Ministra renuncia por contactos con Odebrecht en Perú
La ministra de Justicia, Ana Revilla, renunció ayer como secuela de la demanda millonaria de la empresa brasileña Odebrecht al Estado peruano y del confuso retiro de un importante procurador del procedo investigador a la compañía. Fuente del Ministerio de Justicia revelaron que Revilla...
La ministra de Justicia, Ana Revilla, renunció ayer como secuela de la demanda millonaria de la empresa brasileña Odebrecht al Estado peruano y del confuso retiro de un importante procurador del procedo investigador a la compañía.
Fuente del Ministerio de Justicia revelaron que Revilla decidió dimitir en medio de pronósticos de cambios ministeriales debido al manejo contradictorio de la crisis detonada por la revelación de un contacto gubernamental con la empresa.
Políticos derechistas opositores al acuerdo de la fiscalía anticorrupción con Odebrecht, por el que esta dio información clave sobre sobornos y financiamientos electorales en Perú, reclaman que varios ministros renuncien.
Las peticiones alcanzaron al primer ministro, Vicente Zeballos, quien la semana pasada declaró sobre la demanda de Odebrecht, que el Gobierno 'no negocia con corruptos', a Revilla y la titular de Economía, María Antonieta Alva.
La crisis motivó la dimisión del ministro de Energía y Minas, Jorge Luis Liu; y el cese del procurador estatal a cargo de las pesquisas sobre la corrupción de empresas brasileñas, Jorge Ramírez, por reunirse, el 9 de enero pasado, con representantes de Odebrecht.
En la cita la empresa pidió negociar un entendimiento que lleve al retiro de su demanda ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), sin llegarse a un acuerdo.
En la demanda, Odebrecht exige mil 200 millones de dólares como indemnización por la anulación del contrato de construcción del Gasoducto Sur Peruano, con un consorcio encabezado por la firma brasileña.
La información inicial, avalada por Liu, señala que este había recibido en su despacho a los emisarios de Odebrecht a pedido de Ramírez y que aceptó tras informarla a Zeballos, más no al presidente Martín Vizcarra, su amigo desde hace tres décadas.
Sin embargo, Ramírez declaró ayer que planteó el tema a la ministra Revilla tras conocer la demanda, en diciembre pasado, y fue ella quien hizo la gestión con Liu para la reunión del 9 de enero.
La confusa crisis, según el analista de centro-derecha Augusto Álvarez, tiene como 'chivo expiatorio' a Ramírez y que lo más probable es que en los días siguientes se anuncien más cambios en el gabinete ministerial.
Me imagino que echarán a las ministras de Economía y Justicia y que tendrá que irse el primer ministro, apuntó la comentarista Rosa María Palacios, quien coincidió con Álvarez que el cese de Ramírez coincide con los deseos de los enemigos del acuerdo fiscalía de Odebrecht y de la labor de los fiscales anticorrupción.
Los integrantes del equipo de la fiscalía que investiga los sobornos de empresas brasileñas lamentaron en un comunicado público que Ramírez haya sido retirado del caso y destacaron su participación activa en el proceso, la firma y la validación judicial de los acuerdos de colaboración con involucrados en hechos de corrupción.
El pronunciamiento agrega que Ramírez 'cumplió un rol preponderante dentro del avance de las investigaciones llevada a cabo por el equipo especial, desempeñándose de manera autónoma, honesta e idónea'.
Fuente del Ministerio de Justicia revelaron que Revilla decidió dimitir en medio de pronósticos de cambios ministeriales debido al manejo contradictorio de la crisis detonada por la revelación de un contacto gubernamental con la empresa.
Políticos derechistas opositores al acuerdo de la fiscalía anticorrupción con Odebrecht, por el que esta dio información clave sobre sobornos y financiamientos electorales en Perú, reclaman que varios ministros renuncien.
Las peticiones alcanzaron al primer ministro, Vicente Zeballos, quien la semana pasada declaró sobre la demanda de Odebrecht, que el Gobierno 'no negocia con corruptos', a Revilla y la titular de Economía, María Antonieta Alva.
La crisis motivó la dimisión del ministro de Energía y Minas, Jorge Luis Liu; y el cese del procurador estatal a cargo de las pesquisas sobre la corrupción de empresas brasileñas, Jorge Ramírez, por reunirse, el 9 de enero pasado, con representantes de Odebrecht.
En la cita la empresa pidió negociar un entendimiento que lleve al retiro de su demanda ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), sin llegarse a un acuerdo.
En la demanda, Odebrecht exige mil 200 millones de dólares como indemnización por la anulación del contrato de construcción del Gasoducto Sur Peruano, con un consorcio encabezado por la firma brasileña.
La información inicial, avalada por Liu, señala que este había recibido en su despacho a los emisarios de Odebrecht a pedido de Ramírez y que aceptó tras informarla a Zeballos, más no al presidente Martín Vizcarra, su amigo desde hace tres décadas.
Sin embargo, Ramírez declaró ayer que planteó el tema a la ministra Revilla tras conocer la demanda, en diciembre pasado, y fue ella quien hizo la gestión con Liu para la reunión del 9 de enero.
La confusa crisis, según el analista de centro-derecha Augusto Álvarez, tiene como 'chivo expiatorio' a Ramírez y que lo más probable es que en los días siguientes se anuncien más cambios en el gabinete ministerial.
Me imagino que echarán a las ministras de Economía y Justicia y que tendrá que irse el primer ministro, apuntó la comentarista Rosa María Palacios, quien coincidió con Álvarez que el cese de Ramírez coincide con los deseos de los enemigos del acuerdo fiscalía de Odebrecht y de la labor de los fiscales anticorrupción.
Los integrantes del equipo de la fiscalía que investiga los sobornos de empresas brasileñas lamentaron en un comunicado público que Ramírez haya sido retirado del caso y destacaron su participación activa en el proceso, la firma y la validación judicial de los acuerdos de colaboración con involucrados en hechos de corrupción.
El pronunciamiento agrega que Ramírez 'cumplió un rol preponderante dentro del avance de las investigaciones llevada a cabo por el equipo especial, desempeñándose de manera autónoma, honesta e idónea'.