Condenados por dejar cuadripléjica a boliviana
El Tribunal Oral en lo Criminal 17 condenó a 14 años y medio de prisión a Claudio Cañelas García de origen boliviano y a 14 años a Facundo Ávila Pérez, uruguayo, acusados de haber arrojado de un puente durante un robo en el barrio porteño de Liniers a Nieves María Lizarazu Cabrera,...



El Tribunal Oral en lo Criminal 17 condenó a 14 años y medio de prisión a Claudio Cañelas García de origen boliviano y a 14 años a Facundo Ávila Pérez, uruguayo, acusados de haber arrojado de un puente durante un robo en el barrio porteño de Liniers a Nieves María Lizarazu Cabrera, joven boliviana de 23 años quien quedó cuadripléjica.
De acuerdo a la acusación del fiscal Oscar Ciruzzi, los dos imputados persiguieron a la víctima, que corrió y pidió ayuda a los gritos y, durante un forcejeo, la arrojaron del puente desde una altura de siete metros.
Los acusados aprovecharon que la joven quedó tirada en el piso para sacarle su teléfono celular y huyeron a la carrera por la colectora de General Paz, pero fueron perseguidos por un testigo y finalmente detenidos al llegar a la calle Ramón Falcón.
“Llamá al SAME”, declaró este testigo presencial que gritó uno de los acusados mientras se iba y contó que esta situación le produjo tanta ‘indignación’ que por ello los persiguió. Al momento de ser detenido, uno de los imputados arrojó al suelo un celular con la pantalla rota donde se observaba una foto de la chica como fondo.
La pena más grave
El fiscal general Ciruzzi pidió una condena de 15 años para los acusados, como responsables de “robo simple y homicidio criminis causae”, ambos en grado de tentativa, en perjuicio de Nieves María Lizarazu Cabrera.
Por su parte, los defensores solicitaron al tribunal la absolución de ambos acusados y, subsidiariamente, que se les condene por un delito más leve. Sin embargo, el Tribunal no hizo caso al pedido.
De acuerdo a la acusación del fiscal Oscar Ciruzzi, los dos imputados persiguieron a la víctima, que corrió y pidió ayuda a los gritos y, durante un forcejeo, la arrojaron del puente desde una altura de siete metros.
Los acusados aprovecharon que la joven quedó tirada en el piso para sacarle su teléfono celular y huyeron a la carrera por la colectora de General Paz, pero fueron perseguidos por un testigo y finalmente detenidos al llegar a la calle Ramón Falcón.
“Llamá al SAME”, declaró este testigo presencial que gritó uno de los acusados mientras se iba y contó que esta situación le produjo tanta ‘indignación’ que por ello los persiguió. Al momento de ser detenido, uno de los imputados arrojó al suelo un celular con la pantalla rota donde se observaba una foto de la chica como fondo.
La pena más grave
El fiscal general Ciruzzi pidió una condena de 15 años para los acusados, como responsables de “robo simple y homicidio criminis causae”, ambos en grado de tentativa, en perjuicio de Nieves María Lizarazu Cabrera.
Por su parte, los defensores solicitaron al tribunal la absolución de ambos acusados y, subsidiariamente, que se les condene por un delito más leve. Sin embargo, el Tribunal no hizo caso al pedido.