Alcaldías de alto riesgo
El sistema electoral lastra de manera fundamental las carreras políticas. Un candidato a un cargo ejecutivo que pierda se ve obligado a quedar en el dique seco durante toda una legislatura condenado así al ostracismo.



Líderes como Evo Morales, por ejemplo, no hubieran podido desarrollarse de la misma manera si tras frustrarse sus candidaturas en el ejecutivo no hubiera podido incorporarse al legislativo, con expulsión incluida que fue, sin duda, el acto involuntario que más le promocionó.La incertidumbre se apodera tanto de las alcaldías como de las subgobernaciones. Poner al mejor de los candidatos de una distrital para un cargo que se va a perder parece un tiro al pie. Quizá por eso en el Movimiento Al Socialismo (MAS) en Cercado todavía no se ha elegido candidato suicida y las diferentes familias andan haciendo proposiciones con más ganas de sacarse a alguien del medio (caso Poma, por ejemplo) que con la intención de ganar. Muy pocos de los asambleístas actuales, a pesar de que dicen representar a su provincia, están dispuestos a retornar a ellas y más al contrario, esperan dilatar la selección a ese cargo lo más que se pueda para que la premura exija la ratificación nomás de los actuales. (Hay también quien rumorea que hay que sincronizar la nominación con los cobros de aguinaldos) De momento, por parte del MAS, apenas se ha nominado para la reelección a Gladis Alarcón en Yunchará, Carlos Brú en Yacuiba y José Ermás en Caraparí y como nueva candidata Aluida Vilte en Padcaya, lo que obligaría a reubicar a José Gutiérrez en otra posta. Ninguno de ellos tiene ratificación oficial al igual que el alcalde de El Valle, Álvaro Ruíz, que electo por Camino al Cambio juega ahora al escondido para su reelección con avales múltiples.En la difusa parte opositora, Teodoro Suruguay estaría buscando su reelección en Entre Ríos, el otro José Gutiérrez en Bermejo, Wilman Cardozo dice, a veces, que irá a la Alcaldía de Yacuiba, y a Felipe Moza también lo nominan en Villa Montes, aunque algunos sospechan que prefiere un trabajo estable sin tantos sobresaltos, como el de asambleísta.De momento la única dupla confirmada es la de Rodrigo Paz alcalde – Alfonso Lema concejal, aunque tendrán que hacer un tridente con una mujer para cuadrar las normativas. Mientras el resto especulan, Paz y Lema, MIR – MNR, ya han empezado la campaña. Una campaña sui géneris prometiendo antiguos disfrazados de modernidad. En cualquier caso, perder con honestidad y dar todo en la campaña mirando de reojo a la Gobernación es también una forma para reclamar después un espacio en el ejecutivo. Eso sí, siempre que el suyo gane.