Las sogas y los ahorcados

sino el agua para riego, cuya carencia ya es problema en varios países, no solamente en el nuestro, donde las sequías recurrentes se han vuelto rutina. Leímos hace poco que los déficit de agua, ya han comenzado a provocar el aumento de las importaciones de cereales por parte de numerosos...

sino el agua para riego, cuya carencia ya es problema en varios países, no solamente en el nuestro, donde las sequías recurrentes se han vuelto rutina. Leímos hace poco que los déficit de agua, ya han comenzado a provocar el aumento de las importaciones de cereales por parte de numerosos países pequeños, y podrían tener el mismo efecto en países grandes, como China o India. Los niveles freáticos han caído de modo significativo en diferentes lugares, como en el norte de China, EEUU o India, como consecuencia de la sobre explotación generalizada de los acuíferos utilizando bombas mecánicas. Este tipo de prácticas podría llevar, en estos y en otros países, a problemas de escasez del agua y a disminuciones de la producción agrícola. La mayor parte de las 3.000 millones de personas que se espera nazcan hasta 2050 nacerán en países que actualmente ya están experimentando déficits de agua. Tras China y India, existe todo un segundo grupo de países más pequeños con importantes déficits de agua, como Afganistán, Argelia, Egipto, Irán, México y Pakistán. Pero no vayamos a usar este dato como consuelo de tontos cuando tengamos que enfrentar, una vez más, los efectos de las sequías en el Chaco. Pero volviendo al tema del agua potable, en estos días supimos que el director de Servicio Básicos y Vivienda de la Gobernación, Eduardo Miranda, informó que tras reunirse con las instituciones dedicadas al tema del cuidado y suministro del agua en Tarija, se decidió realizar en los próximos días un taller sobre nuevas y modernas políticas de captación y administración de agua, y coincidieron todos en solicitar la cooperación alemana para poder superar el déficit que se tiene en Tarija.Miranda dijo que una posible fecha  para la realización de este evento sería el próximo 29 de marzo, aunque expresó no existe nada confirmado aún, resaltando que una de las finalidades de esta iniciativa es terminar con los racionamientos que se dan durante el año, ya sea en época seca o húmeda.Nos preguntamos: ¿Es que ni para planificar e idear ingeniería para captar agua potable tenemos capacidad profesional disponible en Tarija y necesitamos, otra vez, de las indignas “donaciones” o “cooperaciones” externas? Si no es falta de dinero (que en Tarija no es el caso), entonces aparece la supuesta falta de capacidad, cuando, por el contrario, existen en Bolivia y también en Tarija suficiente y sobrada capacidad profesional y técnica al respecto.A propósito de donaciones, esa destinada a la construcción de una nueva Planta de Tratamiento de aguas servidas para Tarija, valorada en cerca a 12 millones de dólares, al parecer finalmente se descartó. Anteriormente habíamos denotado la que en un departamento tan rico como Tarija, en vez de estar estirando la mano por dinero para tratar nuestros “resíduos” (nada más vergonzoso), era imprescindible formar profesionales capaces de tratar esos olorosos asuntos sin necesidad de ayuda externa. Y el problema de fondo no es el dinero, sino la falta de consensos para ubicarla. El debate no debiera ser, entonces, si se perdió o no la malhadada limosna, sino la tecnología a usarse (hay novedosas técnicas desarrolladas por profesionales bolivianos a muy bajo costo y más eficientes que muchas otras importadas) y los mecanismos que nuestra sociedad debe aprender a poner en práctica para lograr consensos para ese y otro tipo de obras.Aunque signifique hablar de sogas en casa del ahorcado.

Más del autor