No dejar cabos sueltos

Primero, eso de que el presidente boliviano “confíe” en Repsol y lo diga públicamente sin que nadie le esté preguntando, no es sólo una “chispoteada”, pues encaja perfectamente con el desaire público y ostensible que hizo el presidente colombiano a su invitada la presidenta argentina, esquivando mencionar el tema Malvinas en la última cumbre.  En eso hay mucho más que simple descortesía por un lado y comedidas declaraciones de confianza por el otro.Ese no el único cabo suelto. El mismo presidente colombiano, Juan Manuel Santos, fue quien se reunió cinco meses antes, en Lima, con sus colegas Sebastián Piñera, Alan García y Felipe Calderón, para crear lo que llamaron “Alianza del Pacífico”, que es, ostensiblemente, un contrapeso destinado a frenar la integración latinoamericana asentada en los anhelos bolivarianos de la Patria Grande. Que Santos diga y repita también que Hugo Chávez es su “nuevo mejor amigo”, suena inevitablemente a un sofisma de distracción.En esa misma tónica, está la visita del presidente de España, Mariano Rajoy a Colombia, donde está desde el miércoles. Juan Manuel Santos ofreció” colaborar en la recuperación económica de España, sumergida en una recesión y con más de cinco millones de desempleados”.Rajoy no hizo referencia al anuncio formulado por Argentina el lunes de promover la expropiación del 51% de las acciones de YPF en poder de la petrolera Repsol, pero Santos, perdiendo el decoro que debería tener por ser nieto de presidente, dijo medio en broma, medio en serio, que “en Colombia no expropiamos”, haciendo alusión directa a la estatización en Argentina de la transnacional Repsol, a la cual insisten en presentar como española, buscándole cinco pies a un gato que todos sabemos que tiene sólo cuatro.Casi al mismo tiempo Carlos Villegas en declaraciones públicas dijo que las medidas tomadas en Argentina “son un claro ejemplo de que su país no está sólido y su política económica no está reflejando la unidad latinoamericana”.Pero no se escandalicen, porque el Villegas que soltó semejante exabrupto no es Carlos Villegas, el casi eterno presidente interino de YPFB, sino su homónimo Luis Carlos Villegas, presidente de la colombiana Asociación Nacional de Industriales, Andi.Claro que ambos Villegas estuvieron “casualmente” en Cartagena, hace poco, hablando de posibles inversiones colombianas en Bolivia para buscar y explotar petróleo.Como ven, son muchos cabos sueltos, que gracias a la comunicación “on line” se pueden atar en tiempo real, no importa en qué lugar del mundo uno esté. No son indispensables los Wikileaks, pero esos también aparecerán, más temprano que tarde.En conclusión, existe una estrategia “monroista” claramente enfrentada a la deseable y cada vez más posible Patria Grande bolivariana.Sobre esto seguiremos trabajando, para no dejar cabos sueltos.