La “guerra contra las drogas”

Establecido eso, veamos si prohibir esas drogas, criminalizar su producción y tráfico e inclusive encarcelar a quienes las consumen ha servido para algo, es decir, veamos si ha logrado reducir su consumo.Dicho en forma directa: ¿Sirvió de algo la “guerra contra las drogas?Respuesta directa: NoPorque el consumo de drogas sicotrópicas no disminuyó, sino, al contrario, aumentó.Claro que si alguien considera que “servir” es estimular la formación y el sostenimiento de peligrosísimas bandas de crimen organizado, entonces la “guerra contra la drogas”, tan tenazmente defendida por los Estados Unidos, ha servido para eso.Hoy existe en Colombia, en México, en el Brasil y por supuesto en los Estados Unidos, crimen muy bien organizado alrededor del tráfico de drogas. Los actos criminales que más se “publicitan” son los que afectan a otros países y no a los Estados Unidos, por supuesto. Pero esa doble moral no está restringida as las drogas, pues se aplica también  la tortura, a la represión laboral y a muchos otros aspectos que son tratados por los Estados Unidos exactamente como “paja en ojo ajeno”. Y que no nos digan que no saben de qué hablamos, porque si algo leen profusamente los gringos,  es la Biblia. La leen, porque aplicarlo que allí dice es otro cantar.Y sigamos. Se armó, en algún momento, una “Comisión Mundial sobre Política de Drogas”, que pidió en Nueva York acabar con la “criminalización, marginalización y estigmatización” de los consumidores de sustancias hoy ilícitas.El informe de la Comisión, liderada por los ex presidentes Ernesto Zedillo (México), César Gaviria (Colombia) y Jorge Enrique Cardoso (Brasil), hace un llamado a que el mundo sea “más constructivo” a la hora de enfrentar esta problemática. “La lucha contra las drogas es un fracaso. Busquemos maneras más inteligentes de luchar contra ellas”, pidió Cardoso.Les consta, porque Zedillo, Gaviria y Cardozo lidiaron con ese problema cuando estuvieron gobernando y lo que ahora están haciendo es confesar que “no pudieron”.Como era previsible, casi de inmediato el gobierno de Barack Obama aseguró que “la legalización no es el camino”, pues dijo que algunos estudios demuestran que el uso ilegal de drogas conduce a accidentes de tránsito, enfermedades mentales y más admisiones en salas de emergencia.¿Y el alcohol? Conduce a lo mismo, y más pero ya una vez, los gringos precisamente, lo ilegalizaron y el desastre fue peor. ¿O no se acuerdan?De cualquier manera, el tema está planteado y ojalá que esta vez no lo evadan, como es habitual. Ya es hora de enfrentarlo seriamente.