Un interés en crecimiento constante

Eso no es extraño, porque los periódicos al final de cuentas lo único que hacemos es reflejar los temas que les interesan a nuestros lectores habituales.Tomemos, por ejemplo, la edición del viernes pasado. Descontando las páginas específicamente dedicadas a noticias deportivas, así como las de avisos clasificados y las de eventos sociales, encontraremos que en las de información general predominan los temas petroleros.Hay varias notas sobre Margarita, que a esta altura no es para ningún Tarijeño el nombre propio de una pariente ni el de la flor tradicionalmente deshojada para saber si “me quiere…no me quiere…” Ahora, para los tarijeños la asociación inmediata de Margarita es con un espectacular campo petrolífero, y cuya localización, por cierto, está provocando algunas controversias departamentales.Lo que no entendemos (y perdónennos la digresión) es qué tiene que ver en esa controversia una petrolera transnacional. Nos imaginamos qué sucedería si, hipotéticamente, disputaran dos conejos y para dirimir la disputa convocaran a un lobo. Es obvio que el lobo acabaría almorzándose a los dos conejos. Es apenas natural. Pero volvamos a lo nuestro.La profusa información sobre hidrocarburos ese día tampoco puede atribuirse totalmente a que se estuviera realizando en Tarija un foro internacional sobre el tema. Es un evento muy bien promocionado, lo reconocemos, pero es sólo un evento al cual, entre paréntesis, no sabemos si perjudicó o favoreció que no asistiera el presidente interino de la entidad petrolera fiscal nacional. Ese es otro tema.Se anunciaba también, ese día, un convenio entre Bolivia y Argentina para favorecer a los consumidores de Gas Natural Vehicular. Buen asunto ese. Y sigamos espigando en esas mismas páginas, como suele decir un conocido columnista: Había información sobre el parque natural Aguaragüe, donde finalmente están haciendo inspecciones formales para establecer si hay daños al medio ambiente, cuáles son estos y cómo se pueden remediar. Y por supuesto quedan todavía informaciones y comentarios residuales sobre el parque Isiboro Sécure, cuya importancia nadie niega, pero  es indudable que se acrecienta por la posibilidad de que allí existan yacimientos de petróleo.Además del interés incuestionable por la riqueza forestal y por la conservación de la fauna, es decir además de las motivaciones ecológicas netas nadie podría asegurar que no es en gran medida el petróleo el que está detrás de muchas expresiones de interés por el ahora célebre TIPNIS.En conclusión, aunque Tarija se ha demorado en cambiar su fama bucólica de “valle andaluz, bañado de luz y ebrio de colores”, es incuestionable que el interés por sus recursos naturales y especialmente por su gas de petróleo, crece todos los días. En hora buena.