El frío en la tercera edad, consejos para combatirlo
Como afirma el dicho popular “Más vale prevenir que curar”. Y eso es precisamente lo que se debe hacer con los adultos mayores, pues con el frío aumentan las enfermedades respiratorias. Los expertos consultados aseguran que una gripe o un catarro fuerte pueden empeorar en los ancianos otras...



Como afirma el dicho popular “Más vale prevenir que curar”. Y eso es precisamente lo que se debe hacer con los adultos mayores, pues con el frío aumentan las enfermedades respiratorias. Los expertos consultados aseguran que una gripe o un catarro fuerte pueden empeorar en los ancianos otras enfermedades de base o simplemente su situación general y derivar en una situación más grave.
En concreto los geriatras advierten que los adultos mayores con EPOC, insuficiencia cardiaca y enfermedades neurodegenerativas tienen más probabilidades de sufrir complicaciones ante catarros y procesos gripales.
En todo el país se están viviendo fríos extremos, de tal manera que ayer por ejemplo en Uyuni se registraron -17 grados, en Potosí -6 grados, en El Alto – 8, en Cochabamba - 1 y en Tarija llegamos a cero grados.
Más aún, el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) de Tarija prevé que aún en esta semana se registren más fríos y lleguemos a dos grados bajo cero, especialmente durante los días miércoles y jueves.
Los expertos dejan en claro que la mortalidad de un día de invierno, con relación a uno de verano, se incrementa de manera global en un 15%. De acuerdo a la doctora Patricia Molinedo una de las consecuencias del envejecimiento es que el organismo pierde calor con facilidad y tiene más dificultades para generarlo.
Además de agravar las enfermedades en ancianos, se debe tomar en cuenta que el frío provoca que los vasos sanguíneos se constriñan y se ralentiza la circulación de la sangre, por lo que aumentan las posibilidades de sufrir un infarto o un ictus.
Otra consecuencia es que la frialdad hace mantener los músculos contraídos porque nuestro cuerpo sufre un descenso térmico, haciendo que en muchos casos suframos contracturas y dolores musculares. Es entonces cuando el organismo echa mano de sus reservas de energía, respondiendo con un encogimiento del cuerpo que busca preservar el calor.
Pero ¿cuáles son las recomendaciones? El País efectuó varias consultas a expertos como la doctora Patricia Molinedo, la doctora Claudia Suárez y revistas de salud como Infosalus.com. De todo se concluyó en lo siguiente:
La ropa. Lo primero que se recomienda es el uso adecuado de ropa, prendas sueltas, ligeras, calientes e impermeables, se aconseja llevar varias “capas” y no prendas apretadas, para facilitar la circulación periférica. Añadido a esto la ropa por capas cumple un rol de aislamiento del frío.
También se aconseja que los ancianos usen guantes, gorras, sombreros, bufandas y calcetines de lana, pues hay que recordar que la mayor parte del calor del cuerpo se pierde por la cabeza, manos y pies.
No olvidemos que el zapato que usen debe ser caliente, resistente al agua y antideslizante. En caso de lluvia debemos mantenerlos secos, recordando que el agua y la humedad enfrían el cuerpo rápidamente.
Cuidado con la calefacción: A menudo recurrimos a estufas, calefacción y otros sistemas que generan calor. ¿Cuántas veces en Bolivia y en Tarija hemos escuchado noticias siniestras por olvidar apagar una estufa?, cientos de veces. Por lo tanto es importante usar calefactores que estén homologados, mantenerlos al menos a un metro de distancia de artículos inflamables, hacer una revisión antes de su uso y apagarlos en un tiempo prudente.
“La utilización de métodos poco seguros de calefacción pueden provocar una intoxicación por monóxido de carbono o incluso provocar incendios”, resalta Molinedo.
Aumentar la ingesta de alimentos proteicos: Otra forma de combatir el frío es añadir una mayor ingesta de carbohidratos y alimentos proteicos, pues esto ayuda a los ancianos a preservar el calor corporal. Serán también importantes los cítricos ricos en vitamina C para reforzar las defensas. “El consumo de frutas y verduras es fundamental”, asegura Fabiana Téllez, nutricionista.
Lavar las manos a menudo: Otro consejo fundamental es lavar con agua y jabón de manera constante las manos de los ancianos para evitar el contagio de enfermedades. “También es recomendable el uso de barbijos en personas que tienen ya enfermedades crónicas”, recomienda Suárez y agrega que además es importante el uso de pañuelos desechables para toser y estornudar.
Las temperaturas: Otro punto importante y al mismo tiempo error que cometemos a menudo está centrado en el cambio brusco de temperatura, pues muchas veces usamos calefacción o estufas, y de estar calientes en casa salimos al patio por cualquier motivo y nos resfriamos. Esto está prohibido para los adultos mayores.
Mantenerse activo: Ahora si bien es costoso que los adultos mayores salgan de casa, es importante que los que están en posibilidades no entren en una inmovilidad excesiva. Esto causa que las articulaciones y los músculos que no trabajan se endurezcan y se atrofien, lo que puede conducir a una torpeza progresiva. Se recomienda que hagan ejercicios con los pies y manos de manera diaria.
La familia. Un último consejo y uno de los más importantes es que los adultos mayores mantengan el contacto con la familia y amigos. El frío no es excusa para dejar de socializar con los que nos rodean.
Consejos en la casa
La cama
No mantenerse mucho tiempo en cama porque el reposo excesivo es perjudicial, por ejemplo, produce disminución de la masa muscular, de la fuerza y de la mineralización de los huesos.
Sin obstáculos
Para que los adultos mayores puedan circular sin inconvenientes se recomienda usar alfombras antideslizantes. No dejar objetos que interfieran desplazarse fácilmente. La cama debe tener una altura adecuada para prevenir accidentes.
Los resfríos
Si un adulto mayor presenta síntomas de resfrío o de alguna enfermedad respiratoria, los médicos consultados aseguran que es importante no automedicarlo y llevarlo a consulta médica, pues a una edad determinada las infecciones avanzan rápido.
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En concreto los geriatras advierten que los adultos mayores con EPOC, insuficiencia cardiaca y enfermedades neurodegenerativas tienen más probabilidades de sufrir complicaciones ante catarros y procesos gripales.
En todo el país se están viviendo fríos extremos, de tal manera que ayer por ejemplo en Uyuni se registraron -17 grados, en Potosí -6 grados, en El Alto – 8, en Cochabamba - 1 y en Tarija llegamos a cero grados.
Más aún, el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) de Tarija prevé que aún en esta semana se registren más fríos y lleguemos a dos grados bajo cero, especialmente durante los días miércoles y jueves.
Los expertos dejan en claro que la mortalidad de un día de invierno, con relación a uno de verano, se incrementa de manera global en un 15%. De acuerdo a la doctora Patricia Molinedo una de las consecuencias del envejecimiento es que el organismo pierde calor con facilidad y tiene más dificultades para generarlo.
Además de agravar las enfermedades en ancianos, se debe tomar en cuenta que el frío provoca que los vasos sanguíneos se constriñan y se ralentiza la circulación de la sangre, por lo que aumentan las posibilidades de sufrir un infarto o un ictus.
Otra consecuencia es que la frialdad hace mantener los músculos contraídos porque nuestro cuerpo sufre un descenso térmico, haciendo que en muchos casos suframos contracturas y dolores musculares. Es entonces cuando el organismo echa mano de sus reservas de energía, respondiendo con un encogimiento del cuerpo que busca preservar el calor.
Pero ¿cuáles son las recomendaciones? El País efectuó varias consultas a expertos como la doctora Patricia Molinedo, la doctora Claudia Suárez y revistas de salud como Infosalus.com. De todo se concluyó en lo siguiente:
La ropa. Lo primero que se recomienda es el uso adecuado de ropa, prendas sueltas, ligeras, calientes e impermeables, se aconseja llevar varias “capas” y no prendas apretadas, para facilitar la circulación periférica. Añadido a esto la ropa por capas cumple un rol de aislamiento del frío.
También se aconseja que los ancianos usen guantes, gorras, sombreros, bufandas y calcetines de lana, pues hay que recordar que la mayor parte del calor del cuerpo se pierde por la cabeza, manos y pies.
No olvidemos que el zapato que usen debe ser caliente, resistente al agua y antideslizante. En caso de lluvia debemos mantenerlos secos, recordando que el agua y la humedad enfrían el cuerpo rápidamente.
Cuidado con la calefacción: A menudo recurrimos a estufas, calefacción y otros sistemas que generan calor. ¿Cuántas veces en Bolivia y en Tarija hemos escuchado noticias siniestras por olvidar apagar una estufa?, cientos de veces. Por lo tanto es importante usar calefactores que estén homologados, mantenerlos al menos a un metro de distancia de artículos inflamables, hacer una revisión antes de su uso y apagarlos en un tiempo prudente.
“La utilización de métodos poco seguros de calefacción pueden provocar una intoxicación por monóxido de carbono o incluso provocar incendios”, resalta Molinedo.
Aumentar la ingesta de alimentos proteicos: Otra forma de combatir el frío es añadir una mayor ingesta de carbohidratos y alimentos proteicos, pues esto ayuda a los ancianos a preservar el calor corporal. Serán también importantes los cítricos ricos en vitamina C para reforzar las defensas. “El consumo de frutas y verduras es fundamental”, asegura Fabiana Téllez, nutricionista.
Lavar las manos a menudo: Otro consejo fundamental es lavar con agua y jabón de manera constante las manos de los ancianos para evitar el contagio de enfermedades. “También es recomendable el uso de barbijos en personas que tienen ya enfermedades crónicas”, recomienda Suárez y agrega que además es importante el uso de pañuelos desechables para toser y estornudar.
Las temperaturas: Otro punto importante y al mismo tiempo error que cometemos a menudo está centrado en el cambio brusco de temperatura, pues muchas veces usamos calefacción o estufas, y de estar calientes en casa salimos al patio por cualquier motivo y nos resfriamos. Esto está prohibido para los adultos mayores.
Mantenerse activo: Ahora si bien es costoso que los adultos mayores salgan de casa, es importante que los que están en posibilidades no entren en una inmovilidad excesiva. Esto causa que las articulaciones y los músculos que no trabajan se endurezcan y se atrofien, lo que puede conducir a una torpeza progresiva. Se recomienda que hagan ejercicios con los pies y manos de manera diaria.
La familia. Un último consejo y uno de los más importantes es que los adultos mayores mantengan el contacto con la familia y amigos. El frío no es excusa para dejar de socializar con los que nos rodean.
Consejos en la casa
La cama
No mantenerse mucho tiempo en cama porque el reposo excesivo es perjudicial, por ejemplo, produce disminución de la masa muscular, de la fuerza y de la mineralización de los huesos.
Sin obstáculos
Para que los adultos mayores puedan circular sin inconvenientes se recomienda usar alfombras antideslizantes. No dejar objetos que interfieran desplazarse fácilmente. La cama debe tener una altura adecuada para prevenir accidentes.
Los resfríos
Si un adulto mayor presenta síntomas de resfrío o de alguna enfermedad respiratoria, los médicos consultados aseguran que es importante no automedicarlo y llevarlo a consulta médica, pues a una edad determinada las infecciones avanzan rápido.
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