Chagas, la enfermedad silenciosa que sigue avanzando en Tarija

La llegada de la pandemia del Covid-19 eclipsó la atención de varias otras patologías, entre ellas se encuentra la enfermedad del Chagas, que de manera silenciosa continúa avanzando en Tarija. Según datos de la gestión 2021, de cada 10 personas adultas diagnosticadas en el departamento, dos dan positivo.

El Chagas es una enfermedad inflamatoria e infecciosa causada por el parásito Trypanosoma cruzi, que se encuentra en las heces del insecto conocido como la vinchuca. La enfermedad de Chagas es común en América del Sur.

El responsable del Programa Chagas del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Eduardo Rueda, detalla que durante la gestión 2021 se han vuelto a reanudar con trabajos de control vectorial, vigilancia epidemiológica y la atención del infectado con Chagas, esto tras haber sido notoriamente afectados en el 2020, cuando llegó la pandemia.

Chagas congénito

De acuerdo a la sistematización de los datos de la enfermedad de Chagas, correspondiente a la gestión 2021, el informe del Sedes señala que han sido diagnosticadas un total de 4.806 mujeres que acudieron a algún centro de salud para su control prenatal, de las cuales 895 dieron positivo a la enfermedad, es decir, la prevalencia es de 20%, lo que se traduce en que, de cada 10 mujeres embarazadas, dos suelen estar infectadas.

De este 20% de mujeres portadoras de la enfermedad, es decir, de 895 embarazadas, solamente 13 niños han nacido con la enfermedad, de los cuales todos han sido sometidos a un tratamiento.

En cuanto a los municipios con mayor índice de prevalencia por la enfermedad de Chagas, se tiene que el 32% de las mujeres embarazadas que dieron positivo son de Cercado, le sigue Yacuiba con el 26%; Entre Ríos, Uriondo y Villa Montes suman un 21% de las mujeres infectadas, y el porcentaje restante, con menor incidencia afecta a Bermejo, Padcaya, El Puente y Yunchará.

Chagas crónico infantil

En cuanto a los datos del Chagas crónico infantil, en niños desde 1 a 15 años de edad, durante la gestión 2021, se realizó un diagnóstico a 289 niños, de los cuales 16 dieron positivo, lo que se traduce en una prevalencia del 7,4%.

“De los 16 niños que han dado positivo, solamente seis de ellos han realizado tratamiento, y los restantes 10 por diferentes motivos no han podido iniciar el tratamiento, ya sea por distancia, porque es una población migrante o no reúnen las condiciones para realizar tratamiento”, señaló Rueda.

Chagas en adultos

En personas mayores de 15 años hacia adelante, se han diagnosticado a 3.002 personas en todo el departamento durante la gestión 2021, de las cuales 665 salieron positivos a la enfermedad. Lo que se traduce en una prevalencia del 22,15%.

“En el caso de los adultos, de los 665 positivos, han logrado realizar tratamiento 147 personas, lo que significa una cobertura apenas del 22%, pero aquí debemos aclarar que no todos los infectados adultos pueden o reúnen las condiciones para un tratamiento. Por ejemplo, los pacientes no deben ser mayores a 50 años, no deben tener enfermedades de base como síndromes convulsivos o cirrosis hepática, no deben tener anemia, Sida, una vez hecha esta valoración, no todos los pacientes adultos reúnen las condiciones para iniciar tratamiento”, manifiesta Rueda.

Cabe señalar que, tras dos años de pandemia, el Gobierno ha puesto nuevamente la mirada en las enfermedades tropicales, en este marco, el Ministerio de Salud y Deportes y el Programa de las Naciones Unidas Para el Desarrollo (PNUD) firmaron el pasado martes un convenio destinado al fortalecimiento de acciones de control de la Tuberculosis, Bolivia libre de Malaria y la eliminación de la transmisión congénita de Chagas, que tendrá una inversión de 16.811.862 dólares y una contraparte del Estado Plurinacional.

El Programa carece de personal y presupuesto

El responsable del Programa Chagas dependiente del Sedes, Eduardo Rueda, dejó entrever las limitaciones por las que atraviesa su unidad, esto debido a la carencia de recursos económicos y humanos, lo que no permite efectuar con mayor amplitud los trabajos de control vectorial, vigilancia epidemiológica y la atención del infectado.

“Los recursos económicos no son los suficientes, no tememos mucho presupuesto, pero en la medida de las posibilidades, la atención al infectado siempre se lo realiza en el sistema de salud”, enfatizó.