“La Orgía” del Chiquis
La compañía teatral Caretas presentó la obra del dramaturgo colombiano Enrique Buenaventura en el Teatro de la Casa de la Cultura.
Al colectivo teatrero, es decir, a quienes hacemos teatro, nos sienta bien tener un espacio adecuado donde sea posible poner en escena nuestra perspectiva de la realidad, a la que solemos darle tanto o más cuidado que el que un político da a su discurso. En un buen teatro, el público también tendrá mejor oportunidad de disfrutar y relacionarse con ese lenguaje que nos permite proponer una fantasía o una denuncia, y que se compone de oficios tan variados como la dirección, la actuación, la iluminación o la escenografía. Tarija cuenta con un par de teatros donde esta relación es posible, aunque todavía cuesta ponerlos a nuestra disposición.
La compañía teatral Caretas gozó la breve posibilidad de mostrar “La Orgía” en la Casa de la Cultura, donde evidentemente hubo un vuelo distinto al que suelen tener las obras de este grupo en su centro cultural. Se apreciaron mejor las indicaciones del director, lucieron su capacidad las actrices y los actores, y la escenografía por fin parecía estar a sus anchas en el tablado de la Casa Dorada.
Pero también fue notoria la falta de ritmo, la incapacidad de sentir al público y sumergirlo en la propuesta, y hacer que el espacio sea un protagonista más de la denuncia que se puso en escena. Pero entendemos que todas estas ausencias se deben a la poca relación que el sector público mantiene con el teatro y tantas otras artes, y (no) se nos pasa.