Comercio con India: exportar materias primas e importar manufacturas
Un reciente informe elaborado de manera conjunta entre el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco de Exportaciones e Importaciones de la India (Exim Bank), revela que las exportaciones de América Latina a la India están fuertemente concentradas en productos extractivos, que...



Un reciente informe elaborado de manera conjunta entre el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco de Exportaciones e Importaciones de la India (Exim Bank), revela que las exportaciones de América Latina a la India están fuertemente concentradas en productos extractivos, que representaron el 72% de las exportaciones en 2017.
En segundo lugar en importancia se sitúan los productos agrícolas con un 19%, mientras que las manufacturas industriales apenas sumaron un 9%.
En cambio, en las exportaciones de la India hacia Latinoamérica predominan “unas pocas manufacturas industriales”, que representaron el 85% de las exportaciones totales hacia la región en 2017, mientras que los productos extractivos participaron solo con el 11%.
El reporte agrega que “llama la atención que, en las dos últimas décadas, mientras las exportaciones de América Latina hacia el mundo pasaron a centrarse en los productos agrícolas, los envíos a la India estuvieron principalmente impulsados por los productos extractivos, en particular por el petróleo” y los minerales como el cobre y el oro.
Latinoamérica y Bolivia mantienen patrón primario-exportador
El BID-Exim Bank destacan que las exportaciones de petróleo, cuyos envíos se despachan mayoritariamente desde Venezuela, México y Brasil, representan un significativo 42% del total de las exportaciones de la región hacia India.
[caption id="attachment_464834" align="alignnone" width="519"] Principales exportaciones de América Latina a la India. Fuente: BID-Exim Bank 2019[/caption]
El cobre, que cuenta con el 12,8% de las exportaciones totales, es exportado principalmente por Chile, Perú y Brasil. Este producto está seguido por el oro que envían Perú, Bolivia y la República Dominicana, con un 12,1% del total.
Entre los productos agrícolas sobresale el aceite de soja, cuya participación es del 11,2%, con ventas provenientes principalmente de Argentina, pero también de Brasil y Paraguay.
Las manufacturas industriales apenas suman un 3,1% del valor de las exportaciones, porcentaje mayoritariamente explicado por los dispositivos de transmisión y recepción vendidos por México. Por tanto, si se excluyeran a México del análisis, habría una casi nula exportación de manufacturas.
El informe resalta en el caso de varios países latinoamericanos, las exportaciones hacia la India “están frecuentemente restringidas a un producto dominante”. A modo de ejemplo, resaltan que en 2017 el petróleo representó el 100% de las ventas de Venezuela a la India y el 65% de las de México.
El oro copó el 99% de las exportaciones de Bolivia y el 71% de las de Perú. Asimismo, el 94% y el 86% de los embarques que salieron de Paraguay y Argentina, respectivamente, correspondieron a aceite de soya.
India exporta manufacturas más diversificadas
Según el reporte, la India exporta hacia América Latina “una canasta de bienes más diversificada, en la cual las primeras diez subpartidas representan un tercio de las ventas totales hacia la región”.
Destacan las manufacturas industriales, entre las que los vehículos automotores representan el 18 % (de los cuales México recibe un 66%, Chile un 9% y Perú un 7%). En segundo lugar, los medicamentos agregan un 3,5% a las exportaciones totales hacia la región (Brasil representa un 27% del mercado latinoamericano, Chile un 11% y Venezuela un 7%).
Con respecto a los productos extractivos, en la lista de los primeros diez solamente aparecen el aluminio en bruto, con un 1,8% de las exportaciones totales hacia Latinoamérica (México importa un 57%,
Brasil un 26%, y Colombia un 12%) y el petróleo no crudo, con un 1,2% (del cual un 30% se envía a México, un 25% a Argentina y un 17% a Uruguay).
Balanza comercial se inclina hacia Latinoamérica
La balanza comercial sigue una tendencia favorable para la región. En 2017, el superávit comercial de América Latina con la India alcanzó los 9.000 millones de dólares.
[caption id="attachment_464835" align="aligncenter" width="540"] Balanza comercial de América Latina es positiva en extractivas y negativa en manufacturas. Fuente: BID-Exim Bank 2019[/caption]
Sin embargo, el reporte advierte que “el resultado neto estuvo principalmente impulsado por la tendencia creciente de las importaciones de petróleo por parte de la India que, a su vez, se amplificó por las fluctuaciones cíclicas del precio del crudo. De hecho, los flujos comerciales de productos no extractivos están significativamente equilibrados. América Latina muestra un superávit creciente en productos agrícolas, mientras que la India cuenta con un superávit en manufacturas industriales”.
Esto significa que este superávit favorable a Latinoamérica es altamente dependiente de las cotizaciones internacionales del petróleo, de los minerales y de los commodities agrícolas (soya por ejemplo), sobre las que los países de la región no tienen mayor control, ya que éstos se rigen por las leyes de la oferta y la demanda global en la que entran muchos otros ofertantes y compradores.
De ahí que este balance favorable puede ser cíclico o temporal, tal como lo fue la época del auge económico en la región cuando los precios petroleros estuvieron en sus máximos históricos hace unos años.
Inversión directa de India en la región es marginal
“Como sucede con el comercio, los flujos de inversión extranjera directa (IED) entre América Latina y la India todavía no alcanzan niveles comparables con los que se registran en otros países asiáticos, aunque la escasez de información no permite construir una representación precisa de las relaciones bilaterales en materia de inversión”, explica el informe de BID-Exim Bank.
Según los datos presentados, en el periodo 2008-2018, las empresas indias invirtieron 704 millones de dólares en la región, lo que representa apenas el 1% de la IED total. Sin embargo, a lo largo de la década la participación anual de los flujos hacia Latinoamérica ha mostrado una tendencia ascendente.
En el periodo mencionado, un tercio de las inversiones indias en la región se dirigieron a Brasil. Bahamas (23,5%), Panamá (16,5%), Colombia (8,3%) y México (6,9%) también fueron destinos relevantes, mientras que el conjunto del resto de las economías receptoras representó apenas algo más del 10%. Los datos por sector muestran que la mayoría de las inversiones indias fueron absorbidas por la construcción (28,8%), el sector manufacturero (23,6%) y el sector financiero (14,9%).
El informe también afirma que, a pesar de estas cifras agregadas tan bajas, “hay algunos casos de éxito que sugieren que el alcance de los intereses indios en América Latina se está expandiendo rápidamente”. Sin embargo, este no es el caso para países como Bolivia.
La mala experiencia de Bolivia con Jindal
Como antecedente de inversión india en Bolivia se tiene a la Jindal Steel. En 2007 se firmó un contrato entre Jindal y la estatal Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM). En él, la empresa india se comprometía a invertir un monto de 2.100 millones de dólares, de los cuales 600 millones tenían que ser desembolsados los dos primeros años, para la exploración, explotación, concentración, peletización, reducción directa, aceración, industrialización y comercialización de productos metalúrgicos y siderúrgicos, obtenidos de minerales de hierro del yacimiento del Mutún.
[caption id="attachment_464836" align="alignright" width="279"] La única experiencia en Bolivia con empresas de India fue la Jindal Steel, que terminó mal.[/caption]
El 2011, ante el incumplimiento de la inversión, la ESM ejecutó las 2 boletas de garantía por 36 millones de dólares, lo que motivó a Jindal a iniciar un arbitraje internacional contra exigiendo una indemnización de 86 millones de dólares.
En noviembre de 2018, el Tribunal Arbitral de la Cámara de Comercio Internacional decidió excluir del arbitraje a la Comibol y al Estado boliviano, y condenó a la demandante Jindal Steel al “pago de costas” a 263.546,50 dólares a favor de la Comibol y de 360.202,82 dólares a favor del Estado. El arbitraje contra la ESM continúa.
Costo de comerciar con India es elevado
Según BID-Exim Bank, los costos asociados al comercio de bienes entre América Latina y la India “representan una barrera que limita la profundización de los lazos económicos y sus beneficios. Estos costos están compuestos por aranceles, barreras no arancelarias (BNA) e ineficiencias que afectan a los procesos logísticos y al transporte”.
[caption id="attachment_464837" align="alignnone" width="539"] Costos totales del comercio entre India y países latinoamericanos. Fuente: BID-Exim Bank 2019[/caption]
En 2016, los costos totales bilaterales del comercio entre India y la región ascendían a 198% en promedio. Pero existe mucha heterogeneidad entre los países, “dada la variación en las relaciones peso/valor de las canastas exportadas, las diferencias en las modalidades de transporte (marítimo o aéreo) o la incidencia asimétrica de las barreras comerciales”.
Los costos del comercio entre India y Brasil, México y Argentina son los más bajos: se ubican en el 138%, 147% y 148%, respectivamente. Por el contrario, los costos de comerciar con Jamaica, El Salvador y Guyana son “casi prohibitivos” (289%, 280% y 265%, respectivamente), “lo cual podría explicar por qué el comercio entre la India y muchos países de la región es prácticamente nulo”.
Los costos del comercio ente India y Bolivia están entre el 170% y el 180%, que, si bien es una reducción importante considerando que en 2010 estaba por encima del 300%, todavía es elevado.
Recientes acuerdos Bolivia-India
A finales de marzo, el presidente de la India, Ram Nath Kovind, visitó Bolivia y firmó, junto con el presidente Evo Morales, un memorando de entendimiento que engloban las áreas de salud, tecnología, minería, transporte, cultura, relaciones diplomáticas y otros.
Entre los puntos más relevantes, destaca el acuerdo para promover inversiones para la construcción y puesta en marcha del ferrocarril bioceánico que proyectó Bolivia para unir los océanos Atlántico y Pacífico, desde Santos-Brasil hasta Ilo-Perú. Aunque los críticos denuncian que esta infraestructura servirá fundamentalmente para impulsar aún más la exportación de materias primas.
La cooperación en el ámbito de la información satelital, a través del intercambio de conocimientos con la especialización de profesionales bolivianos en la India, también fue parte de lo firmado.
Asimismo, se acordó la transferencia de tecnología para mejorar el equipamiento y la infraestructura de los hospitales y centros de salud del país. En ese marco, Bolivia decidió invertir 100 millones de dólares, de un crédito otorgado por la India en la ocasión, para implementar la industria de medicamentos contra el cáncer y el desarrollo de la medicina alternativa homeopática.
Recién se irán conociendo los reales alcances y condiciones de estos acuerdos, y de qué manera serán o no beneficiosos para una y otra parte.
[caption id="attachment_464838" align="aligncenter" width="477"] Acuerdos y condecoración al presidente de la República de la India, Ram Nath Kovind[/caption]
En segundo lugar en importancia se sitúan los productos agrícolas con un 19%, mientras que las manufacturas industriales apenas sumaron un 9%.
En cambio, en las exportaciones de la India hacia Latinoamérica predominan “unas pocas manufacturas industriales”, que representaron el 85% de las exportaciones totales hacia la región en 2017, mientras que los productos extractivos participaron solo con el 11%.
El reporte agrega que “llama la atención que, en las dos últimas décadas, mientras las exportaciones de América Latina hacia el mundo pasaron a centrarse en los productos agrícolas, los envíos a la India estuvieron principalmente impulsados por los productos extractivos, en particular por el petróleo” y los minerales como el cobre y el oro.
Latinoamérica y Bolivia mantienen patrón primario-exportador
El BID-Exim Bank destacan que las exportaciones de petróleo, cuyos envíos se despachan mayoritariamente desde Venezuela, México y Brasil, representan un significativo 42% del total de las exportaciones de la región hacia India.
[caption id="attachment_464834" align="alignnone" width="519"] Principales exportaciones de América Latina a la India. Fuente: BID-Exim Bank 2019[/caption]
El cobre, que cuenta con el 12,8% de las exportaciones totales, es exportado principalmente por Chile, Perú y Brasil. Este producto está seguido por el oro que envían Perú, Bolivia y la República Dominicana, con un 12,1% del total.
Entre los productos agrícolas sobresale el aceite de soja, cuya participación es del 11,2%, con ventas provenientes principalmente de Argentina, pero también de Brasil y Paraguay.
Las manufacturas industriales apenas suman un 3,1% del valor de las exportaciones, porcentaje mayoritariamente explicado por los dispositivos de transmisión y recepción vendidos por México. Por tanto, si se excluyeran a México del análisis, habría una casi nula exportación de manufacturas.
El informe resalta en el caso de varios países latinoamericanos, las exportaciones hacia la India “están frecuentemente restringidas a un producto dominante”. A modo de ejemplo, resaltan que en 2017 el petróleo representó el 100% de las ventas de Venezuela a la India y el 65% de las de México.
El oro copó el 99% de las exportaciones de Bolivia y el 71% de las de Perú. Asimismo, el 94% y el 86% de los embarques que salieron de Paraguay y Argentina, respectivamente, correspondieron a aceite de soya.
India exporta manufacturas más diversificadas
Según el reporte, la India exporta hacia América Latina “una canasta de bienes más diversificada, en la cual las primeras diez subpartidas representan un tercio de las ventas totales hacia la región”.
Destacan las manufacturas industriales, entre las que los vehículos automotores representan el 18 % (de los cuales México recibe un 66%, Chile un 9% y Perú un 7%). En segundo lugar, los medicamentos agregan un 3,5% a las exportaciones totales hacia la región (Brasil representa un 27% del mercado latinoamericano, Chile un 11% y Venezuela un 7%).
Con respecto a los productos extractivos, en la lista de los primeros diez solamente aparecen el aluminio en bruto, con un 1,8% de las exportaciones totales hacia Latinoamérica (México importa un 57%,
Brasil un 26%, y Colombia un 12%) y el petróleo no crudo, con un 1,2% (del cual un 30% se envía a México, un 25% a Argentina y un 17% a Uruguay).
Balanza comercial se inclina hacia Latinoamérica
La balanza comercial sigue una tendencia favorable para la región. En 2017, el superávit comercial de América Latina con la India alcanzó los 9.000 millones de dólares.
[caption id="attachment_464835" align="aligncenter" width="540"] Balanza comercial de América Latina es positiva en extractivas y negativa en manufacturas. Fuente: BID-Exim Bank 2019[/caption]
Sin embargo, el reporte advierte que “el resultado neto estuvo principalmente impulsado por la tendencia creciente de las importaciones de petróleo por parte de la India que, a su vez, se amplificó por las fluctuaciones cíclicas del precio del crudo. De hecho, los flujos comerciales de productos no extractivos están significativamente equilibrados. América Latina muestra un superávit creciente en productos agrícolas, mientras que la India cuenta con un superávit en manufacturas industriales”.
Esto significa que este superávit favorable a Latinoamérica es altamente dependiente de las cotizaciones internacionales del petróleo, de los minerales y de los commodities agrícolas (soya por ejemplo), sobre las que los países de la región no tienen mayor control, ya que éstos se rigen por las leyes de la oferta y la demanda global en la que entran muchos otros ofertantes y compradores.
De ahí que este balance favorable puede ser cíclico o temporal, tal como lo fue la época del auge económico en la región cuando los precios petroleros estuvieron en sus máximos históricos hace unos años.
Inversión directa de India en la región es marginal
“Como sucede con el comercio, los flujos de inversión extranjera directa (IED) entre América Latina y la India todavía no alcanzan niveles comparables con los que se registran en otros países asiáticos, aunque la escasez de información no permite construir una representación precisa de las relaciones bilaterales en materia de inversión”, explica el informe de BID-Exim Bank.
Según los datos presentados, en el periodo 2008-2018, las empresas indias invirtieron 704 millones de dólares en la región, lo que representa apenas el 1% de la IED total. Sin embargo, a lo largo de la década la participación anual de los flujos hacia Latinoamérica ha mostrado una tendencia ascendente.
En el periodo mencionado, un tercio de las inversiones indias en la región se dirigieron a Brasil. Bahamas (23,5%), Panamá (16,5%), Colombia (8,3%) y México (6,9%) también fueron destinos relevantes, mientras que el conjunto del resto de las economías receptoras representó apenas algo más del 10%. Los datos por sector muestran que la mayoría de las inversiones indias fueron absorbidas por la construcción (28,8%), el sector manufacturero (23,6%) y el sector financiero (14,9%).
El informe también afirma que, a pesar de estas cifras agregadas tan bajas, “hay algunos casos de éxito que sugieren que el alcance de los intereses indios en América Latina se está expandiendo rápidamente”. Sin embargo, este no es el caso para países como Bolivia.
La mala experiencia de Bolivia con Jindal
Como antecedente de inversión india en Bolivia se tiene a la Jindal Steel. En 2007 se firmó un contrato entre Jindal y la estatal Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM). En él, la empresa india se comprometía a invertir un monto de 2.100 millones de dólares, de los cuales 600 millones tenían que ser desembolsados los dos primeros años, para la exploración, explotación, concentración, peletización, reducción directa, aceración, industrialización y comercialización de productos metalúrgicos y siderúrgicos, obtenidos de minerales de hierro del yacimiento del Mutún.
[caption id="attachment_464836" align="alignright" width="279"] La única experiencia en Bolivia con empresas de India fue la Jindal Steel, que terminó mal.[/caption]
El 2011, ante el incumplimiento de la inversión, la ESM ejecutó las 2 boletas de garantía por 36 millones de dólares, lo que motivó a Jindal a iniciar un arbitraje internacional contra exigiendo una indemnización de 86 millones de dólares.
En noviembre de 2018, el Tribunal Arbitral de la Cámara de Comercio Internacional decidió excluir del arbitraje a la Comibol y al Estado boliviano, y condenó a la demandante Jindal Steel al “pago de costas” a 263.546,50 dólares a favor de la Comibol y de 360.202,82 dólares a favor del Estado. El arbitraje contra la ESM continúa.
Costo de comerciar con India es elevado
Según BID-Exim Bank, los costos asociados al comercio de bienes entre América Latina y la India “representan una barrera que limita la profundización de los lazos económicos y sus beneficios. Estos costos están compuestos por aranceles, barreras no arancelarias (BNA) e ineficiencias que afectan a los procesos logísticos y al transporte”.
[caption id="attachment_464837" align="alignnone" width="539"] Costos totales del comercio entre India y países latinoamericanos. Fuente: BID-Exim Bank 2019[/caption]
En 2016, los costos totales bilaterales del comercio entre India y la región ascendían a 198% en promedio. Pero existe mucha heterogeneidad entre los países, “dada la variación en las relaciones peso/valor de las canastas exportadas, las diferencias en las modalidades de transporte (marítimo o aéreo) o la incidencia asimétrica de las barreras comerciales”.
Los costos del comercio entre India y Brasil, México y Argentina son los más bajos: se ubican en el 138%, 147% y 148%, respectivamente. Por el contrario, los costos de comerciar con Jamaica, El Salvador y Guyana son “casi prohibitivos” (289%, 280% y 265%, respectivamente), “lo cual podría explicar por qué el comercio entre la India y muchos países de la región es prácticamente nulo”.
Los costos del comercio ente India y Bolivia están entre el 170% y el 180%, que, si bien es una reducción importante considerando que en 2010 estaba por encima del 300%, todavía es elevado.
Recientes acuerdos Bolivia-India
A finales de marzo, el presidente de la India, Ram Nath Kovind, visitó Bolivia y firmó, junto con el presidente Evo Morales, un memorando de entendimiento que engloban las áreas de salud, tecnología, minería, transporte, cultura, relaciones diplomáticas y otros.
Entre los puntos más relevantes, destaca el acuerdo para promover inversiones para la construcción y puesta en marcha del ferrocarril bioceánico que proyectó Bolivia para unir los océanos Atlántico y Pacífico, desde Santos-Brasil hasta Ilo-Perú. Aunque los críticos denuncian que esta infraestructura servirá fundamentalmente para impulsar aún más la exportación de materias primas.
La cooperación en el ámbito de la información satelital, a través del intercambio de conocimientos con la especialización de profesionales bolivianos en la India, también fue parte de lo firmado.
Asimismo, se acordó la transferencia de tecnología para mejorar el equipamiento y la infraestructura de los hospitales y centros de salud del país. En ese marco, Bolivia decidió invertir 100 millones de dólares, de un crédito otorgado por la India en la ocasión, para implementar la industria de medicamentos contra el cáncer y el desarrollo de la medicina alternativa homeopática.
Recién se irán conociendo los reales alcances y condiciones de estos acuerdos, y de qué manera serán o no beneficiosos para una y otra parte.
[caption id="attachment_464838" align="aligncenter" width="477"] Acuerdos y condecoración al presidente de la República de la India, Ram Nath Kovind[/caption]