Crónica política de la jornada
Rumbo al 7M: Dividir o no tanto la Alcaldía de Cercado
Desde la recuperación de la democracia, MNR, FRI y MIR se han alternado en el poder, con la irrupción del MAS se redujeron las opciones y en las tres últimas votaciones UNIR superó el 50% de los votos



Despejada la duda sobre la fecha electoral, al menos temporalmente, tras la enésima ratificación de Salvador Romero, presidente del Tribunal Supremo Electoral, de que el 7 de marzo habrá sí o sí comicios, los estrategas de todos los partidos se han puesto a la tarea de acelerar sus campañas para lograr la ventaja lo antes posible.
La Alcaldía, a diferencia de la Gobernación, se gana por mayoría simple, es decir, por un voto más que los demás, aunque evidentemente la mayor votación permite una mayor representación en el Concejo Municipal y mejor gobernabilidad, aunque la papeleta actual también permite el voto cruzado, al tener los concejales su propia lista separada.
Desde la recuperación de la democracia, Cercado ha sido una plaza muy disputada por los partidos tradicionales, donde MNR, FRI y MIR se han ido alternando en el poder. Esta situación cambió con la irrupción del Movimiento Al Socialismo (MAS) en la escena política nacional. En Cercado su votación no ha sido representativa, pero sí ha provocado una aglutinación de fuerzas contrarias en un solo frente, o la declinación de otras que sí podían haber disputado el poder.
Esto no sucede en 2021, donde hasta ocho frentes han presentado sus candidaturas, y sin minusvalorar a nadie, hasta cinco tienen opciones de sumar más del 10%: Gonzalo Torres con el Tercer Sistema; Alan Echart con Todos, Patricia Paputsakis con Basta, Johnny Torres con Unidos y Rodolfo Meyer con el MAS.
El histórico
Con la recuperación de la democracia nacional se comenzó la votación directa para elegir alcaldes en el país. El primer acto eleccionario que recoge el Atlas Electoral del Órgano Electoral es el del año 1985, que en Tarija dio el triunfo al MNR, mientras que en el 87 ganó el FRI seguido por el MIR.
Mayorías En las tres últimas elecciones, la fuerza gobernante ha sumado más del 50% de la votación en Cercado
En el 89 ganó la Alianza Patriótica (MIR – ADN, etc.) en Cercado y Méndez mientras el resto del departamento siguió siendo rosado. En el año 1991 el MNR recuperó el primer lugar seguido del Acuerdo Patriótico y donde la UCS entró con fuerza con un 20% de los votos. En el 93 se impone el FRI con un 40% de los votos por encima del MNR (26,25%) y del MIR Nueva Mayoría que empezaba a renovarse. Fue la última votación en la que se elegía alcalde por dos años, un periodo sustancialmente corto como para desarrollar proyecto.
En el año 1999 el último MIR gana la elección con el 35,54% de los votos. Ese MIR de Óscar Montes se consolida en 2004 con el 52,34% de los votos, que suma más en el declive del FRI y del MNR, que pierden la mitad de su votación y se quedan sobre el 12% cada uno. El MAS, en su primera participación en la ciudad de Tarija, suma un 6,58%.
En 2009 el asunto fue aún más complejo, el FRI se diluye y el MNR también, mientras que el MIR se convierte en UNIR, que gana con más del 50% de la votación, mientras que el MAS trepa a 24,87% y otra fuerza popular, Bien Común (Bi-Co) suma un 11%.
En 2015 el resultado volvió a ser favorable para UNIR, marcando un récord histórico con un 59,82% a favor del hijo de Jaime Paz Zamora, mientras que el MAS se quedaba con un 21,26% y UD-A, el rincón autonomista puro, con un 11,09%.
El voto “popular”, clave para las mayorías
A partir de 2004, la población de Tarija empezó a crecer exponencialmente y hoy ronda el cuarto de millón de habitantes. Este crecimiento, muchas veces desordenado, dio lugar a la incorporación de nuevos barrios más allá de la avenida Circunvalación y en el entorno del Mercado Campesino, aunque también en la zona alta colindante a La Tablada y Senac.
Por lo general, se trata de zonas populosas donde la población migrante de otros departamentos o del campo han encontrado soluciones a su problema habitacional a pesar de que en ese empeño se sacrificó el orden lógico del crecimiento de la ciudad y no se dotaron de los servicios básicos suficientes, lo que después han obligado a grandes inversiones públicas para llevar agua, saneamiento o energía eléctrica. En la última gestión se ha procedido a entregar numerosas planimetrías que han “legalizado” el crecimiento desconcertado.
Electoralmente, las zonas populosas han cambiado su votación si se trataba de una elección nacional o una municipal, de ahí las sustanciales diferencias que registra el MAS en Cercado, donde Evo Morales superó el 40% en 2014, pero su candidato a alcalde se quedó en el 21% en 2015. Ese voto fue al partido gobernante, en este caso UNIR.