Tema del día
Por la sequía que afronta la región del Gran Chaco, el caudal del río Pilcomayo se mantiene bajo, afectando a las poblaciones que viven en la ribera y que usan sus aguas como fuente económica. Según los últimos datos del sistema de monitoreo del Senamhi, el afluente registraba entre 1,50 a 1,80 metros. La cuenca del río Pilcomayo, en los últimos años, también se vio afectada por el elevado nivel de sedimento y la contaminación.