Energía, colapso y sexto poder

Y si estamos hablando de Tarija, algunas palabras adicionales como gas, petróleo o hidrocarburos inducirán, casi automáticamente, a querer saber más. Eso sucedió cuando supimos que la Agencia Nacional de Hidrocarburos ANH tenía que reunirse con la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG), para que la organización indígena autorice la licencia ambiental que permitirá ampliar un gasoducto y, de esa manera, evitar un colapso en el abastecimiento de gas vehicular, que se ha vuelto ya una energía indispensable, al menos para Tarija.Aun no sabemos cómo terminó la tal reunión pero, mientras tanto, nos pusimos a cavilar en otros términos que no son tan usuales como los ya mencionados, como “gobernabilidad”, “gobernanza”, que tienen que ver con conceptos tan nuevos como “quinto poder” y “sexto poder”, que para muchos son aún desconocidos.Pero completemos lo de la reunión señalando que allí debían estar, además de los mencionados YPFB y ANH, los representantes del “autotransporte”, el Comité Cívico, las Juntas Vecinales, la Cámara de Comercio y otros actores de la sociedad civil que inclusive suscribieron un “voto resolutivo” sobre el tema. Y esto es lo que nos indujo hacia la gobernabilidad, que según la Real Academia de la Lengua Española  es la “Cualidad de gobernable”.De un modo más amplio, la noción de gobernabilidad se refiere al conjunto de las instituciones de un estado, incluyendo a la sociedad civil y el sector privado. Tomando en consideración además el tipo y grado de relaciones que hay entre ellos.Las relaciones entre los distintos elementos que componen un estado, serán en definitiva los que definan el grado de gobernabilidad que este presentará, por lo tanto se puede deducir que la gobernabilidad es un concepto político que busca plantear los modos de regulación del orden social, y de modo esencial asegurar el bienestar de los ciudadanos de manera más eficaz, y a su vez, cómo los ciudadanos pueden contribuir a construir y mantener que las instituciones sean transparentes, eficientes y equitativas.¿Y si los guaraníes resuelven que no autorizan ninguna ampliación de gasoducto? Adiós gobernabilidad. Algo de eso ya hemos experimentado con el fenómeno TIPNIS, que todavía no es caso cerrado.Así llegamos al Quinto Poder. Hay quienes sostienen que El Quinto poder, continuando la serie de los tres poderes clásicos de Montesquieu (ejecutivo, legislativo y judicial), ocuparía el quinto lugar tras el cuarto poder que se atribuye a los medios de comunicación.Y el Sexto Poder sería el poder territorial que se ejerce regional o localmente gracias a la descentralización política.Nosotros, que estamos estrenando ese sexto poder con un respaldo legal constitucional precario y una legitimidad todavía más precaria, tenemos razón para alarmarnos cuando una noticia comienza con palabras como energía, colapso y termina con gobernabilidad y sexto poder.¿Cierto?