Varones reflexionan sobre masculinidad y violencia
Más de medio centenar de servidores públicos del Gobierno Regional del Gran Chaco participaron en el taller de Masculinidades, Ejerciendo los Derechos Sexuales y Derechos Reproductivos. En el evento, los varones reflexionaron sobre la violencia desde otra óptica, repensando cómo los hombres...
Más de medio centenar de servidores públicos del Gobierno Regional del Gran Chaco participaron en el taller de Masculinidades, Ejerciendo los Derechos Sexuales y Derechos Reproductivos. En el evento, los varones reflexionaron sobre la violencia desde otra óptica, repensando cómo los hombres son resultado de una crianza y una construcción social que deben ser interpeladas.
Milton Ángelo, capacitador de la Organización No Gubernamental (ONG) IPAS, señaló que este fue un espacio donde se pudo establecer que la violencia en el varón es el resultado de una “construcción social de muchos años”, que convierten a cualquier hombre en potencial violento y que puede detonar en cualquier momento, lo que requiere de respuestas más profundas en su formación desde niño.
“La cuestión es ¿qué lo detona?”, afirmó Ángelo, a tiempo de señalar que la prevención de la violencia no debe ser tomada tan a priori, porque requiere de espacios de trabajo con los mismos varones, de forma que ellos puedan reconocer que la discriminación, desigualdad y violencia son factores que tienen efectos devastadores en todos y crean los ciclos de violencia en la familia y la sociedad.
En el taller se pudo comprender que la suma de creencias, mitos, costumbres y actitudes promueven formas de comportamiento sobre cómo los hombres deben ser, sentir y pensar. A partir de ello el ser varón es construido social y culturalmente, y proyectado o representado como un conjunto de creencias, costumbres y actitudes que sostienen la creencia que el dueño del poder es el hombre.
Luz Marina Condarco, responsable de la Unidad de Género, destacó el apoyo en la capacitación de los servidores públicos, en temas tan sensibles que tienen relación directa con la transmisión de valores y roles desde el seno del hogar, llegando a cuestionar temas como el machismo y la violencia, en espacios donde el mismo varón promueva una sociedad donde nadie oprima a nadie.
IPAS propicia la construcción de una nueva masculinidad, que apoye la prevención del embarazo no intencionado y aúne esfuerzos para disminuir toda forma de discriminación y desigualdad hasta llegar a la eliminación de la violencia hacia las mujeres.
Milton Ángelo, capacitador de la Organización No Gubernamental (ONG) IPAS, señaló que este fue un espacio donde se pudo establecer que la violencia en el varón es el resultado de una “construcción social de muchos años”, que convierten a cualquier hombre en potencial violento y que puede detonar en cualquier momento, lo que requiere de respuestas más profundas en su formación desde niño.
“La cuestión es ¿qué lo detona?”, afirmó Ángelo, a tiempo de señalar que la prevención de la violencia no debe ser tomada tan a priori, porque requiere de espacios de trabajo con los mismos varones, de forma que ellos puedan reconocer que la discriminación, desigualdad y violencia son factores que tienen efectos devastadores en todos y crean los ciclos de violencia en la familia y la sociedad.
En el taller se pudo comprender que la suma de creencias, mitos, costumbres y actitudes promueven formas de comportamiento sobre cómo los hombres deben ser, sentir y pensar. A partir de ello el ser varón es construido social y culturalmente, y proyectado o representado como un conjunto de creencias, costumbres y actitudes que sostienen la creencia que el dueño del poder es el hombre.
Luz Marina Condarco, responsable de la Unidad de Género, destacó el apoyo en la capacitación de los servidores públicos, en temas tan sensibles que tienen relación directa con la transmisión de valores y roles desde el seno del hogar, llegando a cuestionar temas como el machismo y la violencia, en espacios donde el mismo varón promueva una sociedad donde nadie oprima a nadie.
IPAS propicia la construcción de una nueva masculinidad, que apoye la prevención del embarazo no intencionado y aúne esfuerzos para disminuir toda forma de discriminación y desigualdad hasta llegar a la eliminación de la violencia hacia las mujeres.