Emisa priorizará la distribución de cemento en Oruro
La planta de cemento Emisa ha iniciado la transformación de sus operaciones en Oruro con la priorización de la distribución que dejó de producir en los molinos existentes que datan de 1946, una tecnología muy antigua para atender los requerimientos de un mercado cada vez más competitivo y...



La planta de cemento Emisa ha iniciado la transformación de sus operaciones en Oruro con la priorización de la distribución que dejó de producir en los molinos existentes que datan de 1946, una tecnología muy antigua para atender los requerimientos de un mercado cada vez más competitivo y exigente como el orureño.
Esta transformación reclama cambios en la estructura de la empresa. Se fortalecerá su capacidad de distribución para atender al mercado orureño con cemento de alta calidad. “Nuestro compromiso con Oruro se mantiene y continuaremos innovando en especial, en el ámbito de la logística”, explicó el ejecutivo de Emisa, Juan Pablo Bonifaz.
Al grupo de colaboradores se le ha planteado tres programas: uno -que se busca sea al que se acoja la mayoría- de reubicación en otras plantas del grupo empresarial, con lo cual se conseguirá que una mayoría siga contribuyendo dentro del grupo.
El otro programa es de jubilación voluntaria con beneficios adicionales a los de Ley y, finalmente, el plan de salida acordada, también con varias prestaciones, para quienes no vean oportunidades en los otros dos programas. Según el ejecutivo, Emisa debe encarar esta transformación ya que sus molinos datan de fines de la segunda guerra mundial y, aunque la calidad nunca ha decaído, la eficiencia en los procesos no es la mejor para enfrentar los retos de la competencia. Indicó también, que siendo la marca un ícono de Oruro debe mantenerse en el mercado y competir en mejores condiciones.
“Este equipamiento no puede responder a los desafíos que exige el actual mercado de la construcción. Ninguna empresa, (social, pública o privada) que quiera sostenerse en el mercado en las actuales condiciones podría hacerlo con la obsolescencia de los equipos”, aseveró Juan Pablo Bonifaz.
Esta transformación reclama cambios en la estructura de la empresa. Se fortalecerá su capacidad de distribución para atender al mercado orureño con cemento de alta calidad. “Nuestro compromiso con Oruro se mantiene y continuaremos innovando en especial, en el ámbito de la logística”, explicó el ejecutivo de Emisa, Juan Pablo Bonifaz.
Al grupo de colaboradores se le ha planteado tres programas: uno -que se busca sea al que se acoja la mayoría- de reubicación en otras plantas del grupo empresarial, con lo cual se conseguirá que una mayoría siga contribuyendo dentro del grupo.
El otro programa es de jubilación voluntaria con beneficios adicionales a los de Ley y, finalmente, el plan de salida acordada, también con varias prestaciones, para quienes no vean oportunidades en los otros dos programas. Según el ejecutivo, Emisa debe encarar esta transformación ya que sus molinos datan de fines de la segunda guerra mundial y, aunque la calidad nunca ha decaído, la eficiencia en los procesos no es la mejor para enfrentar los retos de la competencia. Indicó también, que siendo la marca un ícono de Oruro debe mantenerse en el mercado y competir en mejores condiciones.
“Este equipamiento no puede responder a los desafíos que exige el actual mercado de la construcción. Ninguna empresa, (social, pública o privada) que quiera sostenerse en el mercado en las actuales condiciones podría hacerlo con la obsolescencia de los equipos”, aseveró Juan Pablo Bonifaz.