Presidencia y Alcalde alterno; debate en el Concejo Municipal
En dos semanas se cumple la gestión de la actual Directiva del Concejo Municipal. Una gestión que inició con tumulto y ha terminado prácticamente en el mismo sitio donde estaba la anterior. Francisco Rosas fue entonces elegido presidente del Concejo Municipal en un acuerdo coyuntural entre...
En dos semanas se cumple la gestión de la actual Directiva del Concejo Municipal. Una gestión que inició con tumulto y ha terminado prácticamente en el mismo sitio donde estaba la anterior. Francisco Rosas fue entonces elegido presidente del Concejo Municipal en un acuerdo coyuntural entre los dos concejales “leales” al exalcalde Óscar Montes y los tres concejales del Movimiento Al Socialismo. Rosas, que hasta entonces parecía se había inclinado hacia el lado del alcalde Rodrigo Paz en su lucha encarnizada con Montes, decidió entonces “cambiar de bando” para ocupar la Presidencia.
Tanto Rosas como Montes han repetido varias veces a lo largo del año que nunca hablaron entonces y que nunca más han vuelto a hablar desde que en 2015 y 2016 se intercambiaran apreciaciones sobre sus gestiones. Lo cierto es que la mayoría que conformaron Ruth Ponce y Alberto Valdez por un lado y Sergio Gallardo, Raquel Ruíz y Ana Sorich sumaron para desbancar a Alfonso Lema, que se sumó a UNIR con la garantía de la Presidencia pero que optó por no presentarse, y a Valmoré Donoso, que perdió.
El argumento de Rosas era la “fiscalización”, un ejercicio que el Concejo no ha ejercido en los últimos 15 años, porque siempre ha habido mayoría cualificada del partido de gobierno. Tampoco ahora. En ese momento se señalaban proyectos concretos como “el mástil”, el puente 4 de Julio, el proyecto Ciudad Inteligente, la entrega de pantallas led y otros, como susceptibles “de corrupción” y se comprometió una intensa fiscalización, pero finalmente todos siguen su curso.
Renuncia
Mientras no se modifique la normativa vigente, los candidatos deben renunciar 90 días antes a la elección
Después, la Directiva de Francisco Rosas, que completan Sorich y Ruíz, se concentró en la exigencia de priorizar la inversión en servicios básicos acusando al Gobierno Municipal de no hacerlo. El Gobierno Municipal centró también su estrategia en predicar la inversión en servicios básicos en los barrios, con lo cual el pulso verbal no pasó de eso. Con la llegada del verano, los discursos beligerantes de Rosas ya habían pasado a la historia y no tardó en sumar votos para endeudar la ciudad, primero con puentes, después con colegios y centros de salud de los que Evo Morales entrega casi a diario en todo el país y que en Tarija se pagarán con recursos propios y endeudados al 6 por ciento.
La clave del interinato
En esas componendas, tanto el MAS como el sector próximo al exalcalde da por hecho que Francisco Rosas seguirá siendo Presidente del Concejo Municipal, pero esta vez con el apoyo de los concejales de Rodrigo Paz: Alfonso Lema, Valmoré Donoso, Cira Flores y Esther García, aunque también debería sumar el voto de Alan Echart, de UDA, y que aunque ha mostrado perfil colaborador, en los últimos meses ha tenido que lidiar con no pocas distensiones a cuenta de proyectos de ley frustrados o trabados.
Más allá de cómo se conforme la Directiva, la clave será la decisión de cambiar o no al actual alcalde alterno. La elegida en la primera gestión fue Cira Flores, pero el año pasado fue sustituida por Alberto Valdez, de línea frontal contra el alcalde. El año pasado la comisión jurídica determinó que sí era posible el cambio de esta figura. En cualquier caso, quien marcará los tiempos será quien ocupe la Presidencia del Concejo y elabore la convocatoria perceptiva cuando le cuadren los tiempos.
Pese a que el debate se está dando en el Tribunal Constitucional de La Paz a instancias de Félix Patzi y existe la posibilidad de que se revoque la desigualdad que supone que unas autoridades renuncien para ser candidatos y otras no, por el momento y con la norma vigente, el alcalde Rodrigo Paz debería renunciar noventa días antes de la elección y su vacante sería ocupada por Valdez, lo que generaría un escenario diferente de cara a la elección de 2020.
Tanto Rosas como Montes han repetido varias veces a lo largo del año que nunca hablaron entonces y que nunca más han vuelto a hablar desde que en 2015 y 2016 se intercambiaran apreciaciones sobre sus gestiones. Lo cierto es que la mayoría que conformaron Ruth Ponce y Alberto Valdez por un lado y Sergio Gallardo, Raquel Ruíz y Ana Sorich sumaron para desbancar a Alfonso Lema, que se sumó a UNIR con la garantía de la Presidencia pero que optó por no presentarse, y a Valmoré Donoso, que perdió.
El argumento de Rosas era la “fiscalización”, un ejercicio que el Concejo no ha ejercido en los últimos 15 años, porque siempre ha habido mayoría cualificada del partido de gobierno. Tampoco ahora. En ese momento se señalaban proyectos concretos como “el mástil”, el puente 4 de Julio, el proyecto Ciudad Inteligente, la entrega de pantallas led y otros, como susceptibles “de corrupción” y se comprometió una intensa fiscalización, pero finalmente todos siguen su curso.
Renuncia
Mientras no se modifique la normativa vigente, los candidatos deben renunciar 90 días antes a la elección
Después, la Directiva de Francisco Rosas, que completan Sorich y Ruíz, se concentró en la exigencia de priorizar la inversión en servicios básicos acusando al Gobierno Municipal de no hacerlo. El Gobierno Municipal centró también su estrategia en predicar la inversión en servicios básicos en los barrios, con lo cual el pulso verbal no pasó de eso. Con la llegada del verano, los discursos beligerantes de Rosas ya habían pasado a la historia y no tardó en sumar votos para endeudar la ciudad, primero con puentes, después con colegios y centros de salud de los que Evo Morales entrega casi a diario en todo el país y que en Tarija se pagarán con recursos propios y endeudados al 6 por ciento.
La clave del interinato
En esas componendas, tanto el MAS como el sector próximo al exalcalde da por hecho que Francisco Rosas seguirá siendo Presidente del Concejo Municipal, pero esta vez con el apoyo de los concejales de Rodrigo Paz: Alfonso Lema, Valmoré Donoso, Cira Flores y Esther García, aunque también debería sumar el voto de Alan Echart, de UDA, y que aunque ha mostrado perfil colaborador, en los últimos meses ha tenido que lidiar con no pocas distensiones a cuenta de proyectos de ley frustrados o trabados.
Más allá de cómo se conforme la Directiva, la clave será la decisión de cambiar o no al actual alcalde alterno. La elegida en la primera gestión fue Cira Flores, pero el año pasado fue sustituida por Alberto Valdez, de línea frontal contra el alcalde. El año pasado la comisión jurídica determinó que sí era posible el cambio de esta figura. En cualquier caso, quien marcará los tiempos será quien ocupe la Presidencia del Concejo y elabore la convocatoria perceptiva cuando le cuadren los tiempos.
Pese a que el debate se está dando en el Tribunal Constitucional de La Paz a instancias de Félix Patzi y existe la posibilidad de que se revoque la desigualdad que supone que unas autoridades renuncien para ser candidatos y otras no, por el momento y con la norma vigente, el alcalde Rodrigo Paz debería renunciar noventa días antes de la elección y su vacante sería ocupada por Valdez, lo que generaría un escenario diferente de cara a la elección de 2020.