La moringa, el árbol “milagroso” de moda
René consume hojas secas de moringa, con ellas se hace un mate casi a diario. Según asegura, desde que ha incorporado esta planta a su dieta ha notado una clara mejora en su salud. “Se me quitó la fatiga, se me quitó la falta de concentración y la falta de memoria y claro que también...



René consume hojas secas de moringa, con ellas se hace un mate casi a diario. Según asegura, desde que ha incorporado esta planta a su dieta ha notado una clara mejora en su salud.
“Se me quitó la fatiga, se me quitó la falta de concentración y la falta de memoria y claro que también el estrés, probé dejar de consumirla 3 a 4 días y me volvió la fatiga, la volví a consumir y me regresó la energía. Estoy más relajado y duermo bien cada noche, la consumo desde hace como tres meses”, cuenta emocionado por el claro impacto que tuvo las hojas del árbol en su salud.
Agrega también que se venden en pastillas en consultorios de medicina natural aunque él prefiere hacerse enviar las hojas con un pariente desde Argentina, país en el que ya se cultiva esta planta milenaria originaria de la India. “En Argentina se cultiva y procesa en Misiones, en una zona de clima similar a su país de origen”, revela.
La moringa es un árbol de entre cinco y diez metros de alto, con agrupaciones de pequeñas hojas ovaladas y flores de color crema, delicadamente perfumadas. Su nombre exacto es Moringa oleífera, la especie más cultivada de las 14 que componen el género Moringa, conocidas como “los árboles milagrosos”.
“Se le llama árbol milagroso porque todas sus partes dan beneficios”, dice Balbir Mathur, presidente de Trees for Life, una ONG que proporciona ayuda para el desarrollo a través de la plantación de árboles frutales, entre ellos la moringa. “Las raíces, las hojas, la corteza, las partes de los frutos y las semillas. Todo. La lista es interminable”, explica al hablar de sus beneficios.
Las moringas, naturales del norte de la India, aunque ahora ampliamente extendidas por Asia, África y Latinoamérica, se han usado en las aldeas en países en vías de desarrollo durante siglos. Sus usos van desde la medicina tradicional, como alimento y aceite de cocina, hasta su uso como pesticida natural, producto de limpieza doméstico y, la novedad más reciente, como biocombustible.
Las moringas son sumamente resistentes. Por lo que en algunas partes de África se les conoce como “nebedies”, que significa “los árboles que nunca mueren”, pues crecen en suelos poco fértiles, rebrotan después de talarlos y es uno de los pocos árboles que dan fruto durante una sequía.
Propiedades nutricionales
Entre los nutrientes de la moringa los expertos destacan sus hojas ricas en vitamina C, vitamina A, vitaminas del grupo B (B1, B2, B3, B5, B6), vitamina E, vitamina K, minerales como el potasio, hierro, calcio, fósforo, selenio, magnesio, triptófano y zinc.
En usos medicinales, la moringa se emplea en casos de: asma, hepatitis, epilepsia, diabetes, enfermedades cardiacas, tos, hipertensión, artritis, ictericia, enfermedades de los riñones, anemia, desnutrición, bronquitis, enfermedades de la piel, tuberculosis, problemas de los ojos, síntomas de la menopausia. Además la moringa tiene acción antiinflamatoria, efecto antibiótico y retrasa el envejecimiento.
Un artículo de la revista científica Muy Interesante detalla sus beneficios.
Lucha contra los radicales libres
Los antioxidantes de la moringa combaten los radicales libres, moléculas que causan estrés oxidativo, daño celular e inflamación. La moringa contiene antioxidantes llamados flavonoides, polifenoles y ácido ascórbico en las hojas, flores y semillas.
Un estudio encontró que los extractos de las hojas tenían mayor actividad antioxidante, capacidad de barrido de radicales libres y mayor inhibición de la oxidación de lípidos, proteínas y ADN que las flores y semillas. Esto significa que evita el daño y degradación que causan los radicales libres en las células de los diferentes órganos del cuerpo, manteniéndolos sanos y funcionando a su mejor nivel.
Antiinflamatorio
La inflamación puede conducir a enfermedades crónicas como diabetes, problemas respiratorios, enfermedades cardiovasculares, artritis y obesidad. La moringa reduce la inflamación mediante la supresión de enzimas inflamatorias y proteínas en el cuerpo, y el concentrado de hoja de moringa puede reducir significativamente la inflamación en las células.
El polvo de hoja de moringa ha sido efectivo para reducir los niveles de lípidos y glucosa y para regular el estrés oxidativo en pacientes diabéticos, lo que significa que disminuye el azúcar en la sangre y el colesterol y mejora la protección contra el daño celular.
Protege el sistema cardiovascular
El polvo de hoja de moringa tiene beneficios para el corazón, particularmente en el control de lípidos en la sangre, la prevención de la formación de placas en las arterias y la reducción de los niveles de colesterol.
Apoya la salud del cerebro
Otro dato que refleja el artículo científico es el beneficio para el cerebro. Esto pasa gracias a sus actividades antioxidantes y neuropotenciadoras. También se ha probado como un tratamiento para la enfermedad de Alzheimer con resultados preliminares favorables.
Los expertos indican que su alto contenido de vitaminas E y C combaten la oxidación que conduce a la degeneración neuronal, mejorando la función cerebral. También es capaz de normalizar los neurotransmisores serotonina, dopamina y noradrenalina en el cerebro, que desempeñan un papel clave en la memoria, el estado de ánimo, la función de órganos, las respuestas a estímulos como el estrés y el placer y la salud mental.
Protege el hígado
La moringa contiene altas concentraciones de polifenoles en sus hojas y flores que protegen al hígado contra la oxidación, toxicidad y daño. La moringa puede reducir el daño hepático y la fibrosis y revertir la oxidación en el hígado. El aceite de moringa también puede restaurar las enzimas hepáticas a niveles normales, reducir el estrés oxidativo y aumentar el contenido de proteínas en el hígado.
El hígado es responsable de la desintoxicación de la sangre, la producción de la bilis, el metabolismo de la fructosa, el metabolismo de las grasas, y el procesamiento de nutrientes, y sólo puede cumplir estas funciones con la ayuda de enzimas hepáticas, por lo que es vital que se mantenga a niveles normales.
Preparación y precauciones
Ante la preocupación de que la población pueda consumir la planta sin medida o de mala manera El País consultó a varios naturistas sobre cómo consumirla, ellos coincidieron en varios aspectos que citamos a continuación:
“Algo que llama la atención de la moringa es que sus hojas conservan gran cantidad de las vitaminas y minerales luego de secarse, lo que ha sido de gran utilidad para su comercialización con fines medicinales. Sus hojas secas se usan para prepararse un delicioso té de moringa”, dijo Felipe Castillo y agregó que las hojas pueden comerse crudas o cocinarse al igual que la espinaca. Sin embargo, una vez secas, las hojas pueden molerse y hacerse té e infusiones: La hoja, seca y molida se presenta como polvo de hojas de moringa, excelente para otorgar sus propiedades a algún té o comidas.
Pero también hay cápsulas en ese caso será mejor seguir las instrucciones del envase.
Sin embargo, los expertos advierten sobre la moderación en su consumo, pues entre sus efectos secundarios se incluyen pérdida de sueño, exceso de glóbulos rojos y acidez.
Se debe evitar el consumo de la raíz de moringa y sus extractos porque pueden contener sustancias tóxicas altamente peligrosas.
Las mujeres embarazadas o lactando no deben utilizar moringa, ya que podría producir contracciones uterinas y aumentar el riesgo de aborto involuntario. Durante la lactancia se debe evitar porque no hay suficiente información para conocer con exactitud si es segura para el bebé.
Introduciendo la moringa a tu dieta
Se recomienda comenzar con media cucharadita cafetera por día los primeros 3 – 5 días, de preferencia con el desayuno y siempre acompañada de alimentos.
El polvo de Moringa es fuerte y puede manifestar efectos secundarios si se toman grandes dosis de esta.
Después de los 3 – 5 días, se puede incrementar su consumo. Una cucharadita al día es suficiente para una persona saludable.
Si te estás recuperando de algún padecimiento o estas sufriendo de alguna condición crónica que afecte tu estado físico, dos cucharaditas al día serían lo ideal, pero, si tu estomago esta delicado y se necesita recuperar de los medicamentos, es mejor disminuir el consumo.
Té de moringa
Si lo que tienes son hojas de moringa (o polvo), puedes agregarlas a agua caliente para crear té. Obviamente vas a tener que colar el polvo a través de una tela o gasa si no cuentas con bolsitas para té, de esta manera las hojas se mantendrán atrapadas y los nutrientes se diluirán en el agua.
Pero cuidado, no hagas hervir las hojas de moringa junto con el agua, ya que éstas pueden perder nutrientes con el exceso de calor, mejor primero hierve el agua y luego agrega las hojas al agua caliente y déjala reposar unos 3 – 5 minutos para que las hojas puedan soltar los nutrientes en el agua caliente.
Hay que notar que el té de Moringa tiene menos nutrientes que tomar el polvo de manera normal.
Aumentan el número de productores de moringa
En Santa Cruz existe la asociación de productores de moringa y de stevia, esta organización desarrolla cada año diferentes eventos para exponer las propiedades del “árbol milagroso”.
Rafael Pando, gerente de M&S Agro Stevia y presidente de la Asociación de Moringueros de Santa Cruz, explica que en Santa Cruz hay varios productores de moringa, que se encuentran en la zona del Norte Integrado, al sur, los valles y otras regiones de dicho departamento.
Tienen registrados alrededor de 100.000 plantines entre los productores que pertenecen a la asociación. Aunque esta cantidad puede ser aún más debido a los emprendimientos privados que no se conocen.
“Tiene más calcio que la leche y más proteína que la carne, más potasio que el guineo, más hierro que la espinaca, tiene 46 antioxidantes, todo esto posibilita que las personas puedan curarse de varias enfermedades o prevenir. Por las propiedades de la moringa es conocida como la planta del milagro o superplanta”, aseguró Pando.
En otro emprendimiento igual en Santa Cruz, la empresa “Revit” ofrece una bolsa de hojas secas de moringa a 20 bolivianos. Son ideales para hacer mate e incluso utilizarlo sobre la pizza como si fuera orégano.
Cosmética Un regalo para la piel
Las hojas secas de la moringa son un gran regalo para la piel por sus efectos nutritivos y su capacidad rejuvenecedora. Muchas casas de cosmética ya incluyen esta planta entre los componentes de sus productos por su fortaleza para mantener a raya la aparición de arrugas y líneas de expresión.
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“Se me quitó la fatiga, se me quitó la falta de concentración y la falta de memoria y claro que también el estrés, probé dejar de consumirla 3 a 4 días y me volvió la fatiga, la volví a consumir y me regresó la energía. Estoy más relajado y duermo bien cada noche, la consumo desde hace como tres meses”, cuenta emocionado por el claro impacto que tuvo las hojas del árbol en su salud.
Agrega también que se venden en pastillas en consultorios de medicina natural aunque él prefiere hacerse enviar las hojas con un pariente desde Argentina, país en el que ya se cultiva esta planta milenaria originaria de la India. “En Argentina se cultiva y procesa en Misiones, en una zona de clima similar a su país de origen”, revela.
La moringa es un árbol de entre cinco y diez metros de alto, con agrupaciones de pequeñas hojas ovaladas y flores de color crema, delicadamente perfumadas. Su nombre exacto es Moringa oleífera, la especie más cultivada de las 14 que componen el género Moringa, conocidas como “los árboles milagrosos”.
“Se le llama árbol milagroso porque todas sus partes dan beneficios”, dice Balbir Mathur, presidente de Trees for Life, una ONG que proporciona ayuda para el desarrollo a través de la plantación de árboles frutales, entre ellos la moringa. “Las raíces, las hojas, la corteza, las partes de los frutos y las semillas. Todo. La lista es interminable”, explica al hablar de sus beneficios.
Las moringas, naturales del norte de la India, aunque ahora ampliamente extendidas por Asia, África y Latinoamérica, se han usado en las aldeas en países en vías de desarrollo durante siglos. Sus usos van desde la medicina tradicional, como alimento y aceite de cocina, hasta su uso como pesticida natural, producto de limpieza doméstico y, la novedad más reciente, como biocombustible.
Las moringas son sumamente resistentes. Por lo que en algunas partes de África se les conoce como “nebedies”, que significa “los árboles que nunca mueren”, pues crecen en suelos poco fértiles, rebrotan después de talarlos y es uno de los pocos árboles que dan fruto durante una sequía.
Propiedades nutricionales
Entre los nutrientes de la moringa los expertos destacan sus hojas ricas en vitamina C, vitamina A, vitaminas del grupo B (B1, B2, B3, B5, B6), vitamina E, vitamina K, minerales como el potasio, hierro, calcio, fósforo, selenio, magnesio, triptófano y zinc.
En usos medicinales, la moringa se emplea en casos de: asma, hepatitis, epilepsia, diabetes, enfermedades cardiacas, tos, hipertensión, artritis, ictericia, enfermedades de los riñones, anemia, desnutrición, bronquitis, enfermedades de la piel, tuberculosis, problemas de los ojos, síntomas de la menopausia. Además la moringa tiene acción antiinflamatoria, efecto antibiótico y retrasa el envejecimiento.
Un artículo de la revista científica Muy Interesante detalla sus beneficios.
Lucha contra los radicales libres
Los antioxidantes de la moringa combaten los radicales libres, moléculas que causan estrés oxidativo, daño celular e inflamación. La moringa contiene antioxidantes llamados flavonoides, polifenoles y ácido ascórbico en las hojas, flores y semillas.
Un estudio encontró que los extractos de las hojas tenían mayor actividad antioxidante, capacidad de barrido de radicales libres y mayor inhibición de la oxidación de lípidos, proteínas y ADN que las flores y semillas. Esto significa que evita el daño y degradación que causan los radicales libres en las células de los diferentes órganos del cuerpo, manteniéndolos sanos y funcionando a su mejor nivel.
Antiinflamatorio
La inflamación puede conducir a enfermedades crónicas como diabetes, problemas respiratorios, enfermedades cardiovasculares, artritis y obesidad. La moringa reduce la inflamación mediante la supresión de enzimas inflamatorias y proteínas en el cuerpo, y el concentrado de hoja de moringa puede reducir significativamente la inflamación en las células.
El polvo de hoja de moringa ha sido efectivo para reducir los niveles de lípidos y glucosa y para regular el estrés oxidativo en pacientes diabéticos, lo que significa que disminuye el azúcar en la sangre y el colesterol y mejora la protección contra el daño celular.
Protege el sistema cardiovascular
El polvo de hoja de moringa tiene beneficios para el corazón, particularmente en el control de lípidos en la sangre, la prevención de la formación de placas en las arterias y la reducción de los niveles de colesterol.
Apoya la salud del cerebro
Otro dato que refleja el artículo científico es el beneficio para el cerebro. Esto pasa gracias a sus actividades antioxidantes y neuropotenciadoras. También se ha probado como un tratamiento para la enfermedad de Alzheimer con resultados preliminares favorables.
Los expertos indican que su alto contenido de vitaminas E y C combaten la oxidación que conduce a la degeneración neuronal, mejorando la función cerebral. También es capaz de normalizar los neurotransmisores serotonina, dopamina y noradrenalina en el cerebro, que desempeñan un papel clave en la memoria, el estado de ánimo, la función de órganos, las respuestas a estímulos como el estrés y el placer y la salud mental.
Protege el hígado
La moringa contiene altas concentraciones de polifenoles en sus hojas y flores que protegen al hígado contra la oxidación, toxicidad y daño. La moringa puede reducir el daño hepático y la fibrosis y revertir la oxidación en el hígado. El aceite de moringa también puede restaurar las enzimas hepáticas a niveles normales, reducir el estrés oxidativo y aumentar el contenido de proteínas en el hígado.
El hígado es responsable de la desintoxicación de la sangre, la producción de la bilis, el metabolismo de la fructosa, el metabolismo de las grasas, y el procesamiento de nutrientes, y sólo puede cumplir estas funciones con la ayuda de enzimas hepáticas, por lo que es vital que se mantenga a niveles normales.
Preparación y precauciones
Ante la preocupación de que la población pueda consumir la planta sin medida o de mala manera El País consultó a varios naturistas sobre cómo consumirla, ellos coincidieron en varios aspectos que citamos a continuación:
“Algo que llama la atención de la moringa es que sus hojas conservan gran cantidad de las vitaminas y minerales luego de secarse, lo que ha sido de gran utilidad para su comercialización con fines medicinales. Sus hojas secas se usan para prepararse un delicioso té de moringa”, dijo Felipe Castillo y agregó que las hojas pueden comerse crudas o cocinarse al igual que la espinaca. Sin embargo, una vez secas, las hojas pueden molerse y hacerse té e infusiones: La hoja, seca y molida se presenta como polvo de hojas de moringa, excelente para otorgar sus propiedades a algún té o comidas.
Pero también hay cápsulas en ese caso será mejor seguir las instrucciones del envase.
Sin embargo, los expertos advierten sobre la moderación en su consumo, pues entre sus efectos secundarios se incluyen pérdida de sueño, exceso de glóbulos rojos y acidez.
Se debe evitar el consumo de la raíz de moringa y sus extractos porque pueden contener sustancias tóxicas altamente peligrosas.
Las mujeres embarazadas o lactando no deben utilizar moringa, ya que podría producir contracciones uterinas y aumentar el riesgo de aborto involuntario. Durante la lactancia se debe evitar porque no hay suficiente información para conocer con exactitud si es segura para el bebé.
Introduciendo la moringa a tu dieta
Se recomienda comenzar con media cucharadita cafetera por día los primeros 3 – 5 días, de preferencia con el desayuno y siempre acompañada de alimentos.
El polvo de Moringa es fuerte y puede manifestar efectos secundarios si se toman grandes dosis de esta.
Después de los 3 – 5 días, se puede incrementar su consumo. Una cucharadita al día es suficiente para una persona saludable.
Si te estás recuperando de algún padecimiento o estas sufriendo de alguna condición crónica que afecte tu estado físico, dos cucharaditas al día serían lo ideal, pero, si tu estomago esta delicado y se necesita recuperar de los medicamentos, es mejor disminuir el consumo.
Té de moringa
Si lo que tienes son hojas de moringa (o polvo), puedes agregarlas a agua caliente para crear té. Obviamente vas a tener que colar el polvo a través de una tela o gasa si no cuentas con bolsitas para té, de esta manera las hojas se mantendrán atrapadas y los nutrientes se diluirán en el agua.
Pero cuidado, no hagas hervir las hojas de moringa junto con el agua, ya que éstas pueden perder nutrientes con el exceso de calor, mejor primero hierve el agua y luego agrega las hojas al agua caliente y déjala reposar unos 3 – 5 minutos para que las hojas puedan soltar los nutrientes en el agua caliente.
Hay que notar que el té de Moringa tiene menos nutrientes que tomar el polvo de manera normal.
Aumentan el número de productores de moringa
En Santa Cruz existe la asociación de productores de moringa y de stevia, esta organización desarrolla cada año diferentes eventos para exponer las propiedades del “árbol milagroso”.
Rafael Pando, gerente de M&S Agro Stevia y presidente de la Asociación de Moringueros de Santa Cruz, explica que en Santa Cruz hay varios productores de moringa, que se encuentran en la zona del Norte Integrado, al sur, los valles y otras regiones de dicho departamento.
Tienen registrados alrededor de 100.000 plantines entre los productores que pertenecen a la asociación. Aunque esta cantidad puede ser aún más debido a los emprendimientos privados que no se conocen.
“Tiene más calcio que la leche y más proteína que la carne, más potasio que el guineo, más hierro que la espinaca, tiene 46 antioxidantes, todo esto posibilita que las personas puedan curarse de varias enfermedades o prevenir. Por las propiedades de la moringa es conocida como la planta del milagro o superplanta”, aseguró Pando.
En otro emprendimiento igual en Santa Cruz, la empresa “Revit” ofrece una bolsa de hojas secas de moringa a 20 bolivianos. Son ideales para hacer mate e incluso utilizarlo sobre la pizza como si fuera orégano.
Cosmética Un regalo para la piel
Las hojas secas de la moringa son un gran regalo para la piel por sus efectos nutritivos y su capacidad rejuvenecedora. Muchas casas de cosmética ya incluyen esta planta entre los componentes de sus productos por su fortaleza para mantener a raya la aparición de arrugas y líneas de expresión.
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