Casa de la Cultura reprograma sus actividades
Los conflictos que vivió el país durante 21 días tuvieron un efecto negativo en la programación del uso del Auditorio de la Casa de la Cultura, informó el gestor cultural de esta entidad, Jorge Molina Rossel, porque lo establecido entre el 21 de octubre al 12 de noviembre se perdió porque...



Los conflictos que vivió el país durante 21 días tuvieron un efecto negativo en la programación del uso del Auditorio de la Casa de la Cultura, informó el gestor cultural de esta entidad, Jorge Molina Rossel, porque lo establecido entre el 21 de octubre al 12 de noviembre se perdió porque las reservas que hacen los solicitantes son fechas fijas.
“Esas fechas son compromisos realizados con antelación por las personas, entidades u organizaciones que solicitaron el uso de ese espacio en la Casa Dorada”, argumentó. Las personas que solicitaron el uso del Auditorio tácitamente ya no lo harán porque los actos no se pueden recorrerlos.
No es posible porque los compromisos artísticos han dejado un espacio sin continuidad en la practica y preparación. “Por ejemplo, llamé a los institutos musicales que en esta semana tenían programadas sus presentaciones, pero indicaron que no pueden hacerlo porque los estudiantes no ensayaron y perdieron el ritmo de trabajo”.
Molina subrayó que está abierto el uso de este espacio en cualquier horario que no esté programado, pero no pueden ocupar el momento que ose le otorgó a otro solicitante. Sin embargo, a partir de este miércoles se empezó a cumplir con lo establecido y se normalizó el uso del Auditorio.
Respecto a la Galería de Exposiciones, apuntó que es más sencillo reprogramar y recorrer las muestras, en la medida de que quienes lo reservaron acepten los cambios de fecha, lo pospongan y se vayan acomodando al nuevo rol.
La Casa de la Cultura fue concebida como una institución autónoma, de duración indefinida, sin fines de lucro y personería jurídica propia que le fue reconocida a través de la Resolución Suprema No. 204960 del 15 de Septiembre de 1988.
“Esas fechas son compromisos realizados con antelación por las personas, entidades u organizaciones que solicitaron el uso de ese espacio en la Casa Dorada”, argumentó. Las personas que solicitaron el uso del Auditorio tácitamente ya no lo harán porque los actos no se pueden recorrerlos.
No es posible porque los compromisos artísticos han dejado un espacio sin continuidad en la practica y preparación. “Por ejemplo, llamé a los institutos musicales que en esta semana tenían programadas sus presentaciones, pero indicaron que no pueden hacerlo porque los estudiantes no ensayaron y perdieron el ritmo de trabajo”.
Molina subrayó que está abierto el uso de este espacio en cualquier horario que no esté programado, pero no pueden ocupar el momento que ose le otorgó a otro solicitante. Sin embargo, a partir de este miércoles se empezó a cumplir con lo establecido y se normalizó el uso del Auditorio.
Respecto a la Galería de Exposiciones, apuntó que es más sencillo reprogramar y recorrer las muestras, en la medida de que quienes lo reservaron acepten los cambios de fecha, lo pospongan y se vayan acomodando al nuevo rol.
La Casa de la Cultura fue concebida como una institución autónoma, de duración indefinida, sin fines de lucro y personería jurídica propia que le fue reconocida a través de la Resolución Suprema No. 204960 del 15 de Septiembre de 1988.