¿Crisis eléctrica?

En Bolivia hay un claro déficit de oferta eléctrica, además de déficit de oferta de gas, de diesel, de gasolina y todo ello porque desde hace más de cinco años no hay los instrumentos políticos y legislativos que hayan remozado el sistema energético boliviano: ausencia de inversiones y falta de legislación dan como resultado apagones, colas para diesel, falta de gas para industrias y todo este escenario de crisis energética.Como en Bolivia aún no se incorporó de manera decidida y frontal al gas natural a la matriz energética, por ejemplo pensando en termoeléctricas de generación eléctrica para exportar y con remanentes de electricidad para el mercado interno, sucede que hoy se da vuelta la figura y Brasil –a quien le enviamos gas natural- nos ofrece electricidad –como valor agregado al gas-, cosa rara que pasa en Bolivia por ausencia de una Nueva Política Energética, NPE.Traer electricidad e Brasil o de cualquier país es complejo. Es casi como pensar en traer petróleo o gas. Se necesita la infraestructura energética costosa. En el caso eléctrico no hay una “línea” de transmisión directa y la construcción de la misma sería millonaria y de alto costo de tiempo. Además hay que pensar en que el futuro Bolivia debe exportar electricidad como parte de una política de agregación de valor al gas.Hace pocos días los líderes de las compañías eléctricas indicaron que su sector requiere más de 3000 millones de dólares para reformar y modernizar su sector en transmisión, distribución y generación, y obviamente sus proyectos están sustentados en volúmenes de gas que se les suministre y han asegurado que pondrán a uso del sistema casi 340 MW.Por ello es urgente un cambio de matriz energética en el país: incorporar definitivamente al gas como generador de electricidad, dejar de utilizar el diesel que se utiliza para generación.La pregunta es la de siempre: ¿cuándo habrá una nueva Ley de Hidrocarburos? ¿Cuándo habrá una nueva ley de electricidad? Entre ambos instrumentos se propiciará inversiones en el sector que permitan evitar racionamientos, crisis y reposicionar a Bolivia tanto en su suministro interno cuanto en exportación de energía excedentaria.* Máster en Administración, consultor del sector energía y tecnología