casi marchitas y los pétalos caídos formaban, una alfombra multicolor.
¡Las rosas de mis amores han contraído un extraño mal!
- exclamó dolorido.
¡Esta noche descubriré al malhechor! Dijo, echando
chispas por los ojos.

[gallery type="slideshow" size="full" ids="538165"]

Aquella noche se quedó detrás de un árbol silencioso y alerta...
Era ya la una de la mañana, ni un alma caminaba por las calles.
Pero... de pronto, por la diagonal de la plazuela, como brotados de la tierra, aparecieron, unos hombrecitos pequeñísimos que presurosos caminaban.
Llevaban trajes muy brillantes, tejidos con hilos de lluvia, los pies estaban calzados con lunas en cuarto menguante, sus barbas y cabellos tenían chispitas de estrellas

[gallery type="slideshow" size="full" ids="538163"]

“¡Ajá!- dijo don Cristóbal levantando su hoz- ¡los voy a partir en dos”-
Pero... su brazo se quedó en el aire. Perplejo no atinó ni a mover un dedo; estaba como prendido en el suelo, porque los pequeños duendes de menudos pasitos hablaban con las rosas... muy quedo, muy quedo... las tomaron de la cintura y ellas saltaban alisando sus “tutús” de fiesta y el ambiente se llenó con la música del río, el canto de los arroyos y rosas y gnomos se volvieron danza.

[gallery type="slideshow" size="full" ids="538164"]

En las ollitas de los “guancóiros” bebían néctar y se embriagaban y en el frenesí de la danza, las bellas iban dejando sus trajes de pétalos y alas de mariposas

¡Ki ki ri Kiii...!
¡Cocoro cooooooooo.J
Cantaron los gallitos de los ceibales saludando al primer rayo de sol.
Presurosos los gnomos enamorados dieron a las rosas su último beso y emprendieron veloz retirada.

[gallery type="slideshow" size="full" ids="538166"]

¡Epa! -dijo el veterano, corriendo en su persecución, los vio llegar al río y desaparecer ¡alto! -grito- metiéndose en el río, y el río ríe a cacajadas.
Don Cristóbal dio un salto al contacto con el agua, abrió los ojos y se encontró acurrucado debajo del mismo árbol.
¡Lo juraría...! ¡los vi...! ¡los vi...! -corrió al rosedal restregándose los ojos. Las rosas marchitas estaban como dormidas y en la tierra removida brillaban aquí y allá perlitas de rocío sobre los pétalos caídos. Se rascó la cabeza y chasqueó en el aire la víbora de tientos enroscada en su cintura, mientras rodó cerca de sus pies una pelota de trapo... la pandilla del barrio ya estaba despierta lo espiaba y provocaba desde detrás de la esquina.

[gallery type="slideshow" size="full" ids="538161"]

Don Cristóbal está viejo, por tres veces lo han jubilado, pero él se muere sin sus rosas, sin los pihuelos del barrio y rosas y pihuelos sucumben sin su cariño. Aprendió de la naturaleza a ser tan sabio y tan bueno, que el día de la fiesta de la Patria le pusieron las autoridades una medalla en el pecho que brillaba como una estrella. Y el pueblo regocijado bailó la danza de las rosas con la música del río y el cantó de los arroyos.

[gallery type="slideshow" size="full" ids="538167"]

Nilda:
Un aroma de amancayas del valle florido, llega evanescente de amor y de ternura, para perfumar el mundo mágico del ensueño con el cántico de los duendes del río, recorriendo el reino de la infancia en el trencíto del alba con su cargamento fragante a menta y a yerbabuena, para ofrecer en la estación rosa-luz, del corazón de los niños la canción del agua que acariciará el jazmin de su ternura.

Prof. Hugo Molina Viaña
Organización Internacional para el libro
infanto-juvenil

Apoya al periodismo independiente

Tienes acceso libre a 200 notas al mes. Para tener acceso ilimitado y muchos beneficios más adquiere tu Suscripción Digital. Comienza tu prueba gratis ahora

Suscríbete

¿Ya estás suscrita/o? No olvides iniciar sesión

Acceder

Si te interesa una suscripción corporativa o institucional llámanos al (+591) 78259007

Comentarios

  • Lo más visto
  • Lo Último
    • 1
      Comando del MNR evalúa renuncia de Torres que exige unidad
    • 2
      Del “bloque Dunn” y el adiós de Chi, al plan “fusión o chicana”
    • 3
      Final del partido: Tomayapo sumó en su visita a Always Ready
    • 4
      Incautan 37 kilos de cocaína en Villa Montes y Bermejo
    • 5
      Alianza Popular, la coalición que está cerca de Andrónico
    • 1
      MNR: Comando Nacional rechaza renuncia de Torres y declina de las elecciones generales
    • 2
      Así marcha la ATF: Ciclón ganó el clásico; “Muni” a paso firme
    • 3
      Imputan a activistas de Tariquía por "impedir" labores de YPFB en la zona
    • 4
      Final del partido: Tomayapo sumó en su visita a Always Ready
    • 5
      Aprehenden a seis sujetos que transportaban 127 kilos de marihuana

Puedes publicar tu anuncio en la
página de inicio o en el interior de las notas

Escoge una opción para ver
los espacios disponibles

Página de inicio Interior de Nota

Contacto

  • Calle Colón No. 968 - Tarija, Bolivia
  • (591 4) 664 2732 - (591) 78259007
  • [email protected]

Acerca de Nosotros

  • Quiénes somos
  • Términos y condiciones
  • Políticas de privacidad
© Copyright 2025 :: Boquerón Multimedia | Desarrollado por ITGROUP SYSTEMS