Incendio pone en riesgo a la comunidad de Calama
El personal de primera respuesta trabajó durante toda la jornada, pero cuando lograban mitigar las llamas en una zona el viento las arrastraba hacia otros lugares
A pesar de la movilización de todo el personal de primera respuesta, no se logró sofocar el incendio que comenzó la mañana del miércoles en comunidades aledañas a la carretera al Norte. Las autoridades calculan un daño de más de cien hectáreas y continúan en alerta porque el viento expandió las llamas hasta poner en riesgo viviendas, la toma de agua y caños de gas en Calama.
Para combatir las llamas acudieron los Bomberos de la Policía, la Unidad de Gestión de Riesgos (UGR) tanto de Cercado como de San Lorenzo, Defensa Civil, además de comunarios y grupos de voluntarios que también atendieron otros dos incendios, en Erquis y Guerrahuaico, ambos de menor magnitud y ya sofocados.
El jefe de la UGR Cercado, Álvaro Baldivieso, al anochecer informó que las instituciones se dividieron para atacar las llamas desde diferentes frentes. Esta unidad se trasladó a la comunidad de Calama, debido a que desde las 16:00 el fuego se expandió hacia esa zona.
“El incendio continúa bajando por el pie de cerro. Tenemos que precautelar las viviendas, ya que tenemos la toma de agua y cañerías de gas”, explicó.
El reporte de la Policía señaló que además de Calama, los vientos arrastraron las llamas hacia la comunidad de Colorados que se encuentra al noreste de la carretera. Esto dificulta las tareas de sofocación debido a que el área es inaccesible y eso los obligó a replegarse.
El subcomandante de la Policía, coronel Ivar Ortiz, señaló que el incendio comenzó al promediar las 9:30 horas en la comunidad de Cochas, cerca de Falda la Queñua. Sin embargo, las condiciones climáticas impidieron la extinción porque cuando apagaban las llamas en un punto, se reavivaban en otro.
“Es preocupante. El viento nos juega una mala pasada porque hacemos el esfuerzo de sofocar el incendio, pero el viento cambia de dirección y propaga las llamas”, declaró al mencionar que aún se desconocen las causas.
Cerca del mediodía y durante las primeras horas de la tarde, la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) dispuso el cierre de la vía porque el fuego llegó a pasar de un lado del asfalto al otro, además de la baja visibilidad que provocó la humareda.
Hasta el cierre de nuestra edición se confirmó el repliegue del personal, para emprender el retorno en la madrugada de este jueves.