En Bolivia todavía no se reportaron especies de escorpiones de importancia médica



En Bolivia existen 24 especies de alacranes o escorpiones que son invertebrados artrópodos (tienen sus patas articuladas) y se encuentran distribuidos casi en todas las regiones, sin embargo todavía no existen reportes de una determinada especie venenosa que tenga una importancia médica.
“En Brasil existen 160 especies de escorpiones y solo cuatro de ellas pueden ocasionar casos clínicos con las personas, en Argentina tienen 60 especies y dos de ellas pueden considerarse de importancia médica, mientras que en Bolivia no tenemos todavía ninguna especie reportada”, explicó el biólogo Jaime Rodríguez del Laboratorio Boliviano de Biota y Desarrollo (BIOSBO).
Dijo que en el país se destaca el género Tytus de alacranes con nueve especies que, posiblemente, pueden tener un veneno que cause efectos letales solo a las personas alérgicas, con enfermedades de base o inmunodeprimidas (cuando se reduce la capacidad para combatir infecciones y otras enfermedades).
El entomólogo no descartó que en el territorio boliviano existan especies endémicas (que sólo habitan en un lugar determinado) y que “la cantidad de especies que son 24, pueda acrecentarse a unas 30, por lo menos”. Reconoció que se necesita una mayor investigación de las especies y su distribución en Bolivia.
Los artrópodos ocupan un lugar fundamental en la Tierra, ya que intervienen en múltiples ciclos de la vida y en la regulación ecológica de los seres vivos. Se cree que los escorpiones aparecieron hace 400 millones de años y pudieron evolucionar en diferentes hábitats, a pesar de ser propios de ambientes desérticos, algunos se pueden encontrar en regiones arenosas y tropicales, otros escavan cuevas bajo tierra y pocos viven en los árboles.
La pasada semana se reportó el fallecimiento de un niño con un antecedente de cardiopatía en Santa Cruz que fue inoculado por un escorpión, además otras tres personas tuvieron un accidente con alacranes, pero sin complicaciones médicas.
En la conferencia de prensa “Escorpiones en Bolivia, ¿aliados o enemigos?” realizada hoy en la ciudad de La Paz, a través de un enlace en línea con el Museo de Historia Natural Noel Kempff Mercado, la entomóloga Alejandra Valdivia detalló que en toda Santa Cruz en regiones de los valles secos, valles interandinos, y en las zonas de transición entre valles, Amazonía y Chiquitanía existe una amplia distribución de alacranes.
“La presencia (de los escorpiones) se va ir incrementando, por las precipitaciones intensas que estamos registrando y que se prologarán hasta mediados de año, esta variable es determinante para la aparición de estos artrópodos”, aseveró.
Controladores biológicos
Valdivia remarcó que los alacranes se constituyen en controladores biológicos porque se alimentan de “chulupis” o cucarachas, y que no solo van a estar presentes en zonas rurales o urbanas, “ellos van a estar donde haya alimento, y en el campo se alimentan de una innumerable cantidad de insectos”.
La entomóloga Natalie Herrera de la Colección Boliviana de Fauna que pertenece al Museo Nacional de Historia Natural, puntualizó que los escorpiones no poseen un veneno para atacar a ningún mamífero y que tampoco son artrópodos hostiles y que solo se defienden cuando se sienten amenazados o atacados.
“Cuando los escorpiones perciben peligro o se ven amenazados utilizan el aguijón ubicado en su cola que segrega neurotoxinas (sustancias químicas exógenas neurológicamente dañinas) y con sus pinzas sujetan y trozan su alimento”, añadió.
Recomendaciones
El médico entomólogo Eddy Martínez del Instituto de Investigación en Salud y Desarrollo de la Facultad de Medicina de la Universidad Mayor de san Andrés (UMSA), recomendó que cuando una persona sea picada por un escorpión no debe tocarse la herida y solo se puede utilizar hielo sobre ella.
“Es posible utilizar calmantes como Paracetamol y buscar una atención médica. Lo importante no es alarmarse, ya que los efectos de la neurotoxina dependerá del tamaño de la persona y la edad, los niños o personas con enfermedades de base pueden ser más susceptibles para necesitar una atención médica”, agregó.
Es necesario mantener los hogares limpios y ordenados, y también es importante no andar descalzo, revisar y sacudir prendas de vestir y calzados, sacudir la ropa de cama antes de acostarte o acostar a un bebe o niño, utilizar rejillas en desagües, cañerías y otras aberturas, colocar alambre tejido (mosquiteros) en puertas y ventanas, revocar las paredes, reparar grietas en pisos, paredes y techos, y evitar la acumulación de materiales de construcción, escombros y leña porque suelen ser lugares donde se alojan.
Posición institucional
La vicepresidenta de la Sociedad Boliviana de Entomología (SBE), Wendy Tejeda propuso el apoyo a instituciones nacionales, públicas y privadas a cargo de la elaboración de antiveninas (antisueros utilizados para contrarrestar la intoxicación por venenos de animales) en las ciudades capitales de departamento, a través de la provisión de especímenes vivos de especies ponzoñosas, “en el marco de la normativa ambiental y su renovación del material genético cada cierto tiempo”.
Y definir con las instancias correspondientes, la elaboración de un plan de acción y un protocolo para la atención de emergencias suscitadas por la picadura de un espécimen ponzoñoso en cualquier lugar del país.