Envían a Chonchocoro a Zúñiga y dos exjefes militares por el golpe fallido
Los detenidos fueron imputados por los delitos de terrorismo y alzamiento armado contra la seguridad y soberanía del Estado en grado de autoría. Este sábado será la audiencia de otros 14 implicados
Tras más de tres horas de audiencia, un juez determinó el viernes 28 de junio la detención preventiva en el penal de Chonchocoro para tres exjefes militares que comandaron el despliegue de las Fuerzas Armadas en la plaza Murillo con la intención de gestar un presunto golpe de Estado.
Se trata del excomandante del Ejército, Juan José Zúñiga Macias; el excomandante de la Armada, Juan Arnez Salvador y el excomandante de la Brigada Mecanizada del Ejército, Edison Alejandro Irahola Caero.
De acuerdo con la determinación judicial, los tres exjefes militares deberán estar recluidos por el lapso de seis meses en la cárcel, ubicada en el municipio de Viacha, del departamento de La Paz.
En la audiencia de medidas cautelares, la autoridad jurisdiccional estableció que existe el riesgo de fuga y obstaculización dentro de la investigación. Fueron imputados por los delitos de terrorismo y alzamientos armados contra la seguridad y soberanía del Estado en grado de autoría.
Luis Arce: “Estos operaron, pero alguien está detrás, es el que financia, el que promete cosas, el que está manejando los hilos”
Dentro del mismo caso, existen otros oficiales militares de diferentes rangos, además de civiles, implicados y en calidad de aprehendidos a la espera de ser convocados a una audiencia que defina su situación jurídica.
Los hechos por los cuales se investiga a Zúñiga y los otros dos excomandantes de la Armada y Fuerza Aérea es por el despliegue de un contingente militar armado, la tarde del 26 de junio, en plaza Murillo.
En ese lugar, todos los accesos fueron cerrados y con la ayuda de una tanqueta blindada se irrumpió el ingreso principal de Palacio Quemado. Posteriormente, el general Zúñiga y los otros oficiales ingresaron y se negaron a retirar a los uniformados desplegados pese a la orden que dio el presidente Luis Arce.
Momentos ante de su aprehensión, Zúñiga afirmó que el operativo fue planeado por el mandatario, sin embargo, Arce lo negó y aseguró que el jefe militar actuó por su cuenta para gestar un golpe de Estado contra su Gobierno.
Arce: Hay que dar con los autores intelectuales
En una entrevista con el expresidente ecuatoriano, Rafael Correa, el presidente Luis Arce dijo que la investigación del fallido golpe de Estado debe dar con los autores intelectuales y con quien financia y “está manejando los hilos” de estos hechos. Considera que los ejecutores sólo fueron la parte operativa.
“Estos operaron, pero alguien está detrás, es el que financia, el que promete cosas, el que está manejando los hilos, y son los que nunca aparecen después de esto. Los dejan a ellos librados a su suerte, (pero) son ellos los que han empezado a azuzar y a hablarles al oído”, dijo Arce, a tiempo de confirmar que una comisión de fiscales empezó la investigación para establecer responsabilidades e identificar a los involucrados.
Incluso advirtió la participación de civiles. “Hay civiles involucrados y, por lo tanto, esa es la investigación completa que tenemos que hacer en nuestro país, para entender exactamente dónde están los móviles y dónde se generaron esas ideas, (…) no solamente a los ejecutores, sino también a los autores intelectuales de todo esto”, insistió el Presidente.
Arce reveló que entre los militares del servicio pasivo están los que estuvieron vinculados a los hechos de violencia de 2019, cuando renunció expresidente Evo Morales.
Registran oficinas del Comando del Ejército
Personal de la Fiscalía y de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) registraron las oficinas del Comando General del Ejército y las tanquetas que fueron desplegadas a la plaza Murillo el 26 de junio con la intención de gestar un presunto golpe de Estado contra el presidente Luis Arce.
Informes a los que accedió Erbol señalan que al interior de los vehículos militares se encontró una “gran cantidad” de municiones e incluso grabaciones de audio de las conversaciones que entablaron los oficiales.