Disfruta el "ahora"

Vivir en el “ahora” es una de las virtudes más grandes que puedas desarrollar en ti.

Mantenerte presente te hace reflexionar.

Te abre las puertas a la plenitud espiritual.

Te mantiene consciente de ti mismo.

Entrénate en mantenerte en el “ahora” hasta que se convierta en un hábito en ti.

Repite constantemente dentro de ti:

“Que mi mente esté donde está mi cuerpo, en el ahora”

Si me estoy bañando, que mi mente esté conmigo. Disfruto del agua deslizándose sobre mi cuerpo. Disfruto de los aromas del jabón. Me hago consciente de la temperatura y del bienestar que me produce el agua sobre mi cuerpo.

Si estoy desayunando, que mi mente esté conmigo. Disfruto de cada sabor, de cada textura, de cada olor. Me hago consciente de la comida dentro de mi cuerpo.

Si estoy trabajando, que mi mente esté conmigo. Me concentro en mi trabajo y en todo lo que tengo pendiente por hacer. Me hago consciente de lo que tengo que resolver y estoy con mis cinco sentidos puestos en eso.

Si estoy descansando, que mi mente esté conmigo. Me dispongo a descansar y me hago consciente de mi cuerpo sobre la cama. Disfruto de la relajación de mis músculos, de la delicia de mi almohada.

Nuestra mente está brincando de pensamiento en pensamiento sin descansar.

Si yo me estoy bañando, mi mente está en el trabajo. Si estoy trabajando, mi mente está en alguna situación familiar. Siempre está pensando en otra cosa.

Una de las cosas que más te distrae es el celular con sus redes sociales.

Si estás comiendo en familia, estás distraído con tu celular.

Si estás con tu pareja, estás distraído con tu celular.

Si estás en el trabajo, estás distraído con tu celular.

Agenda un momento de tu día para que se lo dediques al celular y a las redes sociales.  Concéntrate en eso, pero hazlo sólo en ese espacio que asignaste. Si tu momento es otro, concéntrate en lo otro.

Tomar consciencia de cada cosa que haces te mantiene presente en el “aquí y en el ahora”.