El medio ambiente y el BID

Tal parece que es sólo un banco más, con todos los defectos que tienen los bancos. Y que son muchos.Pues sí. Todo parece indicar que las obras que están financiando en el rio Pilcomayo no tuvieron el imprescindible estudio de impacto ambiental.  Ese que tanto atormenta a las corporaciones...

Tal parece que es sólo un banco más, con todos los defectos que tienen los bancos. Y que son muchos.Pues sí. Todo parece indicar que las obras que están financiando en el rio Pilcomayo no tuvieron el imprescindible estudio de impacto ambiental.  Ese que tanto atormenta a las corporaciones petroleras y sobre cuya importancia poco a poco ya se está comenzando a tener conciencia. Buenos, casi todos, porque es evidente que el BID no.Ellos, como institución dedicada al desarrollo (¿desarrollo de quien?) deberían tener muy presente lo que medio ambiente. Se entiende por medio ambiente todo lo que afecta a un ser vivo y condiciona especialmente las circunstancias de vida de las personas o la sociedad en su vida. Comprende el conjunto de valores naturales, sociales y culturales existentes en un lugar y un momento determinado, que influyen en la vida del ser humano y en las generaciones venideras. Es decir, no se trata sólo del espacio en el que se desarrolla la vida sino que también abarca seres vivos, objetos, agua, suelo, aire y las relaciones entre ellos, así como elementos tan intangibles como la cultura.Valores naturales, sociales y culturales. No sobra repetirlo.Y aprovechemos que estamos ocupándonos del desarrollo para insistir en que lo que actualmente se entiende por desarrollo es aquello sostenible, es decir aquello que puede satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de las del futuro para atender sus propias necesidades Esto los del BID deberían saberlo, porque sus funcionarios nunca faltan a los eventos internacionales y los desarrollo sostenible fue formalizado por primera vez en el documento conocido como Informe Brundtland , fruto de los trabajos de la Comisión Mundial de Medio Ambiente y Desarrollo de Naciones Unidas, creada en Asamblea de las Naciones Unidas en 1983. La definición sobre desarrollo sostenible se asumiría luego en el Principio Tercero de la Declaración de Río, en 1.992Lo que el BID está haciendo en el rio Pilcomayo, lejos de poder llamarse “desarrollo”, es un flagrante daño a valores naturales, sociales y culturales de la población Weenhayek.Y como en las leyes de Murphy “no hay situación por mala que sea que no pueda empeorar”, dentro de diez días, el 5 de junio se celebra, en todo el mundo, el Día Mundial del Medio Ambiente. Éste fue establecido por la Asamblea General de Naciones Unidas en 1972. El Día Mundial del Medio Ambiente es uno de los principales vehículos por medio de los cuales la Organización de las Naciones Unidas estimula la sensibilización mundial en torno al medio ambiente e intensifica la atención y la acción política.Es evidente que ese día los Weenhayek no tendrán nada para “celebrar”, pero eso no debería quedarse así. El BID debería explicar cómo y por qué sus burócratas dejaron a todo un pueblo, a una etnia, en esa situación.¿Podrán explicar?

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