Ale Cuenca, la artista que da vida a collages con identidad boliviana

Fue en abril de 2019 cuando Alejandra Cuenca impidió que su padre desechara las antiguas revistas de la casa. Con ellas comenzó una afición que hoy está presente en cada momento: el collage, cuyos productos comparte en su cuenta de Instagram @bonita.la.vida, donde ya tiene casi 300 publicaciones.

Empezó por el método analógico, es decir, recortando y pegando trozos de aquellas revistas. Sin embargo, al darse cuenta de las limitaciones de esta forma, decidió experimentar el método digital, dice: “En la computadora tienes más libertad, trabajando con papel estás condicionado por las dimensiones y colores de lo ya impreso, aunque estimula más la creatividad”.

“Hay una parte de mí en cada diseño, si no estoy enamorada de él, no lo publico”, afirma.

Ale es estudiante de Odontología, por lo que el conocimiento técnico en programas de edición de imagen lo adquirió mediante tutoriales en Internet y experimentación. Respecto al contraste entre su carrera y su hobby, dice entre risas: “Son cosas muy distintas, bueno, en Odontología diseñas sonrisas”.

Ella no tiene conocimientos académicos en diseño gráfico, “todo es intuición”, asegura, aunque tiene la intención de profundizar en las teorías de composición y color, y por qué no, dar el salto a las aulas. Sin embargo, mantiene la determinación de terminar su actual carrera.

Dos sentidos inspiran los collages de Ale: el estético y el comunicativo. Algunas piezas surgen simplemente porque son agradables a la vista; otras, porque tiene algo que decir, un mensaje o una protesta. No hay una causa superior a la otra, solo existe una condición para publicar una imagen: “Tengo que estar enamorada del diseño para compartirlo”.

“Lo que haces te tiene que gustar, y me he dado cuenta de que esto me apasiona”

Sin embargo, otras dos intenciones se camuflan entre las ya nombradas. Muchos diseños de Ale reflejan una notable identidad boliviana, que incorpora desde lo icónico del cono sur del país, hasta elementos simbólicos de las culturas andinas. Sumado a ello, si se da la oportunidad y la información, Ale incluye algunos datos sobre las culturas o elementos que referencia en su trabajo.

Hace un tiempo que Ale logró que su trabajo publicado en redes se materialice en cuadros y poleras. “Un día pensé en vender cuadros de mis diseños. Luego se me ocurrió hacerlo con poleras. Trabajo a pedido y con diseños personalizados. Una empresa de Cochabamba me hace las poleras”.

Además, cuenta que en un futuro planea vender también bolsas ecológicas, impregnadas con la esencia y particularidad de sus diseños.